¿Tablet o portátil?

Sería injusto enmarcar el nuevo dispositivo de Microsoft, recientemente puesto a la venta, dentro del mercado de las tablets. Tanto por especificaciones, como por precio, está claro que la Surface Pro 3 de la compañía está mucho más cerca de los portátiles, que de las tabletas.

Después de dos generaciones la gama Surface, Microsoft ha tenido tiempo suficiente para adaptar y perfeccionar la fórmula hasta dar en el clavo... casi.

Este Surface Pro 3 ha aumentado su pantalla y ha dejado atrás el formato 16:9, en pro de unos 4:3 que se convierten en un auténtico acierto que nuestros ojos agradecen. 

El nuevo chasis, fabricado con una aleación de magnesio, es ahora más delgado y más ligero que anteriores modelos de la gama. Esto, unido a algún que otro ajuste más, en beneficio de la experiencia de uso, puede convencer a más de uno de que, como asegura la propia Microsoft, este dispositivo puede reemplazar al ordenador portátil.

Y es que, en realidad, esta tercera generación del modelo Surface Pro está más cerca que nunca de lo que Microsoft considera que debería ser la informática portátil.

Este híbrido entre tablet y portátil es el más cuidado y más potente de los dispositivos presentes en el mercado. De hecho, tanto por diseño como por precio son muchos (incluida la propia marca) los que comparan directamente el Surface Pro 3 con el MacBook Air de 13 pulgadas (compararlo con el iPad sería injusto).

¿Exageración? Vamos a comprobarlo en este análisis de la Surface Pro 3 de Microsoft.

Diseño y teclado

Envuelto en una carcasa de magnesio, de color plateado verdaderamente elegante y suave al tacto, el Surface Pro 3 es un dispositivo totalmente "premium", como así deja reflejado su precio (1.299 € en el modelo que estamos analizando).

La tablet mantiene la forma trapezoidal de los modelos anteriores de la familia, pero Microsoft ha conseguido reducir el grosor de su cuerpo, resultando un terminal bastante más ligero.

Además, a lo largo del perfil superior de la Surface Pro 3 se encuentran unas nuevas rejillas de ventilación para disipar mejor el calor expulsado por su ventilador.

Microsoft también ha trasladado el botón de inicio de Windows hacia el perfil inferior de la tablet, alojado justo en el marco de cristal que envuelve la pantalla de 12 pulgadas de la Surface Pro 3.

Como producto más cercano al portátil, la Surface Pro 3 cuenta con un conector USB 3.0 y un Mini Display Port en el perfil derecho, justo encima del conector de la batería.

Los únicos botones físicos presentes en todo el terminal son los de volumen, situados en el lateral derecho de la tablet, y el botón de encendido y bloqueo, que se encuentran en el borde superior.

Algo más escondido (bajo el soporte abatible que permite mantener sujeto el terminal) encontrarás el lector de tarjetas MicroSD.

Este soporte plegable es ajustable a través de 150 grados, lo que supone una mejora respecto a los modelos anteriores de la marca, ya que ahora permite trabajar con la Surface Pro 3 en una amplia variedad de posiciones.

Haciendo su aparición en ambos lados de la Surface aparecen las cámaras de 5 mpx con capacidad de grabación de vídeo de 1080p.

No ofrecen una calidad pasmosa, como suele suceder en este tipo de dispositivos, pero cumplen con su cometido, que no es otro que su uso en la realización de videollamadas.

Apartado propio merece el teclado que acompaña a la Surface Pro 3.

Se trata de un accesorio que, aunque se venda por separado, es indispensable para usar el dispositivo con total comodidad (al menos sobre una superficie firme).

El teclado pesa 300 g y mide 5 mm de espesor. Se ajusta a la perfección con la tablet por medio de la banda magnética que se sitúa a lo largo del borde inferior de la misma y se pliega sobre la pantalla mantener el dispositivo a salvo de daños cuando no se está usando.

El accesorio en sí es cómodo, presenta un tamaño ideal, un touchpad que se convierte en imprescindible para aquellos que no se encuentran cómodos usando Windows de forma táctil e incluso cuenta con una luz de fondo ajustable a través de tres niveles de brillo diferentes.

No obstante, un teclado tan ligero y delgado es algo difícil de usar sobre las piernas, y las teclas dan la ligera sensación de ser algo endebles. Personalmente prefiero teclados como el de el ASUS Transformer Pad que analizábamos la semana pasada, pese a ser algo más pesados.

Pantalla

Una de las críticas más escuchadas en torno al Surface Pro de Microsoft era su pantalla táctil de unas diminutas 10,6 pulgadas. Con la lección aprendida, la tercera generación del dispositivo aumenta hasta las 12 pulgadas, incrementando su resolución hasta los 2160 x 1440 píxeles (desde los 1920 x 1080 píxeles).

El resultado es un modesto aumento modesto términos de píxeles por pulgada (de 207 pp se pasa a 216 ppp), dado el aumento de espacio en pantalla. 

Más llamativa es la es interesante elección que ha tomado Microsoft en cuanto al cambio de relación de aspecto de la pantalla. En lugar de quedarse con el formato de la Surface Pro 2, de 16: 9, la firma apuesta por los 4:3.

La compañía afirma que, con esta relación de aspecto, esta pantalla de 12 pulgadas puede mostrar más contenido que el panel del MacBook Air de 13,3 pulgadas y su relación de aspecto de 16:10.

Este movimiento también encuentra sentido a la hora de hacer que la tableta se asemeje más a bloc de notas cuando se mantiene en orientación vertical. 

La relación de brillo y contraste no sufre grandes alteraciones a la hora de visualizar el display desde diferentes ángulos de visión y la pantalla de la Surface Pro 3 ofrece una excelente calidad de imagen, presentando unos colores vivos y saturados.

Hardware y rendimiento

La tablet de Microsoft sale a la venta en una amplia variedad de especificaciones. Pasando por la elección de procesador, ya sea Intel Core i3, Core i5 y Core i7, se presenta unas opciones de almacenamiento que van desde los 64 GB SSD hasta los 512 GB.

Lógicamente, los precios varían dramáticamente según el modelo elegido. El modelo de gama baja se puede encontrar a partir de 799 euros, a los que habría que sumar los 129,99 euros que cuesta el teclado. En el extremo opuesto estaría el modelo con más altas prestaciones, superior a los 2.000 euros (si añadimos el teclado).

En el análisis de la Microsoft Surface Pro 3 hemos trabajado con el modelo de 256 GB SSD y CPU Intel Core i5 acompañada por 8 GB de RAM.

Con estas especificaciones, no sorprende que el rendimiento del dispositivo se encuentre muy por encima del mostrado por otras tablets de alta gama como la Samsung Galaxy Tab S o el iPad Air de Apple.

La CPU Intel Haswell Core i5, los 8 GB de RAM y los 256 GB de almacenamiento SSD, se acoplan a la perfección a otros portátiles presentes en el mercado, quedando algo más alejado del mercado de las tablets.

El uso de algunas aplicaciones, como Photoshop, es mucho más cómodo y fácil de usar en la Surface Pro 3, además de permitir tener abiertas muchas más apps al mismo tiempo.

No obstante, al contar con gráfica integrada en la CPU, el rendimiento gráfico no está preparado para trabajar con los juegos más actuales del mercado.

Teniendo en cuenta que se trata de un dispositivo pensado para la movilidad y no para el juego, el híbrido cumple a la perfección con su cometido.

Estos son los resultados obtenidos tanto en 3D Mark, como en PC Mark:

Dentro del hardware del tablet se incluye el nuevo lápiz óptico que Microsoft incluye en el paquete.

Este mejorado accesorio. que incluye una pequeña cita para guardarlo junto al teclado, funciona más que satisfactoriamente con la tablet, y más concretamente con la aplicación OneNote.

Cuenta con tres botones, uno superior que permite iniciar OneNote con sólo una pulsación, y dos en los laterales para seleccionar y borrar.

Aunque aún somos muchos los que no renunciamos a la comodidad de un bolígrafo y un cuaderno, es cierto que el uso del lápiz óptico deMicrosoftes lo más cercano que podemos encontrar a la escritura real.

Con diferentes niveles de presión, el uso del accesorio con OneNote es de lo más cómodo, consiguiendo emular con acierto, mejor que en otros dispositivos de la competencia, la sensación de escritura tradicional.

El punto negativo a la experiencia de uso del lápiz óptico es la escasa lista de aplicaciones compatibles con el accesorio de la Surface Pro 3.

Entre ellas se encuentran Adobe Dreamweaver CS6, Adobe Photoshop Elements 12 o Adobe Flash Professional CS6.

Por último, dentro del apartado de hardware, destacar el sonido que ofrecen los altavoces equipados en el dispositivo, de gran calidad y sin interferenias. 

Cámara y autonomía

Vamos a dejarlo claro: quien busque una tablet con una cámara más que decente, tiene un largo trabajo por delante.

A pesar de que en más de una ocasión hayas encontrado a ese tipo de usuarios que acuden a un evento, recinto, o acto social listos para sacar fotos con su tablet, la realidad es que estos dispositivos no son el medio idóneo para obtener grandes imágenes.

La Surface Pro 3, a pesar de contar con 2 cámaras de 5 mpx, peca del mismo problema que presentan estos terminales, la mala calidad de su apartado fotográfico.

Tanto la cámara frontal como la trasera presentan unas especificaciones muy justas para dedicarse a la toma de fotografías. No obstante, a la hora de realizar videoconferencias cumple con su cometido más que de sobra.

La cámara trasera ni siquiera ofrece enfoque manual, aunque si que permite realizar las capturas pulsando en cualquier lugar de la pantalla.

El software de la cámara no presenta funciones dignas de mención, más alla de poder controlar la exposición, ajustar el temporizador, cambiar la relación de aspecto y superponer una cuadrícula, que ayude en la composición, sobre la imagen.

Aquí puedes echar un vistazo a ejemplos de fotografías tomadas con la tablet de Microsoft, tanto en interiores como en exteriores:

En el apartado de batería es donde el dispositivo se queda más cerca de los portátiles que de las tablets. En las pruebas hemos mantenido el Surface Pro 3 con WiFi activado y un brillo al 75%. Navegando por la red con asiduidad y escuchando música alrededor de 2 horas, la duración de la batería se quedó cerca de las 6horas.

Aunque es una duración más que decente para un dispositivo que presenta una pantalla, Microsoft afirma que el dispositivo puede trabajar por un máximo de 9 horas sin necesidad de ser cargado, pero suponemos que esta duración ha sido testada con el mínimo brillo de pantalla y sin hacer uso de la reproducción de música y vídeo.

Software

El Surface Pro 3 viene equipado con Windows 8.1, lo que significa que el usuario puedes trabajar con la ya famosa interfaz Modern UI o directamente desde el escritorio de Windows.

Esto permite que, al presentar el mismo sistema operativo que un PC de escritorio, se puedan ejecutar tanto aplicaciones profesionales como apps de las tiendas de Microsoft.

La pantalla táctil facilita el uso de la interfaz de Modern UI, mientras que el touchpad, integrado en el teclado, permite trabajar en el escritorio de Windows con más comodidad.

Como todos sabemos, Windows 8.1 no está libre de errores y pueden sufrirse "cuelgues" o pantallazos azules repentinos. Durante las pruebas no hemos sufrido ninguno de estos problemas, a excepción de algún que otro fallo en el momento que la Surface Pro 3 se encontraba baja de batería y deseamos volver del estado de hibernación.

Este error parece que se ha repetido en distintos dispositivos según podemos leer en la red, por lo que es de esperar que Microsoft lance alguna actualización en el futuro.

Con el nuevo dispositivo de Microsoft podrás hacer casi todo lo que puede hacerse con un PC: desde edición de vídeo o imágenes a visualización de contenidos, pasando por la escritura gracias al duo que componen OneNote y el nuevo lápiz óptico.

La experiencia de uso de Windows 8.1 se multiplica por dos al contar con la posibilidad de trabajar con él de forma táctil, o mediante el ratón y teclado.

Aquí tienes un ejemplo del software que puedes encontrar en la tablet de Microsoft:

Conclusión

El Surface Pro 3 es un dispositivo excelente, mucho más cerca de los Ultrabooks que de las tablets.

Es elegante, presenta unos acabados de calidad, y es cómodo de utilizar. Ciertamente, podría decirse que Microsoft se ha quedado muy cerca de hacer olvidar al portátil.

El Surface Pro 3 es capaz de hacer todo lo que un ordenador portátil puede hacer, aunque con alguna que otra molestia.

Estas molestias hacen referencia a su uso, algo incómodo, sin teclado (que además se vende por separado) o al uso del dispositivo apoyado lejos de una superficie plana.

Si estás dispuesto a soportar estos pequeños "contras", que se ven suplidos con su uso como tablet, desde luego, tras lo visto en este análisis de la Surface Pro 3 de Microsoft, podemos afirmar que es la mejor opción a la hora de hacerse con un híbrido entre tablet y portátil.

Eso siempre que se esté dispuesto ha realizar un desembolso de consideración, ya que si quieres hacerte con el modelo de menor gama, con teclado, el precio final quedará por encima de los 900 €.

Si sólo buscas una tablet o un portátil, encontrarás mejores ofertas en el mercado que se ajustarán a tus necesidades, pero si lo tuyo son los covertibles, el dispositivo de Microsoft es lo mejor (de lo mejor) que puedes encontrar.