¿Os acordáis de esa escena de Terminator 2 en la que el T-1000 se materializaba en metal líquido? Pues ahora imaginaos el mismo proceso realizado por una impresora 3D. Esta tecnología ha sido desarrollada por Carbon3D, y permite materializar objetos a través de una resina líquida y luego solidificarlos a gran velocidad gracias a un sistema de luz digital y oxígeno. 

Los modelos actuales de impresoras 3D suelen tardar bastante a la hora de materializar un producto. Sin embargo, al realizar el proceso de manera inversa, puede fabricar el artículo de 25 a 100 veces más rápido que el resto de productos similares. 

La primera impresora 3D de Carbon3D fabrica el producto sólido desde una piscina de resina líquida. Esto se logra gracias a una propiedad de este material llamado fotopolimerización, que consiste en la solidificación del elemente al ser expuesto a la luz ultravioleta. 

Esta impresora 3D inspirada en Terminator 2 es usar un haz de luz ultravioleta dentro de la piscina que le da forma al diseño. Para evitar que el artículo se endurezca dentro del recipiente, Carbon3D ha incorporado una capa de oxígeno en el fondo de la piscina. De esta forma, consiguen fabricar un objeto de una sola pieza. Gracias a ello, la textura es más lisa y homogénea.

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Esta nueva tecnología se conoce como Continuous Liquid Interface Production, más conocida como CLIP, y la mejor forma de explicarla es que la veáis vosotros mismos en los vídeos que os dejamos a continuación. 

La impresora 3D se ha presentado en la TED2015 y estamos seguros de que supondrá una verdadera revolución en la industria.

[Fuente:ScienceAlert]