Problemas para Tesla: sólo ha entregado 220 Model 3
La expectación en torno a cadanuevo coche eléctricodeTeslaes máxima, aunque quizás estemos sobreestimando el valor de la compañía. Al fin y al cabo, el objetivo de un fabricante de vehículos es vender, y para poder hacerlo primero hay que ser capaz de fabricar esos coches, cosa que parece no estar consiguiendo la firma dirigida por Elon Musk.
ElTesla Model 3es la principal apuesta de la marca para 2017, aunque por ahora está siendo todo un fiasco. Aunque las reservas -ya pagadas- son muchas, resulta que en el tercer trimestre del año sólo se han entregado 220 unidades, insuficientes para situar a Tesla como la marca tan importante que parece ser.
La escasa producción se achaca en un comunicado a "cuellos de botella en la producción", aunque Tesla afirma que "no hay problemas en la cadena de producción del Model 3", dos afirmaciones que son claramente contradictorias. Si no hubiera problemas no habría cuellos de botella y se habría entregado las 1.600 unidades que Elon Musk estimó para agosto y septiembre.
Por suerte para la compañía, no sólo del Model 3 vive Tesla. Los Model S y el Model X, que pudimos probar hace poco, sí se han producido casi con total normalidad, aunque acumulan cierto retraso. Estos dos coches eléctricos han salvado la papeleta para un fabricante que ya afronta problemas serios para concluir sus megafactorías y cubrir la demanda, aunque ellos dirán que bendito problema tienen.
¿Merece la pena comprar ya un coche eléctrico? Respondemos esta difícil pregunta
Pese a los contratiempos, la aceptación en el mercado automovilístico de sus vehículos es el principal apoyo para la expansión internacional de Tesla, que acaba de abrir sus primeras tiendas físicas en España. Es sólo el primer paso de un progreso en el que tendrá que verse las caras con los principales fabricantes, poco dispuestos a ceder terreno.
El otro interrogante que se abre para el futuro de esta compañía y de todas las que fabrican coches eléctricos tiene que ver con la energía. Por ahora la red eléctrica de cualquier país que se precie es incapaz de proporcionar electricidad suficiente para recargar las baterías de tantos coches eléctricos como se quieren vender. Es un problema que de no solucionarse podría estallar en los próximos años.
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