Sanford Wallace es un ciberdelincuente que se llama a si mismo "Spam King", o Rey del Spam en castellano, un nombre que se lo ha ganado debido a sus actos y que demuestra la exagerada obsesión que tiene con enviar mensajes de spam masivos en Internet, el más reciente a través de la red social Facebook.

Este usuario llevó a cabo un ataque de spam masivoenFacebook entre noviembre de 2008 y marzo de 2009 afectando a más de 50.000 cuentas de usuarios de Facebook. En total, envió alrededor de 27 millones de mensajes no deseados, en los que incluía un enlace que al abrirlo robaba las credenciales del usuario en cuestión y extraía su lista de amigos.

Después, teniendo el control de estas cuentas por haber hecho clic en el enlace y contando con la lista de amigos de cada usuario, envió más mensajes a todos estos contactos. De este modo las víctimas eran redireccionadas a otras webs con el objetivo de aumentar el tráfico de visitas en determinadas páginas, con lo que Wallace ganaba dinero.

Sanford Wallace nació en el año 1968 e inició su historial como "Spam King" enviando una gran cantidad de fax basura. Esta técnica era una práctica muy utilizada por la que se mandaban anuncios que el destinatario no había pedido, algo que fue prohibido en Estados Unidos en el año 1991.

En el año 1990 dirigía una compañía llamada Cyber Promotions cuyo único objetivo era enviar correos electrónicos con anuncios no deseados con la intención de ganar dinero. De hecho, el nombre de su compañía estaba en la lista negra de remitentes de emails, y el gobierno de Estados Unidos y gigantes de Internet como Facebook o MySpace fueron tras él.

Cómo combatir el spam telefónico

Estas dos últimas redes sociales presentaron demandas civiles contra él, y se le acabó prohibiendo el acceso a Facebook, algo que no tardó mucho en desobedecer. Ahora, por todos estos delitos acumulados Sanford Wallaceha sido condenado a 30 meses de prisión y a pagar una multa de 310.000 dólares, declarándose así mismo culpable de todas estas actividades.

Además, el juez que impuso esta sentencia también ordenó someter al acusado a un tratamiento médico y mantenerlo en un periodo de prueba que durará 5 años a partir del momento que salga de prisión. Y, por supuesto, se le ha prohibido el uso de cualquier dispositivo electrónico a menos que obtenga permiso de libertad condicional.

[Fuente: Telegraph]