Irán bloquea el porno y rompe Internet en varios países
La censura es una práctica común en varios países. En la era analógica era tan fácil como secuestrar una publicación de papel. Con Internet, en cambio, la cosa no es tan fácil, aunque lo intentan. Iránsuelebloquearlaswebs de porno online, aunque por el camino acabe rompiendoInterneten varios países, como ha ocurrido recientemente.
Evidentemente, romper Internet es un eufemismo, aunque para los usuarios que sufrieron la desconexión temporal a ciertas páginas webs no es un asunto para tomar a la ligera, sobre todo proveniendo el bloqueo de un gobierno extranjero. En su intento porbloquearel pornoenInternet, Irán acabó censurándolo en lugares tan lejanos como Hong Kong.
No es la primera vez que ocurre. Aunque el protocolo de conexión es robusto, que un gobierno intente bloquear el acceso a ciertas páginas webs a sus ciudadanos puede acabar provocando problemas en todo el planeta. Esto se debe a la forma que tienen las agencias de seguridad de evitar que una IP se conecte a un servidor.
El método más habitual es hacerlo a través de la compañía proveedora de los servicios. En países con acceso limitado a Internet, suelen ser pocas las que dominan el mercado. A veces, incluso se trata de una empresa estatal que lo explota en régimen de monopolio. Es el caso de Irán, cuya única empresa de telecomunicaciones colabora para desconectar las webs porno e impedir que sus clientes puedan acceder a ellas.
En su celo porcensurareste tipo de contenido, Irán ha recurrido a un método poco ortodoxo. Es el secuestro del Border Gateway Protocol o Secuestro de BGP, consistente en marcar como falsas varias rutas de conexión a una página web o simplemente crear nuevas que llevan a ninguna parte. Suele funcionar bien, aunque los más expertos siempre encuentran una forma de saltarse el bloqueo.
Habitualmente, esta práctica no suele causar mayores problemas. Simplemente los usuarios de un país encuentran la página en blanco al acceder, dando por hecho que se ha caído temporalmente. El problema es que, de las miles de rutas de acceso a una misma web, hay compañías que dan prioridad a unas pocas, consideradas más rápidas. Si este puñado de accesos son falsos, sus clientes tienen un problema.
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Así es como Irán ha logrado evitar que personas en Hong Kong o Rusia no puedas ver su ración devídeos porno online, marcando como falsas varias rutas para acceder a las webs. Simplemente se les fue de las manos el ímpetu en el uso del Secuestro de BGP.
[Fuente: The Verge]
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