Twitter puede predecir el riesgo de sufrir un infarto

Las enfermedades cardíacas son la primera causa de muerte en el mundo, superando a otros factores como el cáncer o el tabaco.

Los científicos están buscando nuevas herramientas de bajo coste parapredecir los infartos, y al parecer la han encontrado: Twitter.

A los psicólogos de la Universidad de Pensilvania se les ocurrió analizar 148 millones de tuits provenientes de 1347 condados de Estados Unidos, en busca de tuits negativos, que hablasen deestrés y de falta de sueño. Colocaron estos tuits negativos en un mapa, y descubrieron que era tremendamente simular al mapa de muertes por infartos que manejan las autoridades médicas norteamericanas, tal como puedes ver en la siguiente imagen. A la izquierda se muestra el mapa de muertes certificadas por enfermedades cardíacas, y a la derecha, el creado por Twitter a partir de tuits negativos:

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Como se puede ver, los dos mapas son preocupantemente similares... De hecho el mapa deTwitteres más preciso que el que ofrecen los estudios demográficos o socioeconómicos parapredecir los infartos.

El estudio relaciona lostuits negativos que hablan deestrés y falta de sueñocon la mortalidad porataques al corazón, pero hay una importante discrepancia: la media de edad de los tuiteros es de 35 años, pero la mayoría de muertes por problemas del corazón se producen a partir de los 60 años. Por tanto, esos tuits negativos no se corresponden con gente que muere por un infarto, al menos a corto plazo.

Los psicólogos encargados del estudio argumentan que eso es cierto, pero que la coincidencia de los mapas refleja que el ambiente sociogeográfico influye en los problemas de corazón. Del mismo modo, si un tuitero de 35 años que reconoce sufrir estrés y falta de sueño no corrige su modo de vida, posiblemente sufrirá enfermedades cardíacas cuando tenga 60 años...

Es por eso que estos mapas generados porTwittersobre los riesgosdeinfarto se van a usar para lanzar campañas de prevención en zonas en donde dicho riesgo sea alto.

[Fuente: Popular Science]