Audi A8 (2019), el primero con nivel tres de conducción autónoma
Jakub Motyka
El coche autónomo ya está llamando a las puertas de la industria del automóvil, pero todavía falta mucho tiempo para que los proyectos de Google, de Uber o incluso de la propia Apple estén listos para circular por la carretera. De los cinco niveles que se utilizan para calcular la capacidad de conducción autónoma de un coche, lo normal es que ningún modelo del mercado -ni el Model S de Tesla- pase del nivel dos. Pero el nuevo Audi A8 (2019) presume de conducción autónoma de nivel tres.
Durante la presentación de su nueva berlina de lujo -compite contra alternativas como el BMW Serie 7 o el Clase S de Mercedes-, la marca alemana Audi ha sorprendido a todo el mundo al anunciar que el A8 de 2019 es capaz de alcanzar el nivel tres (de 5) de conducción autónoma. Pese a que la diferencia entre el nivel dos (el que tienen muchos coches hoy en día) y el nivel tres (el de este coche de Audi) es muy difusa, ya que incluso con el nivel tres sigue siendo necesaria la atención del conductor, este salto de un nivel a otro revela lo cerca que está el coche autónomode cambiar para siempre el mercado del automóvil.
En este Audi A8 (2019), el coche se encarga de toda la conducción hasta una velocidad de 60 kilómetros por hora. La gran novedad respecto a los coches con nivel dos de conducción autónoma (en los que se incluyen desde los coches de Tesla hasta otros modelos de fabricantes generalistas como Volkswagen, Ford e incluso la propia Audi) es que, en este caso, el conductor no está obligado a llevar las manos en el volante. Hasta los 60 km/h, el coche es el que acelera (incluso desde parado), frena y se mantiene en su carril. Todo esto, por supuesto, solamente funcionará en autopistas en las que los dos sentidos estén separados por una mediana.
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Pese a que todavía faltan muchos detalles por resolver acerca de este sistema de conducción autónoma de Audi, el cual empezará a estar disponible a partir del próximo año, lo que no se puede negar es que la marca alemana ha conseguido resolver una de las mayores limitaciones de los actuales sistemas de conducción semi-autónoma: la obligación de llevar siempre las manos en el volante. En este sistema, alimentado por la tecnología de inteligencia artificial Audi AI, el conductor es libre de quitar las manos del volante durante la conducción autónoma.
Pero, ¿significa eso que en este Audi A8 (2019) el conductor puede estar distraído, leyendo un libro o viendo una película, mientras se desplaza por la autopista hasta su trabajo? Teóricamente, sí, pero todo depende de las leyes de cada país. Las normativas de cada país son las que empezarán a regular estas situaciones a lo largo de los próximos años, pero la realidad es que el sistema de inteligencia artificial de Audi ya es capaz de gestionar por sí mismo la conducción en autopista sin necesidad de la ayuda de un humano.
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En lo que sí será necesario que el conductor retome la conducción será en las situaciones en las que el coche no sepa cómo resolver un imprevisto. De ahí que todavía ni siquiera este Audi A8 de 2019 pueda presumir del nivel 5 de conducción autónoma, en el cual algún día no existirá la necesidad de intervención humana en ningún caso.
Por lo tanto, los futuros propietarios de este Audi (aquellos que se puedan permitir pagar los 90.600 euros que costará la versión base) se pueden ir olvidando de dormir mientras el coche viaja por la Autobahn hasta el trabajo. Además, en los viajes a velocidades superiores a los 60 km/h sí será necesario que el conductor mantenga las manos en el volante.
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Toda esta tecnología del Audi A8 (2019) viene también acompañada de otras funciones tales como el aparcamiento remoto, que permite aparcar (o sacar de una plaza de garaje) el coche desde el móvil, o una suspensión inteligente que adapta su configuración en base a las circunstancias de la carretera.
¿Y cuándo llegarán los coches cien por cien autónomos? Según los pronósticos más optimistas de Elon Musk, incluso el nivel cuatro (de los cinco que hay) se hará esperar hasta por lo menos el año 2019, y de momento nadie se atreve a pronosticar la fecha en la que los coches sin conductor estarán listos para sustituir al humano al volante. Para eso, por desgracia, seguramente todavía quede mucho tiempo.
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