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La ciencia lo demuestra: borrachos y enamorados piensan igual

Miguel Morales

alcohol amor

Una vez más, vamos a hablaros de las maravillas del cerebro humano. Parece ser que al investigar el procesador que tenemos por cabeza, los científicos de la universidad de Birmingham han encontrado que el atontamiento producido por el alcohol y el producido por el amor tienen mucho en común. 

La clave parece ser la oxitocina, una hormona que se mueve por nuestro cerebro y que básicamente, nos ayuda a ser felices. Promueve la confianza, nos hace altruistas, generosos, y nos ayuda a deshinibirnos. Esta hormona está presente cuando las madres dan a luz, también aparece en las mentes de la mamá y el papá nueve meses antes.

Un escáner cerebral que te dice si estás enamorado

Así que tenemos una hormona que nos hace sonreir, que está relacionada con la felicidad pura, que se hace patente en distintas situaciones... y parece ser que las dos situaciones que más se parecen al liberar esta hormona son la borrachera y la sensación de enamoramiento. 

Por supuesto, hay momentos en los que se libera más oxitocina (mucha más), pero no se parecen tanto entre sí. Por ejemplo, durante el sexo, al comer o al jugar a juegos de azar. Todo esto hace que nuestro cerebro acabe nadando en jugo de la felicidad.

Al margen de esto, resulta que el cerebro también es algo tonto. Si se encuentra en un momento en el que, por cualquier motivo está empapado en oxitocina y conocemos a alguien, nuestra mente prodría interpretar esa felicidad como amor.

Vamos a atrevernos incluso a formular una teoría curiosa: si los juegos de azar provocan felicidad que se puede confundir con amor, eso explicaría por qué en Las Vegas hay tantas capillas para bodas relámpago. Tiene sentido, y además vendría a demostrar una vez más que el el ser humano es un genio idiota. 

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Etiquetas: estudios, alcohol