Una lona publicitaria que elimina la contaminación en Madrid
Las marcas están cada vez más comprometidas con la conservación del medio ambiente, y muchas de ellas han incorporado estos valores a su filosofía de responsabilidad social como una forma de identidad corporativa y diferenciación.
Podemos ver un ejemplo de esta tendencia en Shiseido. Con motivo del lanzamiento de Ultimune Eye, un nuevo producto dedicado a potenciar la inmunidad de la piel, la multinacional japonesa de productos cosméticos ha instalado en la Gran Vía de Madrid la primera lona publicitaria de Europa que destruye la contaminación.
Este soporte publicitario tiene una extensión de 1.000 metros cuadrados y tiene la capacidad de purificar el aire del entorno gracias a su composición a base de dióxido de titanio. Este material puede llevar a cabo un proceso denominado fotocatálisis, una reacción química que descompone el CO2 en sus distintas moléculas cuando se pone en contacto con la luz, el aire y la humedad.
Las propiedades del dióxido de titanio ya han sido anteriormente explotadas por la NASA, y el compuesto químico se ha utilizado en programas piloto para eliminar la contaminación en Nueva York y Tokio, con acciones como barnizar fachadas de edificios con este material, incorporarlo en la pintura de los hoteles o incluso impregnarlo en los asientos de los trenes para deshacerse de la suciedad que generan los viajeros.
Según explican los representantes de Shiseido, esta lona puede eliminar hasta un 85% de los gases de efecto invernadero generados por los coches, como el metano o el óxido de nitrógeno, lo que equivale a reducir la contaminación de 50 vehículos que circulan por la Gran Vía madrileña.
Esta acción forma parte del programa de responsabilidad social de la marca de cosméticos, que también incluye otras medidas que tienen la finalidad de reducir las emisiones contaminantes a la atmósfera.
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