Logo Computerhoy.com

MIT construye músculos sintéticos de bajo costo a base de nailon

Inés Pérez

Músculo sintético a base de nylon

Los investigadores han estado tratando de construir músculos sintéticos duraderos y de bajo costo durante años, pero ha sido en vano.

Los sistemas desarrollados han sido o demasiado caros para producir en masa (como el nanotubo de carbono) o demasiado delicados e intensivos de energía (como las aleaciones de memoria de forma) para ser útiles fuera de las condiciones de laboratorio.

Pero un equipo del MIT acaba de dar en el clavo con unos robo-músculos fabricados a base de fibra de nailon, de todas las cosas.

El secreto, según un informe publicado el miércoles en la revista Advanced Materials, radica en cómo se forman y calientan las fibras.

Las fibras de nailon tienen una propiedad natural extraña que cuando se calienta se contraen en longitud, pero se expanden en diámetro. Esto las hace ideales para el movimiento lineal, como elevar un peso hacia arriba.

Pero conseguir que el nailon se doble al contraerse no es tan simple. Normalmente, conseguir que el nailon se doble a medida que se calienta requiere que las poleas absorban la holgura, lo que añade peso, complejidad y costo al sistema, las tres cosas que se desean evitar al crear una tecnología de producción en masa.

Pero el equipo del MIT descubrió una solución inteligente.

Materiales biodegradables para que los robots sean ecológicos.

Utilizando un filamento de nailon normal, el equipo primero lo comprimió para cambiar la sección transversal de la fibra de circular a cuadrada. A continuación, calentaron sólo un lado de la fibra, haciendo que se contrajera más rápido que el lado no calentado y obligando a toda la hebra a doblarse.

La fuente de calor puede ser cualquier cosa, desde la resistencia eléctrica hasta las reacciones químicas, incluso los láseres. Las fibras son sorprendentemente elásticas, duran 100.000 ciclos y son capaces de contraerse hasta 17 veces por segundo.

Este avance podría prestarse a una amplia variedad de aplicaciones industriales y comerciales. Por ejemplo, ropa que se contrae automáticamente para ajustarse a tu forma corporal exacta, lo que significa que todo en el rack en la tienda es de tu tamaño.

Estas fibras también podrían utilizarse en automóviles y aviones. Con estas fibras, el exterior de un vehículo podría remodelarse sobre la marcha para minimizar la resistencia.

La tecnología podría incluso prestarse a los catéteres autoajustantes para las bombas de insulina. Y eventualmente, incluso podemos verlos en los músculos biomiméticos de robots

Conoce cómo trabajamos en Computerhoy.

Etiquetas: MIT