Niño de once años hackea su osito de peluche usando el móvil
Gustavo Rodriguez
Basta con ojear las últimas noticias relacionadas con ciberseguridad para comprobar cómo cada vez es mayor el número de hackers jóvenes, adolescentes e, incluso, niños. El terreno de la informática es el perfecto campo de pruebas para estas mentes curiosas y, de nuevo, otro portento del ciberespacio, un niño de once años, ha sorprendido a toda una comunidad de expertos en ciberseguridad al hackear el dispositivo Bluetooth de su móvil para controlar su osito de peluche robótico.
De esta manera, Reuben Paul, el ya mundialmente conocido estudiante de sexto grado en la escuela de Austin (Texas), demostraba cómo los juguetes inteligentes pueden llegar a convertirse en un arma. El suceso tuvo lugar en una conferencia de seguridad cibernética celebrada en los Países Bajos.
El joven Reuben dejaba así impresionados a todos los asistentes del evento. "De los aviones a los automóviles, de los teléfonos inteligentes a las casas inteligentes, cualquier cosa o cualquier juguete puede ser parte de la Interntet de las Cosas", explicaba el pequeño en una entrevista para The Guardian; y terminaba apuntando: "De los Terminators a los osos de peluche, cualquier cosa o cualquier juguete puede ser armado".
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El ninja informático demostró cómo su oso de peluche se conectaba a la nube a través del WiFi y recibía mensajes usando Bluetooth. Durante su exposición, conectó su ordenador portátil con una Raspberry Pi.
Una vez dispuesto, Reuben Paul rastreó el hall buscando dispositivos Bluetooth disponibles. Encontró entre los asistentes, y para sorpresa de muchos, docenas de números, incluyendo los de algunos altos cargos de la sala. Entonces utilizó uno de estos números para acceder al sistema de su oso de peluche y, empleando el lenguaje de programación Python, encendió una de sus luces y grabó un mensaje para la audiencia.
"La mayoría de los que están conectados a Internet tienen Bluetooth..., básicamente mostreé cómo podía conectarme a él, y enviarle órdenes, grabando audios". El joven hacker no dudó en ser contundente: "Un juguete incluso podría decir 'ven conmigo a este lugar y te recogeré'".
Este no es el primer hackeo de Reuben, ya apuntaba maneras cuando consiguió controlar un coche teledirigido de juguete. Ahora, y aprovechando su merecida nueva visibilidad, tiene intención de montar una organización sin ánimo de lucro llamada CyberShaolin. El objetivo de este proyecto es "informar a los niños y adultos sobre los peligros de la ciberseguridad".
[Fuente: The Guardian]
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