Ni 24 horas han pasado desde que Google se cargara de golpe y plumazo las cuentas de los Google Pixel acusados de protagonizar casos de reventa. Pero parece que la presión ha podido con la compañía, porque las cuentas de los Pixel de reventa baneadas están empezando a funcionar de nuevo con normalidad.

Hasta 200 revendedores se encontraron ayer de la noche a la mañana con su cuenta de Google cancelada después de haber comprado uno o más Pixel en Estados Unidos para su posterior reventa. Estos usuarios fueron simplemente expulsados de la red de Google, y no podían ni revisar sus correos electrónicos, ni acceder a Google Fotos para recuperar sus fotos ni entrar en Google Drive.

La medida extrema que tomó Google no se vio motivada tanto por la reventa en sí, sino por la triquiñuela que estos revendedores utilizaron para comprar los Google Pixelsin pagar impuestos.

Hace 24 horas, Google canceló 200 cuentas por la reventa de los Pixel

Porque lo que en realidad enfadó tanto a los responsables de la compañía de Mountain View fue la sucia jugada que estos casi 200 revendedores utilizaron para ganarse un dinero extra en la operación. En lugar de comprar los Google Pixel y Pixel XL tal y como lo haría cualquier otra persona, lo que decidieron hacer estos usuarios fue comprar los móviles utilizando como destino un estado de EEUU en el que no se pagan impuestos por las compras de ningún producto.

En este estado, New Hampshire (en la región de Nueva Inglaterra), al parecer había una tercera parte que se encargaría de la reventa de los Pixel y, después, repartiría los beneficios con los "inversores" que realizaron la compra del teléfono.

Tras las críticas recibidas por parte de los afectados, Google se ha echado atrás y ha decidido devolver las cuentas a sus propietarios. Los afectados que han accedido de nuevo a su correo electrónico se han encontrado con un mensaje de Google en el que se les informa de que la compañía ha considerado sus peticiones y ha decidido activar de nuevo las cuentas.

Hemos probado el Google Pixel XL, y aquí puedes leer nuestras primeras impresiones

[Fuente: The Guardian]