Según parece, investigadores de Zimperium Mobile Labs aseguran haber descubierto una vulnerabilidad que afectaría al 95% de los teléfonos Android. Para iniciar el ataque, los hackers sólo tendrían que enviar un mensaje de vídeo modificado. Dicho mensaje puede rodear sin problema las medidas de seguridad de Android, burlándolas por completo. 

Este mensaje consigue ejecutar un código de acceso remoto, que permite que la persona que ha enviado el mensaje tenga acceso a nuestra memoria de almacenamiento, la cámara, el micrófono... por supuesto, sin que nosotros tengamos que concederle ningún tipo de permiso. Si todo esto os parece demasiado complicado, a lo mejor tenéis que echar un vistazo a este vídeo explicativo antes.

A esta técnica de hackeo se le llama "Stagefright", que también es el nombre que recibe el software de Android que se utiliza para procesar vídeo, y también el software que permite este hackeo. 

En muchos casos, el dispositivo comenzará a procesar el vídeo incluido antes incluso de que el usuario abra el mensaje, con lo que si el mensaje llega en mitad de la noche el hacker dispondrá de horas para hacerse con nuestra información, insertar códigos maliciosos de control y, básicamente, hacer lo que le venga en gana, antes de que nos demos cuenta. 

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Porque una vez que el hacker tiene acceso total a nuestro teléfono gracias a esta vulnerabilidad de Android, con lo que el primer paso lógico sería eliminar el mensaje. No se dejan pistas, y ya se tiene acceso ilimitado a nuestro teléfono sin nada que les delate.

Por suerte, ya se ha avisado a Google, y la compañía está preparando un parche para solucionar el hackeo a Android. Estas cosas no suelen tardar, y ya se sabe que cuanto más peligroso es el bug y a más dispositivos afecta, más prisa se dan. 

Así que cuando, mañana o pasado mañana, llegue un actualización de Android, más os vale instalarla sobre la marcha. Podría ser algo bastante necesario.