Logo Computerhoy.com

Cómo activar el arranque rápido en Windows 10

Leandro Crisol

Cómo activar el arranque rápido en Windows 10

Si has actualizado a Windows 10 desde una versión anterior independientemente de si es Windows 7 o Windows 8.1, lo más normal es que de haberse realizado correctamente hayas notado una mejoría en el rendimiento, o que como mínimo este se haya mantenido igual. Sin embargo, ¿qué ocurre si no es así y solo ha empeorado?

Es algo que puede pasarle a cualquiera, y a parte de comprobar el estado de tu instalación como recomendaba en un artículo anterior, hay otra cosa que puedes probar si tu problema es que ahora el equipo tarda mucho en encenderse. Para ello, existe una característica llamada arranque rápido que seguramente mejore la situación.

Realmente la aparición del arranque rápido no se ha producido con Windows 10 ya que está disponible desde la versión anterior a esta, y es una función basada en el uso de la hibernación. Para lograr la mejoría comentada, lo que el sistema hace es hibernar el núcleo del sistema operativo para que cuando lo encendamos no tenga que volver a cargar todo esto.

Por otra parte, aunque activemos este modo la hipotética mejoría que deberíamos notar no se verá reflejada cuando utilicemos la función de reiniciar el sistema, ya que de por sí con ella lo que hacemos es volver a cargar todos los datos y aplicaciones forzando una carga completa del sistema.

Teniendo esto en cuenta, si quieres activar el arranque rápido lo primero que deberás hacer es, obviamente, comprobar si el sistema no lo ha activado previamente por defecto. Para ello, en la barra de búsqueda de Cortana escribimos "Opciones de energía", y dentro de ella hacemos cli en la opción "Requerir contraseña la reactivarse" en la parte izquierda.

Cómo activar el arranque rápido en Windows 10

Al hacerlo, dentro de esta sección podremos ver las diferentes formas de apagado que el sistema nos ofrece y cuáles tenemos activadas. La primera de ellas es la que buscamos, "Activar inicio rápido", y solo deberás marcarla para utilizarla, aunque si no te deja arriba encontrarás la opción "cambiar la configuración actualmente no disponible".

Con esto solo te queda darle al botón para guardar los cambios, y probar a apagar y volver a encender tu equipo para comprobar si se ha producido algún cambio.

Tu equipo debería experimentar una mejoría, aunque lógicamente cada dispositivo es diferente a la hora de ofrecernos un rendimiento u otro aunque sean prácticamente iguales. Si quieres deshacer este cambio, solo tienes que volver al apartado mencionado y desmarcar la casilla que previamente activaste.

Conoce cómo trabajamos en Computerhoy.

Etiquetas: Microsoft, Windows 10