Asus VivoBook Slate 13 OLED, análisis y opinión

Asus es una de esas compañías que siempre está intentando cosas nuevas. Lo hemos visto tanto en sus teléfonos móviles (donde experimentan con flagships compactos como el Zenfone 8 o con cámaras 'flip' como la del Zenfone 7) como en sus portátiles.

Dentro de los portátiles, la compañía taiwanesa tiene muchísimas ganas y distintas familias, pero más allá de la potencia bruta o de características estelares como pantallas dobles, puedo decirte que el dispositivo que más me ha sorprendido de estos últimos años es este Slate.

Y es que, en cuanto lo sacas de la caja tienes una impresión de producto muy premium, pero luego te das cuenta de que es un producto, realmente, de gama media que, sin embargo, tiene dos elementos de primer nivel: la pantalla y el diseño. 

Vamos con la review de este VivoBook Slate 13 OLED y te lo cuento, pero la primera pista de por qué me ha gustado tanto ya la tienes en el nombre del dispositivo.

Apartados del análisis del Asus VivoBook Slate 13 OLED:

• Diseño: Asus ha conseguido su propia identidad y este VivoBook Slate es su máximo exponente
• Pantalla: introduciendo los paneles OLED en las gamas intermedias
• Rendimiento y autonomía: más para ofimática que para creadores de contenido
• Conclusión: un PC que es un trampantojo

Asus ha conseguido su propia identidad y este VivoBook Slate es su máximo exponente

Como digo, el diseño es una de las claves de este dispositivo. Estamos ante un PC 2 en 1, lo que significa que tenemos Windows completo, pero en un formato de tablet que es muy, muy portátil, pero al que le podemos agregar un teclado para convertirlo en un ultraportátil.

El empaquetado es espectacular. No sé (no creo) si esto es lo que te encontrarás si decides comprarlo, pero se nota en cada milímetro de las cajas y bolsas que todo está cuidado al milímetro. El equipo no llega a los 600 euros, pero parece mucho más caro.

Y esta sensación la tuve tanto por la caja como por el propio dispositivo. Para empezar, aquí debo hablar de tres elementos. Por un lado tenemos la tablet, que cuenta con los puertos, las cámaras, el lector de huellas y... bueno, todo lo que necesitas para utilizar el equipo.

El perfil del equipo es muy delgado y en el lateral derecho tenemos los controles de volumen, un botón de encendido/bloqueo/lector de huellas capacitivo en la parte superior y el resto de conectores en el lateral izquierdo. Todo esto, claro, hablando desde el punto de la tablet en horizontal.

Aquí no entra un USB-A, pero tenemos dos USB-C que, además, nos permiten cargar el equipo y el lector de microSD. Habría agradecido un lector SD completo, pero entiendo que el espacio es el que es y, además, como yo uso microSD en mis cámaras... no me ha impedido trabajar cómodamente.

En la parte inferior tenemos una serie de pines que son los que, junto a una serie de imanes, nos permiten colocar el teclado. Es un teclado extraíble como el de un Surface y, a su vez, hace de protector de pantalla.

Me ha gustado el tacto de las teclas, creo que es muy cómodo para trabajar durante varias horas seguidas y, además, el touchpad es preciso y con un tamaño adecuado al que hay disponible, que tampoco es mucho. Lo que he echado de menos es la retoiluminación, pero claro, el precio es el que es, así que veo lógico que no tenga teclas retoiluminadas.

Y, por otro lado, tenemos un tercer elemento que podemos anclar a la tablet: una trasera magnética que sirve como soporte para poder colocar el equipo en una mesa y trabajar como si fuera un portátil.

Es un conector magnético, nada de adhesivos que hemos visto en otros modelos, y creo que la sujeción es fuerte y fiable. Y una cosa, cuando lo puse la primera vez, no lo quité. 

Es cierto que añade algo de peso, pero al final he estado usando esto como un portátil más que como una tablet y, cuando me he querido tumbar en el sofá, lo que dejo en el despacho es el teclado y listo.

Habría estado genial que en la trasera tuviera una patilla como los Surface (te recuerdo nuestro análisis del Surface Pro 8) o como en Switch OLED, pero imagino que eso también habría incrementado el grosor o el precio.

Y algo que me ha encantado es que por todo el cuerpo hay elementos que dan un toque moderno al conjunto, que hace que se diferencie del resto y, además, tanto por la trasera magnética como por la funda teclado vemos algunos mensajes y detalles en amarillo fosforito.

Sí, puede que a ti te parezca demasiado osado, pero a mi la verdad es que me ha gustado este toque porque, como digo, hace que el producto se diferencie de la competencia.

Introduciendo los paneles OLED en las gamas intermedias

Y algo que también marca la diferencia es el panel. Asus ha optado por meter un OLED en un ordenador que, por el precio, podemos encuadrar en la gama media. Evidentemente no nos están regalando nada, como veremos con los componentes internos, pero este panel hace que el producto brille.

Se trata de una pantalla de 13,3" que cuenta con unos marcos bastante aprovechados y una resolución de 1.920 x 1.080 píxeles para un formato de 16:9. Es táctil, es compatible con un pen, cuenta con soporte HDR y el refresco es de 60 Hz.

Como ves, más allá de que sea OLED, las características no son demasiado lustrosas, pero en este equipo no echo en falta un panel con 144 Hz, por ejemplo, o más definición, sino algo más básico: un brillo algo mayor.

Y es que, según nuestras pruebas tenemos un brillo de unos 390 luxes, una cantidad que está bien para dentro de casa, pero que en exteriores, en el tren o en una cafetería, deja que desear. 

Además, el acabado es brillante, por lo que los reflejos están a la orden del día y no es cómodo ver contenido si hay una fuente incidiendo directamente en la pantalla.

Por otro lado, tiene todo lo que hace que los paneles OLED sean los favoritos para muchos usuarios: un color espectacular y muy vistoso y unos ángulos de visión excelentes. 

Para consumir contenido me parece una tablet espectacular acompañada, además, por un buen sonido de cuatro altavoces que muestra un muy buen nivel, incluso con el volumen a tope.

Y para trabajar, pues la verdad es que también se agradece contar con este tipo de paneles aunque sea para cosas más básicas, ya que si sacas imagen a un monitor externo, no te tienes que preocupar por poner la tablet en la posición ideal para verla desde un buen ángulo porque la pongas como la pongas... se verá genial.

Más para ofimática que para creadores de contenido

Pantalla TOP, disñeo espectacular, precio atractivo... ¿dónde está la trampa? Realmente, no la hay, pero sí un lógico recorte en las tripas.

Cuando me mandaron el equipo, realmente no sabía muy bien qué esperar porque no había leído nada sobre él y la primera impresión fue la de tener en las manos un equipo muy premium.

Pensaba que era competencia del Surface 8 Pro, pero cuando empecé a trabajar, instalar cosas y demás, vi que el equipo no era lo que esperaba. Y, efectivamente, echando un ojo a la hoja técnica me di cuenta de que tenía que cambiar mi chip y empezar a tratar este portátil como lo que es: competencia para el Surface Go 2, por ejemplo.

Y es que, el cerebro es el Pentium Silver N6000, un SoC de Intel que cuenta con una litografía de 10 nanómetros, cuatro núcleos y cuatro hilos con una frecuencia base de 1,1 GHz y con un turbo de hasta 3,3 GHz. 

Es un procesador de muy bajo consumo con un TDP de solo 6 W y está acompañado por 8 GB LPDDR4X y un SSD que, en mi caso, es PCIe, pero que también puede ser eMMC en la versión más básica (y esta versión básica monta 4 GB de RAM, algo que no recomiendo).

En el día a día se porta de forma correcta, pero con matices. Por ejemplo: lo he usado mucho para escribir guiones, análisis, gestionar el correo, gestionar apps como Notion o AirTable y, sobre todo, ver contenido.

Es decir, lo he usado como lo podría usar un oficinista que necesite hojas de cálculo y bases de datos, pero también como lo haría un estudiante que tiene que hacer muchos trabajos. En ese uso, va genial.

Sin embargo, cuando intenté importar fotos RAW para editarlas en Capture One, me di cuenta que el SSD es algo lento escribiendo (se nota que al exportar los lotes de fotos va algo justito) y, además, el lector de tarjetas tampoco es que sea muy rápido porque también tardaba más de la cuenta en importar los archivos.

Vas a poder hacerlo, claro, pero hay que esperar unos segundos de más. De jugar olvídate a no ser que sean títulos antiguos de estrategia o algún indie actual que no sea exigente con la GPU, ya que la UHD integrada que monta es muy pobre.

Y con un procesador que no consume demasiado, una disipación pasiva que prescinde de ventilador y una pantalla que no es muy brillante, pensarás que la autonomía debe ser para unas 20 horas de pantalla. Sin embargo, no es así.

Tenemos una batería de 50 Wh que, según el test sintético de PC Mark 10, con el brillo al 50% nos da para 7 horas y 49 minutos de trabajo. En un entorno más realista con el brillo al 70-80% y manejando varias pestañas y programas como Spotify o Slack, el resultado es de unas seis horas de trabajo.

Que oye, no está mal, pero está claro que hay un elemento ahí comiendo más batería de la cuenta y ese es el panel OLED. Lo bueno es que el cargador de 65 W es bastante compacto y cuenta con carga rápida.

Un PC que es un trampantojo (y que echo de menos en mi escritorio)

Y, al final, lo que tenemos entre manos es uno de los equipos 2 en 1 más interesantes que han pasado por nuestro banco de análisis tanto por su diseño como por la pantalla.

Cuando lo sacas de la caja, de verdad, la sensación que tienes es la de contar con algo de gama premium entre manos. Está bien construido, los detalles del teclado y el soporte molan mucho y esa sensación de producto TOP se acentúa cuando encendemos la pantalla.

Asus Vivobook 13 Slate OLED

Asus Vivobook 13 Slate OLED es el primer portátil Windows 2 en 1 con pantalla OLED. Tiene un procesador Intel de 4 núcleos, hasta 8 GB de RAM y un lápiz óptico integrado.

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Windows 11 va genial en este dispositivo para tareas ofimáticas y para ver contenido y el precio es el que marca que no podamos ir un poco más lejos como jugar a videojuegos mínimamente exigentes, editar lotes de fotos pesadas o vídeo (olvídate de eso).

No es un producto para tal fin, sino la competencia de dispositivos como el Surface Go 2 de Microsoft. Si querías algo así y tenías dudas, para mi este es el mejor 2 en 1 de esta gama que puedes encontrar ahora mismo en el mercado. Sin discusión.