¿Es un portátil gaming? ¿Es un ordenador portátil para trabajar? ¿Está pensado para ver contenidos multimedia? Lo cierto es que, en realidad, el Asus ZenBook Pro puede ser lo que tú quieras que sea: hemos tenido la oportunidad de probar el nuevo ordenador portátil de la marca taiwanesa Asus que, dado lo novedoso de la tecnología que introduce en el mercado, serán los propios usuarios los que decidirán para qué tipo de uso encaja mejor. Nosotros, al menos, lo tenemos un poco más claro después de haberlo probado.

Asus presentó el ZenBook Pro en la pasada Computex 2019, en su momento tuvimos la oportunidad de probarlo en una toma de contacto y ahora, que ya está disponible en España –desde 2.999 euros–, ha llegado la hora de probarlo a fondo en nuestro laboratorio. Si hay algo por lo que destaca este portátil respecto a su competencia, es por su segunda pantalla de 14 pulgadas integrada encima del teclado. Es como la TouchBar de Apple, pero multiplicado por cinco.

Esta segunda pantalla convierte este equipo en un ordenador portátil muy diferente al resto: el teclado queda desplazado hacia el borde de la base, debido a que la pantalla secundaria ocupa prácticamente la mitad del espacio. En cualquier caso, es un portátil de alta gama, así lo confirman specs tales como el procesador Intel Core i9-9980HK, la gráfica RTX 2060 o los 32 GB de RAM (DDR4, 2.666 MHz), entre otros.

Tal y como podéis ver en la anterior tabla, hay dos versiones de este portátil: el ZenBook Pro Duo y el ZenBook Duo. El que nosotros hemos probado es el primero, que también es el que precisamente ya está disponible en España; el otro, el más sencillo, todavía no está a la venta –aunque desde Asus nos confirmaron que llegará en un futuro–.

Por supuesto, 2.999 euros es el precio de partida: la unidad que ha pasado por nuestras manos es más cara, ya que en lugar de venir con un i7, trae un Intel Core i9. Por lo demás, es el mismo portátil que te vas a encontrar en la tienda en caso de que te decidas a comprarlo.

Índice de contenidos

• Diseño de "Wow"; peso de "Buff"
• ScreenPad Plus es una apuesta tan atrevida como necesaria
  • En la práctica, ¿para qué sirve ScreenPad Plus?
  • Lista de deseos para Screen Pad Plus v2.0
  • Deberes pendientes también en software
• La pantalla principal enamora en una frase: 15,6" OLED 4K
• Intel Core i9-9980HK respaldado por una RTX 2060
  • La pantalla secundaria no hace sombra a su lado más gaming
  • Pruebas de temperatura
• Batería para salir del paso
• Precio, disponibilidad y conclusiones

Diseño de "Wow"; peso de "Buff"

Cuando sacas por primera vez el ZenBook Pro Duo de la mochila y lo dejas sobre la mesa, en el momento en que abres la tapa del portátil te aseguras que no vas a dejar indiferente a nadie que pase por tu lado. Es un portátil que irremediablemente llama la atención, y se debe a que pocos equipos portátiles encontrarás que alberguen una pantalla de 14 pulgadas sobre la base del teclado –básicamente, es una pantalla que cubre toda la base de extremo a extremo.

Antes de nada, sensaciones: este ZenBook se siente como un equipo construido con materiales de calidad, una sensación que va desde el momento en que abres la tapa de la pantalla –las bisagras giran con mucha suavidad– hasta que empiezas a teclear –se trata de un teclado firme que, gracias al diseño cóncavo de las teclas, facilita mucho la escritura–.

Asusta ver que el teclado (retroiluminado, por cierto) está tan desplazado hacia fuera: al principio cuesta hacerse a la idea de que vas a tener que apoyar las manos sobre la mesa para poder escribir –cabe decir que la caja del portátil trae una base extensible que se adhiere al equipo–, pero tras pocas horas de uso ya te habrás acostumbrado a ello. No difiere tanto de escribir sobre un teclado externo; en este caso, la única incomodidad aparece al escribir con el equipo sobre las piernas.

Destacar estas sensaciones puede parecer algo obvio, pero un portátil de casi tres mil euros tiene que sentirse como tal desde el momento en que lo sacas de la caja, y en eso este equipo de Asus cumple. Está disponible en un único color azul celeste, el color de la unidad que ha pasado por nuestras manos y que podéis ver en las fotografías de este análisis.

En cuanto a conectividades, disponemos de:

• x1 Thunderbolt 3 USB-C (hasta 40 Gbps y DisplayPort)
• x2 USB 3.1 2 Gen (hasta 10 Gbps)
• x1 Minijack
• x1 HDMI 2.0
• x1 Entrada DC de carga

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Diseño del Asus ZenBook Pro Duo (7 imágenes)

De su diseño, a destacar un par de peculiaridades: tiene teclado numérico, pero es virtual y está oculto sobre el propio touchpad, de tal forma que para activarlo basta con hacer una pequeña pulsación sobre el correspondiente botón:

La otra peculiaridad, el mecanismo de la bisagra de la pantalla: cuando abres el portátil, su superficie se eleva ligeramente para facilitar la ventilación. Más adelante, en el apartado de rendimiento, veremos en qué se traduce eso a la hora de medir su temperatura:

La pantalla principal es de 15,6 pulgadas, y eso hace que sea un ordenador portátil bastante grande en lo que a sus dimensiones se refiere: 35,9 centímetros de lateral con un grosor de 2,4 centímetros. Pero ante todo, es un equipo muy pesado, con 2,5 kilogramos en su tabla de características. Pesa y ocupa mucho en la mochila, por lo que no es precisamente un portátil pensado para viajar ligero.

Pero eso es algo que, se supone, has tenido que asimilar de antemano cuando has decidido lanzarte a por la compra de un ordenador que busca ofrecer algo que va más allá de un equipo ultrafino –para eso tienes muchas alternativas–. Lo que hace este ordenador de Asus tan diferente del resto es esa segunda pantalla que aspira a que dejes de echar de menos tu monitor externo cuando estás de viaje.

Aquellos que trabajamos con un ordenador portátil en movilidad sabemos muy bien lo mucho que se echa de menos nuestro monitor de casa o de la oficina cuando estamos trabajando en un hotel o centro de conferencias. Precisamente, la idea de la pantalla secundaria de este ZenBook Pro Duo es suplir esa ausencia sin necesidad de que tengas que cargar a todas partes con una maleta con tu monitor externo.

Es algo por lo que Asus está apostando desde hace tiempo: comenzó con el ZenBook Pro de 2018 –que ya ha sido renovado en una segunda generación cuya característica del touchpad con pantalla, además, se ha extendido también a los VivoBook–, que traía una segunda pantalla en el lugar en el que normalmente se encuentra la superficie táctil del ratón. Paralelamente, la marca también ha introducido conceptos como el monitor portátil para gamers, que permite viajar con una segunda pantalla apta para jugar que no ocupa tanto como lo haría un monitor gaming convencional.

En 2019, los de Taiwán siguen decididos a eliminar la barrera que supone el no poder viajar con un monitor externo a cuestas. Toda esta presentación es necesaria para entender la razón de ser de la segunda pantalla del ZenBook Pro Duo; dicho esto, es el momento de ver si una alternativa como la ScreenPad Plus tiene sentido en un uso real.

ScreenPad Plus es una apuesta tan atrevida como necesaria

En este equipo, ScreenPad Plus está formado por un panel táctil de 14 pulgadas con resolución 4K UHD (3.840 x 1.100 píxeles). Este panel tiene un acabado mate que imaginamos que está ahí para evitar los reflejos, pero más adelante veréis que precisamente esta característica es una de sus mayores perdiciones.

Se trata de una pantalla tan operativa como la pantalla principal: puedes abrir en ella lo que quieras. Cuando enciendes el ordenador, por defecto se muestra como una extensión del escritorio principal, y a partir de ahí tienes todo un abanico de posibilidades para sacarle partido.

Dado que la pantalla principal también es táctil, ya sea con el ratón o con el dedo puedes realizar la acción de arrastrar una ventana para –por ejemplo– abrirla solo en la pantalla secundaria; si lo prefieres, puedes extender la ventana para que ocupe tanto la pantalla principal como la secundaria. Todo esto se realiza de forma muy intuitiva, con la ayuda adicional de un menú flotante que se despliega cuando te dispones a realizar alguno de estos gestos.

Cuando se trata de abrir una ventana en la pantalla secundaria –puede ser de cualquier programa: desde el explorador de archivos de Windows hasta el navegador Chrome–, la interfaz de Asus te da tres opciones:

• Desplazar la ventana a la pantalla secundaria.
• Alargar la ventana para que ocupe tanto la pantalla principal como la pantalla secundaria.
• Desplazar y fijar la ventana en la pantalla secundaria.

Pero incluso cuando se trata de cualquiera de las anteriores opciones, ScreenPad Plus te dará otras tres opciones adicionales:

• Mostrar la ventana a todo el ancho de la pantalla secundaria.
• Mostrarla en el 50% de la pantalla secundaria, dejando libre el otro 50% para otra ventana.
• Mostrarla en el 33% de la pantalla secundaria, dejando libres otros dos huecos para otras dos ventanas diferentes.

Y ahí no termina. ScreenPad Plus tiene su propia interfaz, de forma que además de todo lo anterior dispone de un menú de acceso directo que te permite abrir programas como el explorador de carpetas de Windows o una aplicación para tomar notas a mano, entre otros. Para una vez que el bloatware es realmente útil, no nos vamos a quejar de ello.

Todo lo que os estamos contando sobre esta pantalla se complementa con el hecho de que tiene una altísima resolución, de forma que todo lo que se muestra en ella se ve con absoluta nitidez. Además, ScreenPad Plus tiene su propio ajuste de brillo, y aunque por defecto ya se ve realmente bien, siempre podréis subirlo un poco en caso de que necesitéis trabajar con ella en exteriores.

En la práctica, ¿para qué sirve ScreenPad Plus?

Pero todo esto sigue siendo la teoría. En la práctica, ¿para qué te sirve una pantalla secundaria como esta? Para tener abierto un Excel mientras revisas una publicación:

Para cambiar de playlist en Spotify mientras destruyes tanques enemigos en un juego online; para ver un vídeo de YouTube mientras (haces como que) trabajas; para ver Twitter en tiempo real... hay tantos casos de uso como imaginación para trabajar en multi-tarea tengas. Lo importante es que, desde el punto de vista técnico, la pantalla secundaria no te pone ningún límite para que le saques el máximo partido. Bueno, casi-ningún límite, mejor dicho.

Es una pantalla a la que, por encima de todo lo demás, le falla el hecho de que sea completamente fija: casi al mismo tiempo que Asus presentaba este ZenBook con doble pantalla, Intel le dio una vuelta de tuerca a esta idea con un concepto de portátil cuya segunda pantalla se podía levantar para situarla en otro ángulo. Nada más verlo, tuve claro que eso era precisamente lo que le iba a fallar a este ZenBook Pro Duo. Y efectivamente, así ha sido.

La segunda pantalla de este ordenador solo es cómoda de utilizar en dos posiciones: cuando tienes el portátil sobre la mesa y estás trabajando sin teclado externo, o cuando lo tienes sobre tus rodillas. En todas las demás posiciones –el portátil un poco más alejado porque estás usando un teclado externo; el portátil sobre tu cuerpo mientras estás tumbado en el sofá; etc–, la pantalla resulta difícil de visualizar en su totalidad debido a que el acabado mate que presenta su panel mata casi por completo todos los ángulos de visión.

Cabe decir, por otra parte, que este portátil viene con un lápiz de tipo stylus que se puede utilizar tanto en la pantalla principal como en ScreenPad Plus. En realidad, ambos paneles –tanto el principal como el secundario– son compatibles con cualquier lápiz activo del mercado.

Lista de deseos para Screen Pad Plus v2.0

Si la pantalla se pudiera levantar mínimamente, incluso a costar de perder unos centímetros del panel principal, resultaría infinitamente más cómoda y, en opinión, sí se podría considerar como un "apaño" cuando estás de viaje y no tienes posibilidad de conectar un monitor externo. Así, tal cual está integrada en este equipo, a mí no ha llegado a convencerme como alternativa a un monitor externo.

Por la posición que tiene la segunda pantalla, al final siempre te acaba obligando a forzar la postura para ver bien el contenido de lo que en ella se esté mostrando. Quizás para profesionales de la edición de vídeo o fotografía sí resulte útil, por eso de tener ciertos controles siempre visibles al alcance de la mano, pero para alguien que trabaja con productos de ofimática –como es mi caso–, no he terminado de encontrarle el caso práctico de uso.

Deberes pendientes también en software

Desde el punto de vista del software, nos hemos encontrado con que la segunda pantalla tiene problemas de compatibilidad en juegos como por ejemplo War Thunder: al tratar de manejar Spotify con él abierto, el juego se minimizaba con cualquier pulsación en la pantalla secundaria, tal y como podéis ver en el vídeo a continuación.

Más allá de este fallo puntual, no nos hemos encontrado con ningún otro problema en la experiencia de software en la pantalla secundaria. Esperemos que Asus solvente este problema en concreto mediante futuras actualizaciones de sistema operativo.

La pantalla principal enamora en una frase: 15,6" OLED 4K

OLED, 4K, HDR, 15,6 pulgadas... no hace falta decir mucho más para saber que nos encontramos ante una pantalla que puede ser considerada como de alta gama con todas las de la ley. Es un panel que se ve espectacular, así de sencillo: resulta muy cómodo trabajar con él por la nitidez con la que se muestra el contenido, y no hemos echado en falta mayor nivel de brillo en ningún momento. Los ángulos de visión, con la tecnología de Wide-View de 178º, garantizan una buena visión desde cualquier posición.

De cara a un profesional, esta pantalla OLED es adictiva: cuando empiezas el día trabajando en ella, luego cuesta volver a un monitor IPS convencional. En términos de calidad de imagen, ScreenPad Plus se ve prácticamente con la misma calidad de imagen que la pantalla principal, con la desventaja de que su acabado mate –la segunda pantalla está cubierta con una lámina de plástico– reduce significativamente los ángulos de visión.

Si a estas características le sumamos además un diseño con una proporción del 89% entre pantalla-cuerpo, hablamos de un ordenador portátil que se posiciona favorablemente tanto para trabajar con edición gráfica como para ver una serie en Netflix al terminar la jornada.

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El hecho de que se trate de un panel OLED, sumado a la ausencia de una pantalla de 240 Hz –la marca nos ha confirmado que es de 60 Hz–, ya da alguna pista acerca de que no se trata de un producto enfocado a los gamers más exigentes. Sirve para jugar, sí, pero no es el equipo que buscas si antes has echado un ojo a algún producto de la gama ROG.

Intel Core i9-9980HK respaldado por una RTX 2060

Este ZenBook con doble pantalla viene equipado con un procesador Intel Core i9-9980HK (ocho núcleos a 2,39 GHz con Turbo Boost de hasta 4,99 GHz), una gráfica RTX 2060 (6 GB GDDR6 VRAM), 32 GB de RAM (DDR4, 2.666 MHz) y 1 TB de almacenamiento (a través de x2 PCIe de 512 GB). Con esta carta de presentación, poco hay que decir sobre el rendimiento del equipo que no os estéis imaginando ya.

En las tareas cotidianas, este equipo no tiene dificultades para lidiar con el devorador de recursos Chrome y cualquier otro programa que se le ponga por delante. Lo hemos puesto a prueba en nuestro día a día en la redacción, donde usamos programas como Photoshop, GarageBand y algunos más, y durante toda la jornada el desempeño del equipo ha sido impoluto.

En cuanto a problemas de fluidez, lo máximo que hemos llegado a notar es que a la pantalla secundaria le costaba alguna que otra vez "despertar" tras abrir el equipo habiendo estado en reposo durante unos minutos. Por lo demás, lo cierto es que iba como un tiro en todas las tareas.

La historia de los lenguajes de programación

Repasamos la historia de los lenguajes de programación desde el primero de 1801 a los más recientes. A lo largo de la historia han existido muchos lenguajes de programación y compiladores para ''interpretar'' esos lenguajes, y estos son los más importantes.

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Si de algo podemos quejarnos, es de bloatware: resulta muy molesto estar recibiendo constantemente notificaciones de McAfee, el anti-virus que viene instalado por defecto en este ordenador de Asus. Ya que pagas casi tres mil euros por él, qué menos que evitar al máximo que la experiencia del usuario se vea interrumpida con un programa que no has solicitado instalar de antemano.

La pantalla secundaria no hace sombra a su lado más gaming

Como es evidente, un ordenador que viene equipado con una RTX 2060 no está pensado solo para trabajar. Si quieres darle también un uso más intensivo fuera del trabajo, te interesará saber que este conjunto de procesador + gráfica sirve también para jugar: en nuestro caso, estuvimos jugando un rato largo al juego War Thunder y el desempeño del equipo se mantuvo constante durante todas las partidas.

Por características, este ordenador se equipara a un Strix Scar II con RTX 2070 o un MSI P65 Creator, que a grandes rasgos obtiene en los benchmarks unas puntuaciones muy similares a las que hemos conseguido con esta unidad. De hecho, en nuestro caso hemos obtenido alguna puntuación extraña que podría deberse a problemas de compatibilidad con los drivers. Son pruebas sintéticas que hay que entender como tales.

A continuación, los resultados de las pruebas sintéticas de rendimiento a las que hemos sometido esta unidad del Asus ZenBook Pro Duo:

Pero, ¿y qué hay de la temperatura? ¿Qué tal disipa el calor este diseño del ZenBook que eleva ligeramente la base del portátil en cuanto abres la pantalla? Vamos a verlo.

Pruebas de temperatura

Cuando se trata de ejecutar juegos que exijan mucho al procesador, este equipo se calienta –y hace bastante ruido– por mucho que los ventiladores laterales no estén en contacto con el escritorio. Además de los laterales, una de las zonas en las que mayor cantidad de calor se concentra está justo encima del teclado: dado que es una zona que no se llega a tocar mientras haces uso del portátil, aquí la solución de poner el teclado tan en el extremo de la base se traduce en que no te vas a abrasar las muñecas mientras estés jugando delante del ordenador.

Durante un uso exigente, el medidor de temperatura que utilizamos en nuestro laboratorio ha registrado cifras cercanas a los 60ºC en la zona de salida de aire de los ventiladores, y poco más de 40ºC en la zona superior del teclado que mencionábamos en el anterior párrafo.

Batería de un portátil gaming

La autonomía no es el punto fuerte de este equipo. Pese a que sobre el papel se las promete con su batería de ocho celdas de 71 Wh, en un uso real –navegar, ver algún vídeo, escribir documentos de texto– la autonomía ronda las dos horas. Podrás estirarla un poco si apagas la segunda pantalla –se puede hacer con una tecla dedicada que trae– y reduces el brillo del panel, pero no te esperes más de dos horas y media (tres en el mejor de los casos) si tienes pensado alejarte del cargador.

Es lo que es: un portátil con las especificaciones técnicas de más alta gama del momento, y como tal no se puede esperar que ofrezca la autonomía de un notebook más modesto. Está en la línea de lo que suelen ofrecer en cuanto a autonomía otros equipos de similares especificaciones.

Respecto a los tiempos de carga, hemos comprobado que la batería tarda en cargarse alrededor de hora y media para llegar al 100%. Con aproximadamente media hora de carga, consigues pasar de un 6 a un 54%.

Precio, disponibilidad y conclusiones

Como concepto, el ZenBook Pro Duo se presenta como solución a la limitación de no poder viajar con un monitor en la maleta para todos aquellos que trabajan con el ordenador portátil –incluidos aquellos que en la oficina sí tienen monitor externo con el que trabajar, pero en casa no–. En la práctica, es una idea que Asus ha sabido llevar a buen puerto para demostrar que al mundo de los ordenadores portátiles todavía le queda mucha cuerda.

La compañía ha dado vida a un ordenador portátil con dos pantallas totalmente funcionales, un software lo suficientemente pulido para hacer posible su uso y unas características de alta gama que no tienen ningún problema en mover Windows con fluidez en ambos paneles. A partir de ahí, queda en manos de cada usuario sacarle partido a esta funcionalidad.

Dado que a nivel de interfaz ScreenPad Plus funciona igual que un monitor externo, no hace falta que los desarrolladores adapten sus programas a este portátil de Asus. Es un detalle fundamental, ya que significa que lo que puedas hacer con esta segunda pantalla no está limitado de ninguna forma por la compatibilidad (o ausencia de ella) de los programas más populares de Windows.

Lo que sí hay que tomar con mayor cautela es el precio de este equipo: por casi tres mil euros, ya no es que por el mismo dinero te puedas hacer con un ordenador muy superior en cuanto a características, sino que incluso por menos encontrarás equipos que seguramente te ofrezcan el mismo desempeño para lo que necesitas (un ejemplo de ello es el MSI GE63 Raider, que por 1.749 euros trae un i7-8750H, 16 GB de RAM y una RTX 2060), por no hablar de los MacBook que se mueven en esta franja de precio.

El ZenBook Pro Duo podría justificar un precio por encima de los dos mil euros solamente con sus especificaciones técnicas , pero la diferencia de más de 500 euros que supone el añadido de la segunda pantalla ya no es tan fácilmente entendible. Más que nada, porque una unidad como la que nosotros hemos probado seguramente cueste mucho más de los 2.999 euros de precio de partida que trae la versión que monta el i7.

Entonces, ¿merece la pena pagar esa diferencia de precio por ScreenPad Plus? De momento, salvo que tengas muy claro el uso que vas a darle, no. Es una idea que está muy bien encarrilada por el buen camino, pero todavía falta que su precio esté en sintonía con lo que ahora mismo ofrece el mercado. Por 2.999 euros, portátiles con procesador i7 que sirvan para trabajar hay muchos; que además traigan una segunda pantalla en su cuerpo, eso sí, solo hay uno.

Asus ZenBook Pro Duo

El ordenador portátil de Asus con dos pantallas. Gracias a su segundo panel de 14", podrás trabajar tal y como si estuvieras utilizando un monitor externo.

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El Asus ZenBook Pro Duo ya está a la venta en España por un precio que parte de los 2.999 euros.