Palm Phone Unlocked, análisis y opinión

Tenemos entre manos uno de los smartphones más curiosos de cuantos hemos analizado en el último año. Se trata de un móvil diseñado para que no sientas la imperiosa necesidad de usarlo durante todo el día y así conseguir desconectar de forma efectiva.

Hablamos del Palm Phone Unlocker, un mini smartphone que sorprende por contar con todas las prestaciones que acostumbramos a ver en smartphones de “tamaño completo”. No es un smartphone para todos los públicos por sus dimensiones, pero sí puede ser pionero en un nicho de mercado que cada vez está ganando más adeptos y que está intentando reducir el tiempo de uso de los dispositivos electrónicos.

¿Intentas desconectar durante tus vacaciones, cuando llegas a casa o cuando estás con tus amigos o familiares, pero finalmente siempre acabas echando un vistazo al correo o a WhatsApp? El Palm Phone Unlocker puede ser el smartphone que necesitas. Analizamos si el Palm Phone Unlocker realmente merece la pena.

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Diseño de Palm Phone Unlocker (15 imágenes)

Resumen del análisis del Palm Phone Unlocker:

• La buena confitura en frasco pequeño
• Buena nitidez penalizada por su tamaño compacto
• Rendimiento solvente para un smartphone de cortesía
• Cámara correcta y ya, solo para casos de emergencia
• Un sistema bien adaptado y con conectividad completa... si quieres
• Batería de “mírame y no me toques”
• Un móvil revolucionario que navega a contracorriente

La buena confitura en frasco pequeño

Una de las reacciones más habituales al sacar el móvil del bolsillo durante los días que hemos estado usando el Palm Phone Unlocker como smartphone principal para este análisis, ha sido el comentario “¡Ay, qué cosa más bonita!”.

El tono de la exclamación era una mezcla entre la ternura al ver un cachorrito de iPhone X y el asombro por ver todo el equipamiento que esperas encontrar en un smartphone, pero con un tamaño considerablemente más pequeño.

Se trata de un smartphone realmente pequeño al que el nombre de la marca le viene como anillo al dedo ya que, literalmente te cabe en la palma de la mano. Con unas dimensiones de solo 96,6 x 50,6 x 7,4 mm y 62,5 gramos de peso, es un smartphone muy compacto y ligero que cabe en cualquier bolsillo.

Su diseño ha sido cuidado hasta el extremo y los materiales de construcción son básicamente el cristal blindado Corning Gorilla Glass 3 y el aluminio.

El cristal de la trasera tiene un elegante color negro brillante rematado con un suave bisel 2.5D en todo el perímetro. Rompe la monotonía de la trasera el logotipo de la marca en letras plateadas justo en el centro de la trasera.

En la esquina superior derecha encontramos la cámara trasera y el flash LED dispuesto en un conjunto en vertical que sobresale ligeramente de la trasera, y queda delimitada por un ribete metálico que la enmarca.

Los bordes del smartphone son inusualmente limpios, ya que únicamente encontramos un botón de encendido en el borde derecho, pero ni rastro de los botones del volumen. Más adelante descubrimos que el volumen se controla desde la pantalla.

Bajo el único botón del Palm Phone Unlocker se ubica la bandeja para la tarjeta nanoSIM. En la parte superior hay uno de los micrófonos de cancelación de ruido.

El único conector del Palm Phone Unlocker es el USB de tipo C situado en su borde inferior. Por su tamaño, el pequeño Palm Phone Unlocker no incorpora un conector para auriculares, por lo que todas las conexiones de audio deben hacerse mediante Bluetooth o utilizando unos auriculares con conector USB tipo C.

El aprovechamiento del frontal no es uno de los puntos fuertes del Palm Phone Unlocker, por lo que, al hecho de ser un smartphone pequeño, se le suma unos marcos de pantalla considerables.

Al menos la simetría en el frontal se mantiene, con unos marcos más estrechos en los laterales, duplicando su tamaño en la parte superior e inferior. En estos extremos se ocultan la cámara frontal, el sensor de iluminación y el único altavoz que monta el Palm Phone Unlocker que estamos analizando.

En definitiva, su reducido tamaño hace que su uso con una mano sea muy cómodo, aunque si bien es cierto que si tienes unas manos un poco grandes te resultará complicado acertar en los botones táctiles en una pantalla tan reducida.

Su ligereza extrema hace que muy a menudo dudes si lo llevas encima o te lo has dejado olvidado en casa o en cualquier otro lugar ya que apenas se nota su peso en el bolsillo.

Buena nitidez penalizada por su tamaño compacto

Antes comentábamos que, una de las reacciones más habituales al sacar el Palm Phone Unlocker del bolsillo era comentar su tamaño compacto. Al encenderlo y ver la pantalla, los comentarios más habituales han ido dirigidos a la nitidez de la pantalla: “¡Qué bien se ve ¿no?!”.

Al ver su reducido tamaño se tiende a pensar que va a ofrecer la misma calidad de pantalla que tenían los smartphones que usábamos hace 10 años, por lo que al encender la pantalla sorprende encontrar un panel LCD IPS de 3,3 pulgadas que, dado su reducido tamaño, tiene una densidad de 445 ppp.

Esta buena densidad en esa pantalla tan reducida crea la sensación de gran nitidez, exprimiendo al máximo su resolución HD (1280 x 720 px) de forma que las imágenes se dibujan perfectamente definidas.

El tamaño de la pantalla del Palm Phone Unlocker no es fruto de la casualidad ya que, además de permitir un tamaño ultra portátil similar al de una tarjeta de crédito, tiene como misión hacer poco atractivo al usuario el uso del smartphone y animarlo a levantar la vista de la pantalla para disfrutar un poco más de la “vida real”.

El ajuste de color del panel está muy logrado y no presenta una desviación notable hacia ningún tinte. No obstante, los ajustes son limitados y no permite corregir, por ejemplo, la temperatura del color.

El Palm Phone Unlocker ofrece un nivel de brillo de pantalla aceptable, soporta bien la mayoría de los escenarios con mucha luz ambiental. Sin embargo, la visibilidad se resiente a pleno sol y no es un móvil que vayamos a usar para estar viendo contenidos tanto como uno de pantalla más grande.

El control de brillo automático se adapta de forma eficiente a las condiciones de luz consiguiendo optimizar la duración de la batería y manteniendo un buen nivel de brillo en pantalla.

Rendimiento solvente para un smartphone de cortesía

El Palm Phone Unlocker ha sido diseñado como un smartphone de cortesía o secundario, de forma que su uso no es equiparable al que se haría con un smartphone convencional con una pantalla de 6 pulgadas o más.

El móvil monta un procesador Qualcomm Snapdragon 435, con ocho núcleos Cortex A53 de 28 nanómetros a un máximo de 1,4 GHz en el que se integra una GPU Adreno 505, acompañado de 3 GB de memoria RAM.

Esta combinación de procesador y RAM ofrece un buen rendimiento en tareas cotidianas y no se amilana incluso con juegos casuales. De hecho, y a modo de prueba, hemos ejecutado PUBG con un resultado perfectamente jugable en términos de rendimiento.

El juego selecciona un ajuste gráfico bajo, pero se mueve con fluidez y sin lag. Obviamente, no es un smartphone destinado a jugar. De hecho, es incluso incómodo jugar en una pantalla tan diminuta donde los controles se amontonan. Es decir, ¿puedes jugar? Sí, pero probablemente no vas a querer hacerlo y te resulte más interesante prestar atención a lo que sucede ante ti que intentar disparar a enemigos del tamaño de una hormiga.

Ese es precisamente el objetivo principal del smartphone: conseguir evitar el abuso del tiempo de pantalla y levantar la vista para disfrutar de la compañía de otras personas, pero sin llegar a los niveles drásticos de dejarte incomunicado.

En el uso diario, el Palm Phone Unlocker ofrece un buen rendimiento en aplicaciones poco exigentes como el correo, redes sociales o streaming de música.

Curiosamente esta última función ha sido una de las que más hemos utilizado durante el tiempo que hemos estado probando el Palm Phone Unlocker, ya que su diminuto tamaño te permite usarlo como reproductor de música y llevarlo al gimnasio, a correr o simplemente ir escuchando tus podcasts favoritos mientras paseas.

Algo que sí hay que destacar es el considerable aumento de temperatura que se aprecia a poco que se exprime mínimamente el rendimiento de procesador. Al grabar o reproducir vídeos o música, la temperatura en la trasera y los bordes sube de forma notable.

En lo que respecta a su capacidad de almacenamiento, el Palm Phone Unlocker cuenta con 32 GB de almacenamiento interno no ampliables ya que no dispone de una ranura para tarjetas microSD. Llevar uno de los smartphones más compactos requiere algunos sacrificios.

Esta capacidad no supone una gran pérdida por lo que, como decimos, no es un móvil orientado al consumo de contenido multimedia que requiera una gran cantidad de almacenamiento para películas, vídeos o en que vayas a instalar un gran número de juegos o aplicaciones.

Cámara correcta y ya, solo para casos de emergencia

Como todos los componentes presentes en el Palm Phone Unlocker la cámara está destinada a un uso esporádico. Su calidad fotográfica no pasa de ser correcta con buenas condiciones de luz, volviéndose inconsistente a poco que la luz escasee.

Lo primero que nos encontramos al intentar hacer una foto o un vídeo es con la app de cámara. Una app que sigue las líneas minimalistas del resto del dispositivo: pocas opciones y sencillez a la hora hacer una foto.

Se agradece que no aparezcan demasiadas opciones en su interfaz ya que de lo contrario se comprometería la usabilidad dados los límites que impone su tamaño. Básicamente se centran en las opciones principales estrictamente necesarias para tomar una foto puntual.

En la parte inferior de la app se ubica el botón disparador escoltado por el icono de activación de vídeo y el acceso a la galería.

En la barra superior, el icono de activación de la cámara frontal, el de activación del flash, el HDR y un menú selector de filtros. En la esquina superior derecha encontramos el acceso a los modos de disparo y el acceso a los Ajustes de la cámara.

El modo Manual permite ajustar al gusto la configuración del disparo, pero en ningún caso permite el disparo en RAW siendo el JPG el único formato disponible.

Otros modos de disparo creativo es el que permite crear un collage directamente en la pantalla y el modo rastros de luz, que permite hacer fotos de larga exposición con las que mostrar rastros de luces o crear un efecto sedoso en corrientes de agua o cascadas.

Desde este enlace puedes descargar los archivos originales de las fotos para que puedas ver por ti mismo esos resultados.

El Palm Phone Unlocker monta una cámara trasera de 12 megapíxeles con una apertura f/2.0. Pero no cuenta con el procesado posterior de los Pixel, por lo que, en esencia, nos encontramos con un equipamiento discreto que equivale a los que tenían los smartphones antes de la fiebre de las dobles, triples o quadrúples cámaras.

A pleno sol, la cámara principal del Palm Phone Unlocker ofrece unos resultados vistosos, pudiendo conseguir algunas tomas muy bien enfocadas y con un desenfoque muy natural por la profundidad de campo (bokeh).

Sin embargo, al carecer de una doble cámara (o de un potente sistema de inteligencia artificial que la supla) el Palm Phone Unlocker no permite aplicar un desenfoque de fondo “artificial” a las fotos, tal y como hacen actualmente la mayoría de móviles.

Nos encontramos con una lente gran angular que permite crear composiciones realmente amplias, lo cual lo convierte en apto para, por ejemplo, para desconectar paseando tranquilamente por tu destino de vacaciones y fotografiar un monumento, un edificio o una puesta de sol.

Esta cámara tiende a saturar la intensidad de los colores, pero sin llegar al exceso. Con las condiciones de luz adecuadas se pueden llegar a conseguir fotos bien definidas sin demasiado esfuerzo y con un buen nivel de detalle.

Para obtener una ligera mejoría en la exposición con condiciones complicadas de luz recomendamos mantener activado el modo HDR. Si bien es cierto que el resultado no es tan espectacular como en los móviles con sistemas fotográficos más avanzados, sí contribuye a mejorar ligeramente el rango dinámico de la fotografía.

En condiciones de luz más comprometidas, el Palm Phone Unlocker demuestra que la presencia de la cámara es mera cortesía del fabricante ya que la definición baja algunos enteros y aprueba por la mínima al ofrecer un buen balance de color y mantener el ruido en unos niveles aceptables.

Si hablamos de la cámara frontal, encontramos un sensor de 8 megapíxeles con apertura f/2.2 que calca el rendimiento de la cámara trasera. Con buenas condiciones de luz los resultados son muy vistosos y se obtienen selfies bien definidos.

Al contar con una lente con un buen ángulo de apertura, debe tenerse en cuenta la deformación que produce la lente cuando se acerca, por lo que es recomendable sostener el smartphone lo más lejos posible de la cara para evitar el efecto barril que deformará la forma de la cara.

La grabación de vídeo también es anecdótica ofreciendo una resolución máxima de Full HD. En todo momento es necesario recordar que el Palm Phone Unlocker no ha sido diseñado como un smartphone principal al uso, sino como un smartphone secundario que te ayude a desconectar de la tecnología.

Un sistema bien adaptado y con conectividad completa… si quieres

Uno de los principales retos del Palm Phone Unlocker ha sido adaptar su sistema operativo basado en Android 8.1 Oreo a un tamaño de pantalla tan reducido para que la interacción con los distintos controles resulte cómoda.

Sin embargo, la política de “incomodidad” constante, que invita al usuario a usar el smartphone solo cuando sea necesario, hace que se hayan eliminado muchas de las opciones habituales de Android, por lo que nos encontramos un sistema operativo muy modificado.

Si bien es cierto que conserva componentes como el feed de Google deslizando a la izquierda de la pantalla de aplicaciones o la estructura básica del menú Ajustes, el número de opciones disponibles es infinitamente menor.

Para empezar, toda la interfaz viene con el modo oscuro de serie. Esto no solo responde a una cuestión estética, sino que está orientada a reducir al máximo el consumo de energía.

En lugar de cajón de aplicaciones o una pantalla de inicio al uso, nos encontramos con un launcher que recuerda al efecto burbuja de los Apple Watch, en el que las aplicaciones aumentan el tamaño de sus iconos al deslizar la pantalla hacia arriba o abajo.

El panel de notificaciones y accesos rápidos cobra especial relevancia en el Palm Phone Unlocker que estamos analizando, ya que aquí encontramos los controles de volumen al carecer de botones físicos.

En este mismo panel encontramos una de las funciones clave en este peculiar smartphone: Life Mode o modo vida, que permite desconectar las notificaciones cuando no estás usando el smartphone. Algo así como un modo Avión, pero con excepciones configurables para que nada te moleste mientras dedicas tiempo a tus amigos o familia.

Cuando el modo Live Mode está activado, y se apaga la pantalla, el smartphone entra en una especie de letargo que desactiva las notificaciones de las apps que no se han autorizado expresamente durante la configuración del modo, por lo que podría considerarse como un modo avión en el que se mantienen activas las notificaciones de las apps seleccionadas para que nada te moleste.

Mientras no actives la pantalla, no recibirás ningún tipo de sonido, luz o vibración, a no ser que lo haga alguna de las apps seleccionadas. Esto resulta realmente liberador, ya que te permite enfocarte en otras cosas, sin que el smartphone esté intentando llamar tu atención con constantes ruiditos, luces parpadeantes o vibraciones en el bolsillo.

Al principio se hace algo raro, pero en nuestro caso, cuanto más usábamos el móvil, más se espaciaba el tiempo entre consultas “por si me ha llegado alguna notificación”. En este sentido, el Live Mode hace un buen trabajo y aprendes a marcar tú los tiempos de uso, y no al revés como sucede con los smartphones convencionales.

El Palm Phone Unlocker que estamos analizando ofrece algunas contradicciones con respecto a su objetivo de desconectar a las personas del mundo digital, para recuperarlos en el mundo real. Uno de estos puntos contradictorios es que realmente ofrece muy buena conectividad, incluyendo un USB tipo C, Bluetooth 4.2, WiFi ac de doble banda (2,4 GHz y 5 GHz), conectividad GPS, A-GPS, GLONASS y, como no, conectividad 4G LTE.

Esta conectividad te permite usarlo prácticamente al mismo nivel que cualquier otro smartphone “de tamaño completo”, aunque su pantalla y su diminuto teclado se encargan de desanimarte a hacerlo.

Una de las ausencias más clamorosas es la del conector para auriculares. Es algo más que justificado dado el tamaño del terminal, pero no deja de ser algo limitante tener que usar auriculares Bluetooth o unos adaptados para USB tipo C.

Por otro lado, el uso de unos auriculares bluetooth en el Palm Phone Unlocker tiene todo el sentido ya que, al ser tan pequeño, te permite una mayor libertad de movimientos, lo cual lo convierte en el compañero perfecto para el gimnasio, o para caminar libre y sin ataduras.

Usar unos auriculares será la mejor opción para escuchar música en este smartphone, ya que solo cuenta con un único altavoz situado junto a la cámara frontal, por lo que, aunque ofrece un sonido con un volumen destacable para tratarse de un altavoz de esas características, no es capaz de ofrecer un buen sonido.

Batería de “mírame y no me toques”

El Palm Phone Unlocker viene equipado con una batería de 800 mAh sin soporte para carga rápida. Puede parecer algo escasa si la comparamos con los 4.000 mAh de media que encontramos en los móviles actuales. Sin embargo, hay que tener en cuenta que su pantalla solo tiene una diagonal de 3,3 pulgadas, por lo que el consumo no es equivalente.

Teniendo en cuenta que el Palm Phone Unlocker que estamos analizando es un smartphone diseñado para usarlo lo mínimo imprescindible, esos 800 mAh te darán para un día completo de uso sin ningún problema.

No obstante, a poco que te saltes las “normas de desconexión” y empieces a usarlo como lo harías con cualquier otro smartphone, su autonomía caerá en picado y a mediodía estará pidiendo una visita al cargador marcando valores en rojo.

En nuestras pruebas de uso el Palm Phone Unlocker ha marcado una autonomía de poco menos de tres horas de uso intenso con un brillo de pantalla al 50%, mientras que si usamos la pantalla con su brillo máximo se reduce hasta las dos horas y quince minutos de uso.

Para recuperar su carga, el Palm Phone Unlocker apenas necesita una hora conectado, tiempo que podría reducirse con un soporte para carga rápida que no tiene.

En este, como en otros factores, el Palm Phone Unlocker no se puede medir con los mismos baremos que el resto de smartphones del mercado, ya que su objetivo es totalmente opuesto al del resto de móviles.

Un móvil revolucionario que navega a contracorriente

No hay nada más revolucionario que diseñar un móvil cuyo principal objetivo es disuadir al usuario de usarlo. Sería el equivalente a los vapeadores o al parche de nicotina en versión digital y para móviles. En definitiva, una herramienta que ayude al usuario a dejar de lado su vida digital para volver a su vida real.

El Palm Phone Unlocker no aguantaría la comparativa con ningún móvil que actualmente puedas comprar en las tiendas. Tiene una batería con una autonomía ridícula para un uso real, un conjunto de cámaras propio de un smartphone de 2016 y un sistema operativo que limita muchas funciones.

Sin embargo, cumple como ninguno su función disuasoria y, a base de incomodidades, invita al usuario a abandonar las tareas digitales, para que levante la vista y se diga a sí mismo: “luego lo hago”. Justo el propósito por el que el Palm Phone Unlocker fue diseñado.

Existen muchos usuarios preocupados con el tiempo que pasan pegados a la pantalla de su smartphone. Tanto es así que tanto Google como Apple se han desarrollado herramientas que controlan ese tiempo de pantalla e invitan al usuario a apagar el móvil durante unos minutos.

Esto es algo así como invitar a un niño a salir de un parque de atracciones cuando todas las atracciones están funcionando. El intento está bien, pero el niño no querrá abandonar el recinto cuando las atracciones están en su apogeo.

El Palm Phone Unlocker va un poco más allá en este sentido y en lugar de sugerir apagar el smartphone, pone las cosas complicadas al usuario para que sea él mismo quien decida desconectar y crear unos hábitos de desconexión.

La desconexión no es la única función que sustenta al Palm Phone Unlocker aunque sí es la principal. Su tamaño compacto ofrece algunas ventajas a la hora de usarlo como dispositivo secundario en el que instalar un duplicado de tu SIM para conservar todas las funciones de un smartphone, pero sin ninguno de los inconvenientes de su gran tamaño.

Esto lo convierte en el compañero perfecto para el gimnasio, para salir a hacer deporte o de fiesta con los amigos sin tener que cargar con un smartphone de 200 gramos y 16 cm en el bolsillo. Algo en lo que realmente, el Palm Phone Unlocker es un campeón.

En resumen, podemos decir que el Palm Phone Unlocker es un mal móvil. Sin embargo, esa característica es intencionada y para ello ha sido diseñado. ¿Podemos entonces afirmar que es un móvil excelente que cumple con todo lo que se espera de él? La decisión no es fácil.

Palm Phone Unlocked

El Palm Phone es un smartphone del tamaño de una tarjeta de crédito y 62,5 gramos cuyo principal objetivo es reducir el tiempo de uso del smartphone. Su tamaño puede llevar a engaño ya que mantiene la misma conectividad que un smartphone convencional. 

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Si de algo no cabe duda es de que su precio es algo elevado teniendo en cuenta sus características ya que no estamos ante un smartphone que vaya a usarse como smartphone principal. Pagar 403 euros por él puede ser algo excesivo.

En cualquier caso, el Palm Phone Unlocker no es un smartphone que se pueda valorar por sus especificaciones técnicas, sino por los beneficios que aporta. En definitiva, es un smartphone que debería comprarse con receta médica.