Lo mejor
- Autonomía
- Diseño y materiales
- Resolución de pantalla
- Puerto de auriculares
Lo peor
- Colocación de altavoces
- Tiempo de carga
- Ángulos de la pantalla
- Potencia justita
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Disponible
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Disponible
Samsung no quiere dejar en manos de Apple el segmento de las tablets, y con la Galaxy Tab A de 2019 apuesta por el entretenimiento puro y duro. Se trata de una tablet enfocada a escuchar música, ver Netflix y YouTube y cuenta con un modo niños muy interesante. Ya la hemos probado y os contamos nuestra opinión en este análisis de la Samsung Galaxy Tab A 10,1'' de 2019.
Tuvieron un ‘’boom’’ hace unos años y, poco a poco, las marcas fueron perdiendo el interés. Los móviles se hacían más y más grandes y el gran atractivo de las tablets empezaba a desaparecer.
Algo similar ha ocurrido con los smartwatches, un segmento que pocas compañías mantiene actualizado con uno, o varios, modelos anuales.
Samsung es de las que sí tienen nuevos modelos tanto de tablets como de smartwatches, y además del segmento enfocado a usuarios que buscan sustituir su portátil, con tablets como la Galaxy Tab S5e que analizamos hace unas semanas, tienen tablets de consumo. Y ahí entra la Samsung Galaxy Tab A 2019.
Galaxy Tab A 10,1'' | |
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Pantalla | Panel IPS de 10,1'' Resolución de 1.920 x 1.200 píxeles |
Procesador | Samsung Exynos 7904 de 14 nm |
Memoria RAM | 3 GB |
Almacenamiento | 128 GB Ampliable mediante microSD |
SIM | Nano SIM |
Batería | 6.150 mAh Carga por USB Tipo-C |
Cámaras | Trasera: 8 Mpx f/2.0 Frontal: 5 Mpx f/5.0 |
Conectividad | Bluetooth 5.0 Wi-Fi 802.11 a/b/g/n/ac Wi-Fi Direct |
Tamaño y peso | 245,2 x 149,4 x 7,5 mm 469 gramos |
Precio | 249 euros |
Se trata de una tablet que entra a competir directamente contra el iPad ‘’normal’’, el de 9,7’’. Es una tablet que, por características de hardware, podríamos catalogar como de clase media, pero que como mostraremos en este análisis, cumple su cometido, y más.
En este análisis de la Samsung Galaxy Tab A 2019 os contaremos para qué tipo de usuario es y qué podéis esperar de ella dependiendo del tipo de uso que hagáis. Y sí, adelantamos que si la queréis para trabajar, deberíais mirar a otro modelo, ya que estamos ante una tablet justita en ese campo, pero que cumple con creces si queremos entretenimiento puro y duro
Análisis de la Samsung Galaxy Tab A 2019 por apartados:
- Diseño premium para una tablet familiar
- Pantalla que cumple, pero que no es de lo mejor de Samsung
- Hardware modesto y perfecto para entretenimiento
- One UI y Android , una combinación ganadora en tablets
- Modo niños: un patio de recreo muy seguro
- Sonido que no es su punto fuerte
- Batería de gran capacidad que tarda mucho en cargar
- Cámaras que están por estar
- Una tablet para ver Netflix, YouTube y disfrutar con algunos videojuegos
Diseño conservador para una tablet elegante y muy ligera
Cristal y aluminio son los componentes principales de la Galaxy Tab A. Todo el frontal está ocupado por una plancha de cristal que alberga tanto la pantalla como unos marcos generosos. El formato de la pantalla es 16:10, por lo que es una tablet más ‘’alargada’’ que un iPad, por ejemplo.
La parte trasera y los laterales están construidos en aluminio con acabado mate. Esto tiene dos ventajas. Por un lado, protege la tablet de las huellas, ya que no se quedan impregnadas en la misma, y por otro nos permite un mejor agarre. El color de nuestro modelo, gris oscuro, es muy atractivo.
La cámara está en la parte trasera izquierda y sobresale un par de milímetros, y el logo de Samsung. Está serigrafiado en el centro de la tablet. No hay nada más para, así, cumplir con un diseño muy austero.
Si nos vamos al lateral derecho, tenemos los botones de subir/bajar volumen, así como el de bloquear el dispositivo y la ranura para ampliar el almacenamiento con una tarjeta microSD e introducir la nano-SIM, y en la parte inferior encontramos los dos altavoces y el puerto USB Tipo-C.
En una tablet para consumir contenido, encontramos extraño que Samsung haya optado por esta ubicación para unos altavoces de los que os hablaremos más adelante, pero que se tapan parcialmente cuando sostenemos el dispositivo en horizontal con las dos manos, la postura más común para ver una serie o para jugar, sin ir más lejos.
Y hablando de sostener la tablet, la Galaxy Tab A es muy ligera (469 gramos) y sorprendentemente delgada, con un perfil de 7,5 milímetros que hace que nos olvidemos de ella cuando la llevamos en una mochila.
Los bordes curvados de la parte trasera aumentan ese confort al sostenerla entre las manos, y aunque sea la tablet barata de Samsung, los surcoreanos no han querido comprometer la sensación premium que tienen otros dispositivos de su portfolio.
¡Ah! Podemos adquirir una funda, de venta por separado, que protege cada milímetro de la tablet y cuenta con una parte imantada que nos permite poner la Galaxy Tab A en dos posiciones en formato horizontal. Eso sí, no tiene ‘’despertar activo’’, desbloqueando la pantalla cuando abrimos la tapa. Simplemente, protege la tablet.
Pantalla creada para consumir contenido, o no
Aunque el estándar de contenido de entretenimiento sigue siendo el formato 16:9, con la resolución FullHD por bandera, Samsung ha vuelto a optar por los 16:10 para su pantalla. De esta forma, en lugar de contar con una resolución de 1.920 x 1.080, tenemos 1.920 píxeles en la horizontal y 1.200 en la horizontal.
Es un poco menos panorámica que otras tablets, y esto tiene sus ventajas y desventajas. Evidentemente, al contar con más resolución en la vertical, es mejor para ver la web en formato apaisado, así como para tener multitarea cuando tenemos la tablet en horizontal.
Los juegos también lucen de maravilla, pero las series y películas muestran unas barras negras horizontales algo más gruesas de lo habitual. No es un problema, porque estamos acostumbrados a ellas, pero hay que comentarlo.
Dicho esto, estamos ante una pantalla con panel IPS de 10,1’’. No, no tenemos una SuperAMOLED de las que ‘’brillan’’ en otros dispositivos de Samsung, pero no estamos ante una mala pantalla. La densidad de píxeles es de 224 píxeles por pulgada y el ratio de pantalla-cuerpo del 80% hace que podamos sujetar la tablet con seguridad sin tapar ni un milímetro de la pantalla.
Por otro lado, aunque no es una pantalla con soporte para HDR, el brillo máximo no decepciona y podemos ver el contenido con claridad tanto en casa como en el transporte público, incluso en días muy soleados, sin problema alguno.
El conflicto llega cuando aparecen los reflejos, algo normal debido al panel de cristal. De hecho, da la sensación de tener un acabado más brillantes que otras pantallas con este tipo de cristales, y sí, es un problema cuando tenemos una luz directa.
¿Qué tal los colores? Como decimos, no es un panel AMOLED, por lo que en contraste y representación de color, palidece frente a tablets de gama media-alta de la compañía, y su IPS no es tan ‘’brillante’’ como el de un iPad, por lo que tenemos unos negros menos intensos, así como unos blancos que tienen a amarillear, sobre todo cuando cambiamos el ángulo de visionado. Esto también pasa con los colores negros.
En una tablet de este precio, es normal que el panel IPS utilizado no sea de la mejor calidad, y los ángulos de visión no sean demasiado generosos, mostrando aberración cromática a partir de los 45º. Eso sí, es una tablet para consumir contenido, y si la tenemos alineada con nuestros ojos, esto no supone un problema. Además, la respuesta táctil es muy buena, nada que objetar en este sentido.
Procesador y RAM que parecen justos, pero cumplen bien
Es una tablet enfocada al consumo de contenido, por lo que el hardware no es lo que más destaca. De hecho, si comparamos con móviles en el mismo rango de precio, tenemos unos componentes muy modestos.
El procesador es el Exynos 7904 de Samsung, un procesador con un tiempo a sus espaldas que está construido en 14 nanómetros. No es el más eficiente de su clase y cuenta con dos núcleos a una frecuencia de 1,8 GHz y seis núcleos a 1,6 GHz. La Galaxy Tab A 2019 que hemos analizado cuenta con 3 GB de memoria RAM, pero hay una versión con 2 GB.
Si nos guiamos por los test sintéticos, no tenemos nada del otro mundo, con unas puntuaciones de lo más modestas (sobre todo si las comparamos con las que obtuvimos en su hermana mayor que, con un Snapdragon 660, rinde más en CPU y GPU):
Galaxy Tab A 2019 | Galaxy Tab S5e | |
---|---|---|
AnTuTu | 102.097 | 152.791 |
GeekBench | Single-Core: 1.284 Multi-Core: 4.106 |
Single-Core: 1.609 Multi-Core: 5.640 |
PC Mark | 5.409 | 6.680 |
Ahora bien, como siempre decimos, los test sintéticos no lo son todo, y la unión entre hardware y software se mide en el rendimiento en el día a día. Android 9 con One UI va fluido en todo momento, podemos disfrutar de multitarea y en ningún momento notamos que a la tablet le ‘’pesen los circuitos’’.
Es cierto que, si sois de esos que cambian de app a la velocidad de la luz, eligiendo entre las muchas guardadas en segundo plano, notaréis que en cierto momento hay que cerrar aplicaciones, pero poco más.
Hemos probado algunos juegos, y aunque no puede con un Asphalt 9 o Fortnite, sí podemos disfrutar de PlayerUnknown’s Battlegrounds en su configuración media. No es lo más cómodo del mundo jugar en una tablet a un título así, pero se puede hacer.
Si hablamos de almacenamiento, la versión analizada cuenta con 64 GB, por 32 GB de la versión de 2 GB de RAM. Es un almacenamiento justito, pero lo podemos ampliar con tarjetas microSD de hasta 1 TB.
OneUI con Android 9.0 y una experiencia muy fluida
Y buena parte de la culpa del buen rendimiento de la tablet lo tiene Android. Es toda una sorpresa encontrar la última versión del sistema de Google corriendo en una tablet de este segmento, y lo cierto es que permite que todo vaya fluido y estable.
Tenemos preinstaladas muchas aplicaciones de Google, así como propias de Samsung. Sí, tiene un montón de bloatware, pero lo cierto es que funciona. Y OneUI, la capa de personalización de Samsung, añade ciertas características que no están en Android, como el modo oscuro para la interfaz (no así para las aplicaciones).
Es un sistema que no tiene demasiados recovecos, ya que está enfocado al ‘’plug&play’’, o lo que es lo mismo, instalar nuestras aplicaciones de reproducción de contenido favoritas para consumir dicho contenido.
¡Ah! Algo que me ha gustado es que, al ser una tablet Android y contar con ranura de nano SIM, si tenéis un duplicado de vuestra tarjeta, podéis utilizar WhatsApp en la tablet. Sí, para usarlo en el móvil y la tablet a la vez tendréis que usar algunos trucos, pero poder... se puede.
... y un ''modo niños'' muy interesante
La implementación de Android en la Galaxy Tab A no tiene demasiado misterio, y algo interesante es que Samsung ha vuelto a introducir el ‘’Modo niños’’. Esto es algo que lleva en los móviles y tablets Samsung desde hace generaciones, y vuelve con. Todo el sentido del mundo.
Y es que, como ya hemos dicho, es una tablet para consumir contenido, y lo cierto es que muchas veces dejamos la tablet o móvil en manos de los niños. Acceder al ‘’modo niños’’ es muy fácil, ya que solo debemos tocar el icono correspondiente en la barra de ajustes. En cuanto se lanza el modo niños y configuramos la clave de control parental, los más pequeños de la casa tienen. un entorno seguro para navegar y jugar.
Hay juegos enfocados a los más pequeños, diferentes aplicaciones (muy controladas) que pueden descargar. También hay una app de cámara (con filtros divertidos para los más pequeños), una galería y un navegador. Desde la galería, no pueden acceder a las imágenes guardadas en la tablet, y el navegador también está limitado.
Tienen una serie de opciones para navegar, pero no pueden acceder a cualquier web. Si intentamos entrar en una web que no está en la lista, nos dice que no podemos… a menos que introduzcamos la clave parental y añadamos esa nueva web a la lista de sitios permitidos.
Es un modo ultralimitado que está más enfocado a menores de 10 años que a niños algo mayores, y que en una tablet así… se agradece. Y sí, para cerrar el modo niños también hay que poner la clave.
Sonido al que le falta un empujón
El sistema de sonido debe ser una pieza fundamental en una tablet como esta, y tenemos una de cal… y otra de arena. Como ya hemos comentado, contamos con un sistema de doble altavoz en la parte inferior.
La parte buena: dos altavoces y un sonido ponte y definido. Es decir, podemos subir el volumen que no. vamos a escuchar una distorsión demasiado evidente. Tiene buena pegada en los bajos y el espectro medio y agudo también está definido.
Sin. embargo, no nos explicamos cómo, con esos marcos, Samsung no ha optado por incluir un doble altavoz frontal. Con ese sistema lograrían un sistema estéreo y, además, eliminar el principal problema a la hora de sujetar la tablet.
Y es que, si la tenemos en vertical, no hay problema (aunque es raro que el sonido apunte para abajo), pero si la tenemos en horizontal, vamos a tapar sí o sí uno de los altavoces tanto al jugar como al consumir contenido si no. apoyamos la tablet en una superficie.
Con auriculares se elimina el problema, obviamente, y además tenemos Dolby Atmos, y podemos utilizar auriculares tanto por Jack de 3,5 mm como por USB Tipo-C.
Batería para olvidarnos en las vacaciones, pero con un cargador muy pobre
Hasta ahora, en casi cada apartado del análisis de la Galaxy Tab A 2019, hemos visto que hay luces y sombras, pero argumentos que hacen que ‘’lo bueno’’ pese más. Si hablamos de la batería, tenemos más de lo mismo.
Samsung ha dotado a la Galaxy Tab A 2019 de una batería de 6.150 mAh. Tiene un tamaño considerable, y lo cierto es que la autonomía es buena. En las pruebas sintéticas con el test PC Mark, obtenemos 9 horas y 27 minutos de autonomía con el brillo al 50% y 7 horas y 15 minutos con el brillo al 100%.
Esto se traduce en, con un brillo automático, unos cinco días de autonomía para un usuario que la utilice regularmente para ver Netflix, redes sociales y páginas web. Si jugamos y la utilizamos para todo, con el correo sincronizado cada minuto y las redes sociales con notificaciones al instante, en dos/tres días de autonomía.
Claro está, hay muchos perfiles de usuarios, y con el brillo al 50% podemos alargar esos cinco días de consumo de contenido. Es, en definitiva, una batería que da la talla, y que tiene un buen sistema (gracias al software) de gestión. de apps en segundo plano y del brillo automático.
Donde no tenemos tan buenas noticias es en la carga. Y es que, el cargador de la Galaxy Tab A 2019 es el ‘’clásico’’ cargador pequeño de Samsung, el ‘’Travel Adapter’’ que ofrece una potencia de 5V y 1,55A.
¿En qué se traducen estos números? Tenemos una tabla que, como veis, es muy lineal, alcanzando el 50% tras algo más de 100 minutos y el 100% en 3 horas y 39 minutos. Tarda mucho, muchísimo, en cargar, por lo que. Es de los dispositivos que más vale cargar por la noche.
Cámaras que están porque tienen que estar
No cuesta nada introducir una pareja de cámaras en una tablet (trasera y frontal), y de hecho criticaríamos que no estuviera la opción de hacer fotos desde la tablet ya que, aunque no cuentan con demasiada calidad, siempre ves a alguien haciendo una foto con la tablet en la calle o en algunos eventos.
En este sentido, tampoco tenemos demasiado que decir, ya que las cámaras dan para guardar algún momento puntual y hacer videollamadas, pero no para más debido a la calidad de los sensores. La cámara principal es un sensor de 8 megapíxeles con apertura f/2.0.
Es un sensor muy pequeño que nos permite realizar fotos como las que tenéis a continuación:
Como veis, el nivel de ruido, tanto con buena luz como en interiores, es demasiado elevado como para estar orgullosos de la foto. De hecho, no cuenta con calidad suficiente como para subirlas a las redes sociales.
El balance de blancos, además, no lo hace del todo bien. Cambiando un poco el enfoque, con la misma luz en el mismo momento del día, el tono varía radicalmente.
Se agradece que tenga un modo Pro (con control de ISO y balance de blancos), así como la posibilidad de hacer panorámicas y reconocimiento automático de escenas, pero no da para demasiado.
La cámara frontal de 5 megapíxeles f/2.2 tampoco es demasiado brillante, y podéis ver un ejemplo a continuación:
La utilidad es la de hacer videollamadas, ya que para eso sí cumple, pero para poco más.
Un caramelo para consumir contenido
El hardware no es puntero, la pantalla tiene algunas ‘’contras’’ importantes y tarda lo suyo en cargar, pero la Galaxy Tab A 2019 es una de las mejores tablets de este año… si la queremos para consumir contenido.
Su principal argumento es que se trata de un dispositivo extremadamente equilibrado en casi todos los aspectos, ofreciendo una gran experiencia si tenemos en cuenta que su precio parte de los 199 euros. Es decir, por menos de 200 euros en su versión de 2 GB de memoria RAM, tenemos una tablet ideal para ver Netflix, YouTube y contenido en web.
La pantalla cumple para este tipo de tareas y el sonido, aunque los altavoces no están ubicados en la mejor posición, ‘’da’’ para ver una película sin problemas (y con altavoces tenemos Dolby Atmos y este apartado gana enteros).
La versión con 3 GB de memoria RAM nos permite ser algo más ‘’productivos’’, con aplicaciones a pantalla partida (correo y redes sociales, o redes sociales y Netflix, por ejemplo) y ejecutar videojuegos más exigentes.
Es, como decimos, una tablet con un gran equilibrio calidad/precio que Samsung ha sabido colocar en un segmento muy jugoso. Y es una gran noticia que sean conscientes del mercado, porque por el precio actual, y la posible bajada de precio a corto plazo, es un dispositivo de lo más interesante si lo queremos para consumir contenido puro y duro.
Nota técnica
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