Samsung Galaxy Tab S4, análisis y opinión

Samsung ha vuelto a plantear una alternativa Android al iPad Pro que no se puede pasar por alto. En este análisis de la Galaxy Tab S4, en el que os contaremos nuestra opinión sobre esta tablet, hemos encontrado en la Samsung Galaxy Tab S4 un producto muy bien terminado que podría hacer las delicias de los usuarios que siguen apostando por la tablet como dispositivo de referencia.

La Galaxy Tab S4 viene acompañada por la última versión del SPen, el que podría ser complemento perfecto para este dispositivo, no sólo por su sencillez de uso sino también por su versatilidad y funciones. Dichas funciones, de ser reales, podrían ser aplicables al trabajo del día a día.

En este análisis de la Samsung Galaxy Tab S4 no hemos perderemos de vista en ningún momento que estamos tratando con una tablet de 580 euros, que aunque en rango de precio está muy por debajo del iPad Pro, sí que se mueve en la gama alta de sus competidores más directos.

Por lo general, se trata de un dispositivo completo, fácil y al que difícilmente le podemos pedir más. La pantalla Super Amoled entra por los ojos, la ligereza del dispositivo (y del SPen) se agradecen mucho y para rematar puede presumir de una batería de 7.300 mAh. Pero esas solamente son algunas de las sensaciones que hemos tenido durante la prueba: a continuación os contamos nuestra opinión completa.

Diseño reconocible con marcos cada vez más delgados

Como ex-usuario de Samsung, uno de los detalles de la Galaxy Tab S4 que más llaman la atención es la desaparición del botón de inicio con el lector de huellas integrado. Tampoco lo encontraremos en la trasera, fabricada en un elegante cristal (Gorilla Glass) que ayuda mucho a mantener la tablet a salvo de marcas de dedos. En la trasera solamente encontramos la cámara y el flash.

Podemos hacernos con la Samsung Galaxy Tab S4 en dos colores: blanca con bordes metálicos o negra con bordes oscuros. En ambos casos el acabado habla de un producto de alta calidad, que tiende más a la estética que a la resistencia.

El frontal enmarca en negro la pantalla OLED con unos bordes que se antojan delgados (menos de un centímetro), lo justo para que podamos sujetarla sin perder el agarre pero sin que nuestros dedos entorpezan el uso. También tenemos la cámara frontal para videollamadas y el objetivo para reconocimiento facial y de iris (que precisamente es el que ha sustituido al lector de huellas).

En los bordes metálicos damos con los cuatro altavoces distribuidos simétricamente en los laterales del dispositivo , junto con el puerto de carga USB C y la entrada minijack para auriculares.

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Samsung Galaxy Tab S4 (13 imágenes)

En el lateral derecho cuenta con el conector especial para el teclado oficial, que se compra por separado. No estaba disponible para nuestro análisis, así que realmente no podemos opinar mucho más allá de las ventajas que supone tener un teclado físico en una tablet para terminar de sustituir por completo a nuestro portátil.

En general, no tenemos queja en diseño: la diagonal es generosa, los marcos escasos y las funcionalidades y conectores son los que cabría esperar, si no más, y están bien distribuidos.

Me quiero comprar una tablet Galaxy Tab, ¿qué alternativas tengo?

Aunque al mirar la hoja de especificaciones pueda resultar sorprendente que Samsung no haya apostado por el último Snapdragon 845, pero las dudas sobre el motivo se despejan en cuanto empezamos a usar la Samsung Galaxy Tab S4. La fluidez no deja nada que desear, y utilizar un procesador de la generación anterior como el Snapdragon 835 es más que suficiente. Viene complementado con 6 GB de memoria RAM y 64 GB de almacenamiento (que se pueden ampliar hasta 512 GB mediante tarjeta microSD).

Pantalla soberbia, de lo mejor del segmento

A cargo del apartado gráfico de la Samsung Galaxy Tab S4 tenemos un chip Adreno 540 complementando la pantalla Super AMOLED, que es una de las perlitas de esta Samsung Galaxy Tab S4. No ya por la resolución (2.560 x 1600 píxeles), sino también por el soporte de HDR 10 (uno de los formatos de HDR más populares) y el AMOLED le hace un favor interesante al contraste de la tablet.

En contacto directo con la pantalla tenemos el SPen, que viene con la tableta para cerrar casi por completo la experiencia de la tablet premium. Y decimos “casi” porque, aunque seguimos echando de menos el teclado incluido, lo cierto es que realmente el SPen es una gran mejora en la experiencia.

Pasar del uso normal de una tablet al uso de Tablet+stylus no es fácil, y si nos falta costumbre con este tipo de dispositivo, tardaremos en convertir la novedad en productividad. Tiene muchas aplicaciones más allá del mundo artístico (que también), como las notas, la edición de imágenes o la digitalización del texto manual a máquina… pero hay que acostumbrarse a usarlo.

¿Qué es OLED?

El formato de la Samsung Galaxy Tab S4, de 16:10, resulta sencillo de manejar de forma ergonómica tanto vertical como horizontalmente. Además, el haberse deshecho del lector de huellas y la simetría de los altavoces hace que resulte una tablet cómoda en cualquier posición.

Ha llegado el momento de hablar del audio, donde la Samsung Galaxy Tab S4 puede sacar pecho con 4 altavoces AKG distribuidos en los bordes superior e inferior, que son el complemento perfecto para la pantalla a la hora de consumir contenido multimedia. Además siempre puedes utilizar auriculares con salida jack normales.

Rendimiento top de 2017, y sigue siendo bueno para 2018

Y es que si algo funciona, no hay por qué cambiarlo. Una tablet, incluso una tablet con teclado preparada para el trabajo como es la Samsung Galaxy Tab S4, no necesita un procesador capaz de realizar tareas mastodónticas. Es por eso que después de haberla probado (y haberla jugado con ella a juegos exigentes), podemos afirmar que haber apostado por el Snapdragon 834 como procesador ha sido un acierto.

Los cambios entre aplicaciones son rápidos, incluso con muchas aplicaciones abiertas a la vez. En el tiempo en el que he probado esta Samsung Galaxy Tab S4 para este análisis no he sufrido cierres sorpresa de aplicaciones, ni fallos, ni reinicios abruptos. Por una parte, es algo que cabía esperar en una tablet de este rango de precio, y más si acabamos de estrenarla... y sin embargo, no siempre conseguimos esta experiencia 100% libre de fallos, y resulta refrescante.

No os equivoquéis, no digo que la tablet sea inefable, y que esté a salvo para siempre de errores. Es muy normal que con el uso y la saturación de la memoria empecemos a ver problemas a medida que pasa el tiempo... pero no encontrar ninguno, aunque sea en una etapa tan temprana de su vida útil, es prometedor.

Qualcomm Snapdragon 835: un procesador eficiente

A Samsung (y finalmente al usuario) le hubiese salido mucho más caro incluir la última versión de la familia Snapdragon, el 845. Y como decimos, el juego es fluido en todas las situaciones, no nos hemos encontrado con problemas y los benchmarks, como veremos más abajo, respaldan al procesador.

Android 8 y Samsung Experience, cada vez una experiencia más limpia

Y con "cada vez más limpia" apuntamos a que sigue habiendo bloatware. Es cierto el firmware en esta Samsung Galaxy Tab S4 que no es tanto ni tan intrusivo, pero seguimos encontrando aplicaciones a las que no les damos ni les daremos uso.

Por suerte, y a favor de Samsung tenemos que decir que el firmware de la marca no se deja notar en el funcionamiento de la tablet. No encontramos retrasos ni intrusismo de aplicaciones, y el manejo es casi tan puro como lo sería Android stock. Supongo que la gran diferencia radica en ese "casi". En las siguientes capturas podéis apreciar cómo es la tablet recién formateada, donde sólo tenemos preinstaladas las aplicaciones de ofimática y las de Samsung oficiales.

El manejo es el que estamos acostumbrados a ver con los botones de Android, y cómo comentaba en el apartado anterior, lo más llamativo es que no haya nada llamativo que reportar (ni errores, ni reinicios, ni cierres de aplicaciones). Contamos con la familia de aplicaciones de Google, y con todo el surtido de las Play Store, tanto de Google como de la propia Samsung.

Respecto a nuestras "quejas" sobre el bloatware, tenemos que hacer una honrosa excepción: el menú Air Command del SPen. Me consta que hay gente a la que no le ha terminado de gustar, pero para mí tener más opciones sólo significan "mejora". Puede que no usemos tanto las aplicaciones como "Escritura en pantalla", para garabatear encima de una captura de pantalla... la verdad es que no se me ocurren muchos usos reales que el usuario final pudiera darle a esta función.

Sin embargo, hay otras que facilitan mucho algunos puntos engorrosos a la hora de manejar texto en pantalla, como "Smart Select", o la traducción instantánea. Eso sin contar con que podremos configurar este menú para añadir las aplicaciones que más utilicemos como accesos directos.

Además tendremos otros usos, como la posibilidad de tomar notas rápidas con la pantalla de la Galaxy Tab S4 apagada, o crear mensajes animados, que la verdad no hemos terminado de usar con comodidad pero que no suponen un problema: si no te gustan, no tienes que usarlos.

Cámaras

En las cámaras nos encontramos con un punto más de lo que cabría esperar de una cámara de tablet. Contaremos con modo retrato en la frontal, de 8 megapíxeles, mientras que la trasera no sólo cumplirá con las fotografías sencillas, sino que además nos permitirá grabar en 4k a 30 fotogramas por segundo.

Sobre las cámaras, lo más relevante que podemos decir es que son más que suficientes para una tablet. Es cierto que la trasera de esta Samsung Galaxy Tab S4 podría ser perfectamente la frontal en un móvil de gama alta... pero cumple con su función. Además del clásico apartado fotográfico hemos hecho un par de pruebas con videollamadas, y el resultado ha sido bueno.

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Fotos tomadas con la Galaxy Tab S4 (6 imágenes)

Aunque no tenemos que perder de vista que una tablet no es (ni nunca debería ser) una cámara fotográfica, lo cierto es que Samsung ha querido complementar su apartado fotográfico en esta Tab S4 con algún que otro detalle interesante, como es el modo bokeh en la cámara frontal. Es cierto que no tiene tanta potencia como otros modos bokeh que hemos probado, pero (una vez más, en este apartado) resulta suficiente. 

En resumen, el apartado fotográfico de esta tablet pasa de ser un complemento para videollamadas a un sistema con el que podremos conseguir imágenes de buena calidad.

Autonomía excelente para un tablet top con pantalla AMOLED y soporte HDR

La batería es otro de los ya bastantes puntos fuertes de esta Galaxy Tab S4. Samsung se ha preocupado de cuidar un aspecto fundamental teniendo una pantalla como la que monta, y teniendo un propósito tan evidente cómo es el de trabajar fuera de casa oficina o despacho.

La batería pasa de los 6.000 miliamperios de la Tab S3 a unos orgullosos 7.300 mAh, que nos ayudan a soportar no sólo un día completo, sino también alguna que otra tarea exigente. Pero no nos engañemos: con esta pantalla, su principal uso en nuestras pruebas ha sido el amortizar la cuenta de Netflix, y también aquí el AMOLED y el HDR han hecho acto de presencia, pero sin que se notase especialmente en el gasto de batería. Sí que recomendamos que, tanto por eficiencia como por comodidad, utilicemos el brillo automático que nos propone la tablet.

Sin embargo, todo se acaba y la batería de esta Tab S4 no es una excepción. Por suerte el tiempo de carga también ha estado a la altura, con una carga rápida que sólo se ralentizaba al llegar a 85-90% de capacidad. En total han sido algo menos de tres horas, consiguiendo un 50% poco más de una hora. Un 50% que, como decíamos antes, da para mucho.

Probablemente el mejor tablet Android de 2018

Parece que se está cumpliendo aquello que decíamos de que Android para tablets estaba quedándose atrás, y es que claramente la compañía está prestando más atención a su Chrome OS y ha descuidado algo la versión de Android para tablets.

Curiosamente, en cuanto a la interfaz Samsung no es de mucha ayuda en la Samsung Galaxy Tab S4 aparte de para dejarnos un puñado de aplicaciones preinstaladas de las que sólo acabaremos usando las del SPen y la tienda de aplicaciones de Samsung para instalar Fortnite.

Así que si os podéis permitir los 580 euros que cuesta esta Samsung Galaxy Tab S4, y estáis buscando una tablet que no os deje colgados, no podemos dejar de recomendarla. Eso sí, hay que tener en cuenta que el teclado se vende por separado y no es nada barato, así que no tendremos la experiencia completa sin hacer más inversión aún.