Xiaomi TV F2 Fire TV de 50”, análisis y opinión

El sistema operativo de un dispositivo incide de forma directa en su experiencia de uso. Y es por eso que, a largo plazo, el usuario decide qué sistemas operativos se convertirán en mayoritarios. 

Samsung o LG entre otros han optado por desarrollar sus propios sistemas, y Google TV se está posicionando como la opción más transversal entre los distintos fabricantes. Amazon, por su parte, integra FireOS en sus dispositivos FireTV y, ahora, también lo integran los televisores de Xiaomi.

Xiaomi TV F2 es la primera gama de televisores de Xiaomi en integrar FireOS de Amazon como sistema operativo, y lo hace volviendo a la esencia misma de Xiaomi con unos dispositivos con buenas prestaciones y unos precios que, en el caso del Xiaomi TV F2 de 50” se puede encontrar por 399 euros.

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Xiaomi TV F2 - Diseño (15 imágenes)

Resumen del análisis del Xiaomi TV F2 de 50” por apartados:

• Diseño y mando a distancia: materiales austeros para centrarse en un diseño práctico
• Calidad de imagen: cumple con el HDR básico, pero necesita afinar el color en SDR
• Software: FireOS con sus pros y sus contras: bien en fluidez, no tanto en experiencia de uso
• Sonido: audio con buenas intenciones que no da la talla en contenidos de cine
• Conclusiones: un televisor equilibrado para quienes buscan la mejor relación calidad precio

Materiales austeros para centrarse en un diseño práctico

Es más que probable que, cuando los responsables de imagen y sonido de Xiaomi pensaran en este Xiaomi TV F2 lo hicieran con el precio como uno de los principales argumentos diferenciales.

Todos sabemos que, habitualmente, cuando la puerta del precio se abre, la estética y la calidad de los materiales salen por la ventana. Esto no tiene por qué ser necesariamente malo. Puestos a elegir entre lucir una trasera más sofisticada o tener buena calidad de imagen, siempre elegiría la segunda.

En el Xiaomi TV F2 encontramos un diseño en el que prima la practicidad y la austeridad en los materiales de fabricación, siendo el plástico el ingrediente con más presencia.

Xiaomi ha tirado de libro de estilo apostando por un frontal en el que se impone un minimalismo que deja todo el protagonismo a la pantalla permitiendo un estrecho marco en los laterales y en la parte superior, mientras que el borde inferior es algo más grueso para dejar espacio para los botones, el LED de estado y el logo de la marca y de FireTV.

El televisor descansa sobre una pareja de patas laterales de plástico en color negro que se anclan a la parte inferior del chasis con un par de tornillos. Tal vez no sea un sistema tan elegante, pero es efectivo y barato.

En la trasera encontramos una carcasa de color negro a dos niveles que trata de minimizar el impacto visual del borde reduciendo al mínimo la anchura del televisor a medida que se acerca a los extremos, pero dejando el espacio necesario para alojar la electrónica interna.

Los conectores se agrupan en la trasera apuntando hacia el lateral izquierdo (al contrario de la mayoría de televisores que los orientan hacia el derecho), y la ausencia total de gestión de cables en la trasera los dejará colgando desde el lateral hasta la trasera del mueble.

Lo cierto es que el Xiaomi TV F2 no viene nada mal equipado en lo que respecta a conectores:

• 4x HDMI 2.0 (1 de ellos con eARC)
• 2 x USB 2.0
• LAN
• Salida óptica digital
• Tarjeta CI
• Coaxial TDT y Satélite
• jack de auriculares

Tampoco se deja en el tintero ninguna conexión inalámbrica incorporando WiFi 5 (802.11ac) de doble banda, Bluetooth 5.0 y soporte para streaming desde dispositivos con AirPlay 2.

El mando a distancia que acompaña al Xiaomi TV F2 es compacto y manejable. Está fabricado en plástico y los botones tienen un tacto gomoso. El diseño con la trasera curvada hace que se adapte bien a la mano, aunque sea propenso a deslizarse por no tener una base plana sobre la que descansar.

Nos habría gustado encontrar unos botones retroiluminados para controlar el televisor en la oscuridad, pero por lo que cuesta ya nos damos por satisfechos con que integre un botón para el asistente por voz Alexa de Amazon.

Además de los habituales botones numéricos y el control de volumen y canales, el mando del Xiaomi TV F2 incorpora algunos botones para controlar la reproducción del contenido y un pad circular en la parte superior para navegar por la interfaz con comodidad.

También cuenta con cuatro botones de acceso directo, de los cuales tres están dedicados en exclusiva a Prime Video, Netflix y Disney+, mientras que el cuarto nos lleva al panel de apps instaladas.

Cumple con el HDR básico, pero necesita afinar el color en SDR

Llegamos al apartado clave para cualquier televisor, pero que cobra especial relevancia en uno con un precio tan ajustado. ¿Merece la pena comprar un Xiaomi TV F2 por su calidad de imagen?

Lo cierto es que, definitivamente sí merece la pena. No nos malinterpretes, el Xiaomi TV F2 no ofrece la mejor calidad de imagen y comente errores evidentes, pero por 399 euros poco más se le puede pedir.

Nos encontramos ante un panel LCD IPS de 50 pulgadas con resolución 4K UHD (3.840 x 2.160 píxeles) al que se le ha integrado un sistema de retroiluminación desde el borde.

Este sistema es habitual en televisores de gama media caracterizándose por no ofrecer una distribución homogénea de la luz por toda la superficie del panel. En este caso Xiaomi ha hecho un buen trabajo y, aunque se aprecia un cierto viñeteado en las esquinas, la zona central de la pantalla queda igualada.

El brillo es el esperado en un televisor de gama media, con un promedio de 380 nits. Esto hace que el contenido en HDR no destaque en exceso y acusa una falta de viveza en los colores del contenido en este formato.

El contraste está muy bien trabajado, aunque queda algo deslucido cuando se está viendo el televisor en una sala iluminada ya que la pantalla carece de una lámina antireflejos eficiente, lo cual reduce el impacto de los negros en la profundidad de la imagen.

La configuración del color en los distintos perfiles de imagen del Xiaomi TV F2 no es la mejor del mercado, pero con algunos ajustes se consiguen unos resultados más o menos acertados en contenidos HDR, donde los metadatos dictan la pauta a seguir logrando unos negros bastante convincentes.

En cambio, en los contenidos SDR (Standard Dynamic Range), donde es el televisor quien decide el ajuste de color, el resultado es muy mejorable con unas pieles sobresaturadas hacia el naranja y una clara tendencia a quemar las zonas más iluminadas.

Como decimos, este es un problema que solo nos hemos encontrado en contenidos SDR de la TDT o televisión a demanda con cualquiera de los perfiles de imagen del televisor, pero no en plataformas como Netflix o Prime Video que ya emiten casi todo su nuevo contenido en HDR.

El Xiaomi TV F2 cuenta con un sistema de procesado de movimiento MEMC (Motion Estimation Motion Compensation) que inserta fotogramas en el contenido para que el ojo perciba un movimiento más suave.

Los resultados son aceptables en la mayoría de los casos, pero es inevitable ver estelas de imagen (ghosting) en escenas con mucha acción donde los 60 Hz nativos de la pantalla y la tecnología IPS no pueden dar más de sí.

Como ya vimos en el apartado de conectividad, el Xiaomi TV F2 viene equipado con puertos HDMI 2.0 pero, al habilitar el perfil de imagen Juego, se activa el modo de baja latencia (ALLM) para dejar un respetable Input lag por debajo de los 25 ms.

Con el modo Juego también se permite mostrar los juegos en HDR, aunque no con una tasa de 120 fps dado que la tasa del panel es de 60 Hz. Por lo que, pese a contar con algunas funciones avanzadas presentes en el estándar HDMI 2.1, este televisor no exprimir todo el potencial de las nuevas consolas y equipos para gaming.

FireOS con sus pros y sus contras: bien en fluidez, no tanto en experiencia de uso

Xiaomi se lanzó al mercado de los televisores de gama media con una serie inicial basada en modelos con Google TV. El éxito estaba garantizado ya que se trata de un sistema estable y con un buen soporte de aplicaciones.

Con el Xiaomi TV F2 la propuesta principal es un televisor que integre el sistema operativo de Amazon de forma que se obtiene la misma experiencia de uso que desde uno de los Fire TV de la compañía de Jeff Bezos.

Como en los dispositivos de Amazon, la interfaz de FireOS es bastante clara e intuitiva. Con grandes iconos por los que es fácil moverse y una zona principal en la que se agrupan las principales apps y el contenido recomendado de cada una de ellas.

Desde la Appstore de Amazon se pueden instalar las apps de las principales plataformas de contenido como Disney+, Netflix, Filmin o Apple TV, así como de las plataformas de televisión por Internet más destacadas como Pluto TV, Movistar+ o Orange TV, pero se ha echado de menos la presencia de otras como HBO Max.

El sistema se mueve con fluidez pese a contar con un hardware bastante discreto que apuesta por un procesador MT9020 de MediaTek con cuatro núcleos y GPU integrada Mali G52 MP2, 2 GB de memoria RAM y 16 GB de almacenamiento interno.

En la experiencia del día a día me ha faltado una mejor accesibilidad a determinados apartados de la configuración del televisor. Por ejemplo, que al pulsar un botón se puedan cambiar los ajustes de imagen o sonido que te permitan cambiar el perfil de imagen cuando quieres ver una serie, un programa de TV o escuchar música.

En cambio, FireOS te obliga a salir del contenido que estés viendo, ir a Inicio y desde ahí ir a los ajustes que necesitas y cambiarlos. Un sistema aceptable para una TV Box o un stick externo, pero no resulta cómodo para un sistema integrado en el propio televisor.

La principal ventaja de usar un FireTV es que Alexa se encuentra como en casa. En este caso, el asistente por voz de Amazon sirve de puerta de entrada para toda la conectividad con otros dispositivos del hogar pudiendo controlarse desde el control por voz del televisor.

Es una opción perfecta si tus dispositivos son compatibles con el ecosistema de Alexa, pero se dejan fuera a todos los que solo funcionen con el Asistente de Google. Algo que los principales rivales de este Xiaomi TV F2 compatibilizan ofreciendo soporte para ambos ecosistemas.

Las opciones de conectividad para los dispositivos no inteligentes del salón son bastante limitadas y solo se ofrece la opción de controlar amplificadores y equipos de sonido desde el propio mando del televisor, pero decodificadores de TV u otros dispositivos.

Audio con buenas intenciones que no da la talla en contenidos de cine

El apartado del sonido nunca es sencillo para un televisor de gama media, más si cabe cuando tiene que someterse a un ajuste de precio tan estricto como el que ofrece el Xiaomi TV F2.

Aun así, Xiaomi ha hecho un buen trabajo montando una pareja de altavoces de 12 W en la trasera que, sin grandes pretensiones, cubren el expediente entregando un sonido más que solvente en el que se dejan ver tímidamente los graves y se desenvuelve bien con los diálogos.

Cuenta con soporte para Dolby Audio y DTS- HD, pero no se moja con soporte para Dolby Atmos ni complicadas configuraciones de sonido envolvente virtualizado.

En definitiva, un audio honesto y sin pretensiones que cumple con creces en un contexto de precio ajustado, pero que resulta insuficiente para obtener una experiencia de sonido cinematográfico.

Un televisor equilibrado para quienes buscan la mejor relación calidad precio

Llegamos a la recta final de este análisis del Xiaomi TV F2 y tras usarlo como televisor principal durante las últimas semanas he podido sacar varias conclusiones claras sobre él.

Indiscutible no es el mejor televisor de la gama media, pero Xiaomi ha hecho un buen trabajo con un televisor de 50 pulgadas cuyo principal argumento de venta son los 399 euros que cuesta. Con esa premisa, pocos son capaces de hacerle sombra.

Xiaomi TV F2 50"

Una Smart TV de 50 pulgadas con la tecnología Amazon Fire TV integrada, control total con Alexa y streaming inalámbrico vía AirPlay.

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Más allá de su precio, el Xiaomi TV F2 cuenta con el reclamo de ser uno de los pocos televisores con FireTV integrado. Para bien o para mal. Eso ya depende de las preferencias de cada usuario y sus hábitos de uso.

Por todo lo demás, es un televisor de gama media que cumple con lo que se espera de una pantalla de este rango de precio: con margen de mejora, pero con una calidad de imagen y sonido suficientes para disfrutar de series y películas sin complicaciones y por precio muy ajustado.