Como ya te he contado en alguna ocasión, por diversos motivos, tengo más auriculares que orejas, por lo que no es extraño que alguno se quede en el fondo del cajón y no los use durante meses.

Eso es lo que me sucedió con unos Panasonic RZ-S300, unos auriculares Bluetooth TWS que tenía casi olvidados, pero que al ordenar el cajón descubrí de nuevo y pensé que vendía bien para ponerlos en contexto y compararlos con los Sony WF-C500.

Sin embargo, al intentar ponerlos a funcionar, la batería no respondía. Habían estado varios meses sin uso, por lo que es normal que no tuvieran batería, por lo que los conecté a un USB para cargar el estuche.

Mi sorpresa fue que no daba señales de vida ni cambiando de cable, conectándolo directamente a distintos cargadores ni dejándolo en carga durante varias horas. Los auriculares habían muerto –o mejor dicho su estuche de carga había fallecido— y nada se podía hacer por ellos.

Intrigado por el suceso decidí preguntar en las redes para ver si le había pasado a alguien más y…¡¡sorpresa!! No tuve que irme muy lejos porque a algunos de mis compañeros también les había pasado algo similar con auriculares de distintas marcas y modelos.

¿Por qué han dejado de funcionar mis auriculares Bluetooth?

Dicen que la curiosidad mató al gato. Gato no soy, pero de curiosidad voy sobrado, por lo que no pude más que tirar de contactos para intentar averiguar qué proceso interno había provocado que la batería quedara inutilizada y sin posibilidad de volver a cargarse con normalidad.

A mí me paso con unos auriculares por ser un dispositivo con una batería relativamente pequeña, pero podría sucederle a prácticamente cualquier dispositivo con batería, ya que es un problema inherente al funcionamiento de la batería y totalmente aleatorio.

Marc Bara, profesor de OBS Business School, comenta: “Las baterías recargables utilizan un mecanismo químico complicado para almacenar energía eléctrica. Las baterías de iones de litio, que se encuentran en la mayoría de los auriculares inalámbricos y otros dispositivos portátiles, degradan los electrodos positivo y negativo a medida que los iones de litio migran durante la carga y descarga. Este proceso puede resultar en la acumulación de materiales no deseados en la batería, lo que limita su capacidad de carga y longevidad”.

El profesor Bara daba un buen apunte que explicaría, por ejemplo, que los auriculares fueran reduciendo su autonomía en horas de uso, bajando progresivamente de las 8 horas de música que ofrecían cuando eran nuevos. Algo que probablemente ya has experimentado con tu smartphone, portátil o tabletas cuando llevas un par de años usándolos.

Simplemente, la batería dura menos. Pero ese no era el caso. Mis auriculares Bluetooth no habían sufrido ese desgaste por el uso, ya que se habían pasado los últimos meses sin usarse en un cajón.

Cristalización: el enemigo silencioso para las baterías de tus dispositivos

Mi profesión me permite conocer a personas brillantes que desarrollan muchos de los productos y dispositivos que meses o incluso años más tarde terminan en el bolsillo de millones de personas. La clave que ha resuelto el misterio la daba un responsable del desarrollo de baterías en una importante empresa tecnológica que ha pedido permanecer en el anonimato.

Según me cuenta esta fuente anónima experta en la materia ,”[…] la batería está formada por un electrolito en su interior que actúa como base en el que flotan los electrones que se mueven entre el ánodo y el cátodo de la batería en función de si se está cargando o descargando”.

“El problema es que el material del cátodo dentro de la batería podría seguir reaccionando con el electrolito en pequeñas cantidades en un proceso de "autoconsumo de la batería" y, aunque el dispositivo no esté en uso, este comportamiento de consumo de energía es una reacción química continua”.

“La batería está completamente cargada a 4,4 V, con el tiempo, el voltaje caerá por el proceso de autoconsumo que hemos mencionado hasta aproximadamente 0,7 V. Este cambio de voltaje conducirá a la reacción entre el material del electrodo positivo y el electrolito para producir productos insolubles que se materializan en forma de cristalización que anula su función y provoca daños irreversibles, es decir, la muerte de la batería”.

Por lo tanto, el problema es que, aunque no estés usando los auriculares (o cualquier otro dispositivo con batería) en su interior continúan los procesos químicos y eso puede crear una película de cristales que impiden el normal funcionamiento de los polos de carga y descarga.

¿Qué puedo hacer para evitar que la batería de mis auriculares muera?

Tal y como comenta esta fuente, la clave está en que el autoconsumo continuado hacía bajar el voltaje dañando el electrodo positivo, por lo que una de las claves será conseguir que ese voltaje nunca baje demasiado durante mucho tiempo.

Desde Nothing, la marca fundada por el carismático Carl Pei, y una de las que más están apostando por los auriculares Bluetooth últimamente con tres modelos en su todavía joven catálogo, nos dan algunas recomendaciones para cuidar la batería de tus auriculares y evitar que mueran.

1. No dejes que se agote la batería durante mucho tiempo

La primera recomendación es mantener la batería cargada evitando que pase semanas descargada. Es decir, no pasa nada si apuras al máximo las cargas del estuche. Está para eso.

Sin embargo, no es conveniente dejar el estuche sin carga durante semanas o meses favoreciendo la fatal cristalización de los electrodos. Una forma de evitarlo es haciendo cargas ocasionales a los auriculares aunque no los uses. De ese modo se mantiene el nivel de voltaje.

2. Mantenlos a una temperatura adecuada

La temperatura ambiente también contribuye a acelerar la cristalización en la batería. Lo recomendado es mantenerlos entre 0 y 35 grados y entre un 45% y un 75% de humedad.

Tal y como nos recuerda el profesor Marc Bara, “Las temperaturas extremas tanto frías como calientes pueden tener un impacto severo en el rendimiento y la capacidad de la batería. Por último pero no menos importante, incluso si no lo usa la batería pierde capacidad con el tiempo”.

3. Guárdalos siempre limpios y secos

La humedad puede dañar los contactos metálicos del estuche o de los auriculares, generando falsos contactos e incluso impidiendo que se carguen correctamente.

El sudor o la humedad por condensación, puede pasar inadvertida cuando los auriculares se usan frecuentemente y se airean, pero puede suponer un riesgo cuando se mantienen encerrados dentro del estuche.

El profesor Bara también recomienda mantener los auriculares inalámbricos limpios y secos cuando van a guardarse durante un período de tiempo prolongado.