Tiene muchos nombres diferentes: hongo de la muerte (Death Cap), oronja verde, ​ canaleja,​ oronja mortal, cicuta verde, y alguno más. La Amanita phalloides es la seta más venenosa del mundo, causante de la mayoría de las muertes por ingesta de hongos en todo el mundo. Gracias a CRISPR, tenemos el antídoto.

No es que la canaleja tenga un veneno más potente que otras setas venenosas, pero posee dos características que la convierten en la más peligrosa.

En primer lugar, se parece mucho a otros hongos que sí son comestibles, y eso hace que mucha gente imprudente se los coma, pensando que son buenos.

Pero lo más preocupante es su forma de envenenar, ya que lo hace lentamente. En las primeras horas provoca dolor de estómago, vómitos y diarrea, lo que hace que se confunda con una intoxicación alimentaria.

Estos síntomas se contienen unos días, hasta que comienzan a fallar el hígado y los riñones. En ese momento ya es mortal, salvo que se realice un transplante de órganos de urgencia.

CRISPR encuentra el antídoto

Tal como explica New Atlas, científicos de la universidad Sun Yat-sen de China,han descubierto el primer antídoto para el veneno del hongo de la muerte. Y lo más interesante es cómo lo han conseguido.

Seguramente has oído hablar de CRISPR, una revolucionaria tecnología que permite "cortar y pegar" fragmentos de ADN, casi como cuando nosotros cortamos y pegamos una foto dentro de otra, en el ordenador o el móvil. Tienes más información en esta tarjeta:

Qué es CRISPR, el corta y pega genético que cura enfermedades

Usando CRISPR, estos científicos han creado células humanas con diferentes mutaciones, y las han infectado con el veneno de la Amanita phalloides.

Así es que como descubrieron que los cultivos de células sin el gen STT3B, eran inmunes al veneno.

En otras palabras, el gen STT3B ayuda al veneno a infectar el hígado y el riñón.

El siguiente paso fue encontrar una sustancia que bloquee este gen en las células, lo que impediría actuar al veneno. Analizaron miles de compuestos y encontraron uno que bloquea este gen: verde de indocianina (ICG), un colorante utilizado en imágenes médicas.

Se ha usado como antídoto del hongo de la muerte en células humanas y ratones, y el 50% sobrevieron al veneno, frente a solo el 10% si no tomas nada.

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No es el antídoto perfecto, pero esto es porque resulta clave tomarlo lo más pronto posible. Según la investigación, para que sea lo más efectivo posible debe tomarse durante las primeras cuatro horas desde la intoxicación.

Este es el gran problema de este antídoto contra la oronja verde o canaleja creado con CRISPR ya que, como hemos explicado, sus síntomas mortales comienzan a aparecer pasados unos días. Pero es mejor que nada. Y, aún más importante, esta técnica se puede utilizar para encontrar nuevos antídotos para otros tipos de venenos.