La doctora Judy Melinek ha tenido a muchas personas fallecidas entre sus manos. En dos años, 262 cuerpos, que han perecido de causas muy diversas. Por eso se le saltan las lágrimas cuando recuerda las tres muertes más evitables.

Esta patóloga forense tiene una profesión muy dura: determinar la causa de la muerte de una persona. En toda su carrera ha tenido que examinar a cientos de personas fallecidas, y reconoce que se le parte el corazón cuando recuerda causas de muertes absurdas, que se podrían evitar fácilmente.

Quizá no se pueda prevenir una muerte por enfermedad, o que te caiga una teja en la cabeza, o sufras un accidente de coche. Pero esta patóloga forense reconoce que se ha encontrado con docenas de casos de personas fallecidas por algo tan simple como... no atarse bien los cordones de los zapatos.

Tres causas de muerte fácilmente evitables

La doctora Judy Melinek se ha vuelto viral en TikTok con el siguiente vídeo, en donde explica cómo personas jóvenes, en la plenitud de la vida, se han encontrado en la mesa del forense por acciones absurdas o fácilmente evitables.

Aquí puedes ver el vídeo, que ya lleva casi 100.000 likes, y millones de visitas:

La primera causa de muerte evitable ya la hemos mencionado: no atarse bien los cordones de los zapatos, o usar calzado poco estable.

Ha tenido que certificar la muerte de varias personas jóvenes, la mayoría con grandes cantidades de alcohol en sangre, por golpearse la cabeza tras pisarse un cordón del zapato, o tropezar por llevar grandes tacones. También ancianos por culpa del calzado poco estable.

Es un tipo de muerte que se puede evitar con una acción tan sencilla como utilizar calzado cómodo, o atarse bien los zapatos.

Stardust Space, la empresa española que enviará las cenizas de personas fallecidas al espacio, en cohetes de SpaceX

Otra muerte evitable es subir a una colina o acercarse a un árbol o a una farola, en un día de tormenta. Parece cosa de película, pero Judy Melinek ha confirmado varias muertes por la caída de un rayo. Durante una tormenta con rayos, no hay que acercarse a objetos altos que sobresalgan sobre el resto.

Por último, la tercera muerte absurda que relata este patóloga forense, es participar en uno de esos estúpidos juegos de asfixia, en donde la gente se pone una bolsa en la cabeza, o dejan que le aprieten el cuello, ya sea como reto, o como juego sexual. De nuevo, ante sus manos han pasado numerosos jóvenes muertos por uno de estos juegos / retos de asfixia. Tragedias fácilmente evitables.