El sencillo truco para ahorrar dinero en las suscripciones de Netflix, HBO o Disney que casi nadie utiliza

Para ahorrarnos unos cuanto cientos de euros al mes toca desengañarse de la idea de que hay que pagar por tener todos los servicios de streaming contratados a la vez. Esto no es necesario y cancelar la suscripción es tan sencillo como pulsar un botón.

En los viejos tiempos del cable y las televisiones de pago había que llamar a la compañía y rogarles que cancelaran el servicio, ahora es tan sencillo como darle a cancelar la suscripción y, cuando queramos volver, pinchar en suscribirse. Todo esto lleva unos segundos.

Pues bien, la manera de ahorrar dinero en la era del streaming es cancelar todos tus servicios ahora mismo. Literalmente hoy, de una. Luego, vuelve a contratar el servicio que estés usando ahora mismo porque haya una serie que te guste mucho o tengas a medias de acabar.

Seamos sinceros, no todos tienen algo que estés viendo ahora mismo. La gran mayoría de la gente no está viendo contenidos en Netflix, Disney+, Apple TV+ y HBO Max todos los días.

Por este motivo, lo que aconsejan es que, mes a mes, vayamos seleccionando qué series nos interesan o qué estrenos llegan a las plataformas y decantarnos por el servicio que más contenido atractivo tenga según nuestras preferencias.

Otra solución que la gente está probando: Compartir la contraseña. Un número significativo de personas lo hacen en los Estados Unidos, según los nuevos datos de Leichtman Research Group.

Date de alta en Disney+

Disney+ tiene cientos de películas y series clásicas y nuevas, y todas ellas las puedes ver desde 5,99€ al mes.

Date de alta

Este estudio dice que alrededor de un tercio de los suscriptores de Netflix en Estados Unidos comparten sus credenciales de acceso con otra persona, lo que es todo un dolor de cabeza para la compañía, como ahora veréis.

El intercambio de contraseñas de Netflix se ha convertido en un problema tan grave que la empresa de streaming ha puesto en marcha un proyecto piloto para abordar el problema. ¿El objetivo? Ver si puede exprimir el dinero del mayor número posible de usuarios.

Mientras tanto, compartir contraseña es tan legal y lícito como cualquier otro método, así que no es mala idea si lo que buscáis es ahorraros unos cuantos euros a final de año.