Acer, la primera en incorporar los procesadores Coffee Lake de Intel

La octava generación de los procesadores Intel Coffee Lake podría llegar en los próximos meses de la mano de Acer, según los últimos rumores que hemos conocido. Los listados de venta al por menor para una próxima renovación del modelo de portátil Acer Swift sugieren que Intel podría tener planes para lanzar una nueva línea de procesadores i5, que contaría con cuatro núcleos de baja potencia y llegarían al mercado antes de finales de año.

Según adelantan desde PC Perspective, el ACER-Swift 3, además de incluir la nueva GPU NVIDIA MX150, sería el primer ordenador portátil en contar con los procesadores Intel de octava generación. El Intel Core i5-8250U estará formado por cuatro núcleos -tal y como vemos en la descripción del ordenador portátil que protagoniza esta filtración-, y en este caso vendrá acompañado por 8 GB de RAM y un SSD de 256 GB.

Por lo tanto, Acer sería la primera compañía en incorporar los procesadores Coffee Lake de 8ª generación. El Intel Core i5-8250U llegaría después de que en 2016 fueran lanzados los modelos de 7ª generación Kaby Lake para hacer frente a los AMD Ryzen 7.

Sin embargo, la designación de i5-8250U como el nuevo procesador de la 8ª generación de Intel resulta confusa. De acuerdo con la hoja de ruta diseñada por el fabricante para este 2017, en la segunda parte del año llegarían los modelos Kaby Lake-R. Un detalle que nos lleva a pensar que el nuevo procesador i5 es más una mejora de características y que no será tan revolucionario como los Kaby Lake.

Coffee Lake, así es la octava generación de procesadores Intel

Siguiendo el historial de características de la serie U, la 8250U sería tradicionalmente una CPU dual core de 15W con hyperthreading habilitado y una frecuencia de base de 3.7 GHz. También contaría con cuatro núcleos de muy baja potencia, pero que pueden emular a ocho núcleos, dándole un rendimiento realmente impresionante sin apenas consumir energía o calor acumulado, de manera que la vida de la batería no se acorte.

Desde un punto de vista micro arquitectónico, la octava generación de procesadores de Intel seguiría siendo casi idéntica a los Skylake, lanzados originalmente en 2015. Sin embargo, destacaría por la presencia de CPUs de seis núcleos a través de la plataforma LGA1151.