Una bicicleta que vuela. Este es el último invento que ha dejado a más de uno con la boca abierta. Se trata de una bicicleta eléctrica con dos hélices horizontales propulsadas por baterías al frente, dos en la parte trasera y una en cada costado. Todas ellas están alimentadas por 6 baterías eléctricas que permiten levantar el peso de todo el conjunto y un maniquí, con el que se han hecho las primeras pruebas.

Un experimento inicial en el que el aparato fue manejado por control remoto. Como piloto por el momento fue empleado un maniquí, que consiguió despegar, volar durante 5 minutos y aterrizar sin mayores problemas.

No obstante se espera que para un futuro este aparato eléctrico sea controlado por personas, pero para ello será necesario la implementación de baterías de mayor potencia, debido a que el peso de la bicicleta eléctrica, que pesa 100 kilogramos, junto con la persona humana incrementaría mucho la resistencia y aumentaría en gran medida la necesidad de una mayor energía para poder elevarse y volar.

Los creadores de este proyecto, un grupo de empresas checas, encontraron su principal inspiración en los libros de aventuras o ciencia ficción escritos por autores de su propio país. 

Si el mes pasado el invento o gadget de moda fueron las impresoras 3D, quizá este mes, le toque a las bicicletas que vuelan.