Si a día de hoy hay algo que los smartwatch no tienen, es autonomía. Lo reducido de sus baterías hace que en el mejor de los casos aguanten unos pocos días antes de tener que cargarlo, un incordio para muchos usuarios y un obstáculo para su popularización entre un público más amplio.

Este problema tiene difícil solución, pues en un cuerpo tan reducido no caben más mAh, y a su vez cada vez se demandan más funciones, con el consiguiente gasto de batería. La idea salvadora puede ser de LunaR, un proyecto de crowdfunding para crear el primer smartwatch recargable con energía solar.

No es ni mucho menos el primer reloj solar del mercado, aunque sí el primero inteligente. Ya hay muchas marcas que ofrecen relojes solares o recargables con energía cinética, es decir, con el movimiento de la muñeca. Este concepto trasladado al mercado del smartwatch puede ser ciertamente revolucionario.

El proyecto, que puedes encontrar en la famosa web de crowdfunding Kickstarter, va sobre ruedas. Ya ha conseguido el doble de la financiación necesaria y siguen sumándose nuevos clientes, y es que el precio del smartwatch solar LunaR es bastante barato: 138$, mucho menos que otros dispositivos.

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Además de la hora -obvio- ofrece monitorización del sueño, de la actividad física diaria, compatibilidad con Android e iOS y otras funciones indispensables. Eso sí, no tiene aplicaciones pues el sistema operativo no es ni WatchOS, ni Android Wear ni nada que se la parezca, lo que lo deja más a la altura de las pulseras cuantificadoras que de los relojes inteligentes más competitivos del mercado.

Es una de sus carancias. La otra es que no tiene pantalla como tal, pues la esfera es un panel solar. Este panel hace que con una hora diaria expuesto a una luz de más de 10 Lux de intensidad la batería sea virtualmente infinita.