Exoesqueleto robótico ayuda trabajadores con cargas pesadas
Inés Pérez

No es traje de Iron Man, pero los astilleros de Daewoo han estado probando exoesqueletos robóticos que proporcionan al usuario una fuerza sobrehumana, informó el New Scientist.
Aunque la tecnología no es nada nueva, al menos en teoría, raras veces ha sido utilizada abiertamente en el campo, hasta ahora. Según la web científica, los nuevos trajes se están preparando para su uso regular en los astilleros de Corea del Sur.
Los trajes le valdrán a cualquier persona entre 1,60 y 1,85 metros altura y permiten al usuario a caminar a un ritmo normal. Los trabajadores no sienten el peso de su marco de 28 kilogramos de carbono, aleación de acero y aluminio, debido a que el traje se sostiene por sí mismo y está diseñado para seguir los movimientos del usuario.
Ejemplos de usos de exoesqueletos previos incluye el "exosuit" que ayudó a una mujer parapléjica a caminar y la persona que dio la patada de inicio de la Copa Mundial 2014.
Con una duración de la batería de 3 horas, el exoesqueleto tiene capacidad de movimiento natural del ser humano y, en su forma de prototipo, puede levantar objetos con una masa de hasta 30 kilogramos.

En la práctica, el traje permitirá que los trabajadores puedan utilizar maquinarias pesadas como si se tratara de simples herramientas de mano, lo que aumentaría considerablemente su productividad.
De acuerdo a algunos usuarios, todavía hay algunos problemas por resolver. Por ejemplo, los trajes no funcionan bien en superficies resbaladizas o desiguales, y no permiten realizar movimientos de torsión.
Sin embargo, el hecho de que, finalmente, se esté empezando a utilizar esta tecnología en el día a día, representa un gran salto adelante y que, sin duda, continuará.