En Samsung están preocupado por sus cuentas. Parece que en el primer trimestre de 2019 están obteniendo unos resultados bastante inferiores a los esperados. De forma periódica suelen publicar una guía con su estado económico para informar a los inversores y van a adelantar las cuentas con el objetivo de avisarlos de que el año no ha empezado todo lo bien que esperaban.

Según los datos que maneja Reuters, se espera que Samsung cierre el primer trimestre de 2019 con unas ganancias de 6,4 mil millones de dólares. Unos números preocupantes teniendo en cuenta que el año pasado ingresaron más del doble (13,8 mil millones) en el mismo periodo. En una semana se confirmarán las cifras, pero las expectativas que tenían para este año empiezan a tener algunas interrogantes.

Los principales motivos de esta caída están en la caída en ventas de chips y pantallas que les piden otras marcas. En un efecto dominó, además los precios de los chips están cayendo hasta en un 20% en muchos modelos. ¿Pero por qué ocurre esto? Uno de los principales motivos son las bajas ventas de iPhones.

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Apple anunció a principio de año que fabricaría menos iPhones por la baja demanda que están teniendo y en el acto de ayer se vio cómo están orientando sus esfuerzos hacia la venta de servicios. Los últimos iPhone no se venden tanto como se esperaba y esto arrastra a gran parte del sector.

La desaceleración económica en algunos países, las menores ventas de teléfonos de última generación a nivel mundial y la ligera caída que ha sufrido Apple con su último modelo, todo esto ha encendido las luces de alarma en la compañía coreana. A finales de 2018, Samsung advirtió a sus inversores de que existía un riesgo de menores ganancias por falta de demanda, pero no imaginaban que fuese tan fuerte.

¿Y ahora? Parece que Samsung se verá empujado a reconducir sus energías. Una de las salidas que están valorando con más fuerza es la inversión en móviles plegables. Esperan que colocarse entre las empresas a la cabeza de estos modelos les ayude. Pero como toda inversión, no hay nada asegurado.

De aquí a una semana sabremos hasta qué punto han afectado a la economía de Samsung las bajas ventas de los iPhone, pero muchos de sus inversores van a pasar unos días nerviosos por lo que pueda afectar a sus bolsillos.