Cuando se presentaron las HoloLens todo el mundo las relacionó con la industria de los videojuegos, pero pronto fueron apareciendo nuevos interesados en este dispositivo de realidad aumentada, sectores industriales, de construcción y muchos más vieron una oportunidad para mejorar la eficiencia laboral en sus empresas con estas gafas. Hoy las HoloLens han cruzado otra frontera, la militar, ya que Microsoft ha llegado a un acuerdo con el Departamento de Defensa de los Estados Unidos para fabricar los HoloLens para los soldados en que se encuentran en el campo de batalla. 

El acuerdo cuesta 480 millones de dólares, unos 374 millones de euros, y según indica el contrato firmado, esta colaboración "ayudará al ejercito a aumentar la letalidad al mejorar la capacidad de detectar, decidir y trabajar ante el enemigo". Esto confirma que el ejército estadounidense utilizará las HoloLens en sus misiones. 

Desde Microsoft explican que con sus gafas de realidad aumentada los soldados tendrán información adicional en tiempo real para ser más eficaces en el combate y tomar mejores decisiones. La compañía tendrá que proporcionar al ejército unas 120.000 unidades de HoloLens. 

Así es como funciona la óptica de Microsoft HoloLens

Estas gafas, que muchos jugadores de videojuegos de realidad aumentada ya han probado aunque aún no están disponibles para el público en general, se ajustan alrededor de la cabeza y proyectan en el cristal imágenes que se superponen a la visión del mundo real que rodea a la persona. El usuario puede interactuar con estas imágenes con gestos con la mano. 

Compañías como Ford y Volvo las usas para diseñar sus coches. Como ya hemos dicho antes, existen muchos ejemplos de compañías que han recurrido a esta tecnología no solo para mejorar el proceso de diseño o fabricación de su productos, sino que también la parte de venta. Por ejemplo, existe una ferretería en Estados Unidos que usa las HoloLens para ayudar a los clientes a imaginarse los tonos de las pinturas para las paredes. 

La NASA también se ha sumado a la lista de clientes de Microsoft, y usa las gafas de realidad aumentada para que los científicos hagan pruebas de exploración en Marte. 

El Departamento de Defensa solicitó una modificación en las gafas antes de acordar el contrato, quería que la visión nocturna y la capacidad de revisar los signos vitales como la respiración se incluyeran en las gafas. 

De momento parece que el contrato sigue adelante y aproximadamente dentro de dos años ya veremos soldados luchando con las HoloLens. A día de hoy se están poniendo a prueba pero por los reclutas en situaciones de entrenamiento.

Microsoft, como otras muchas empresas tecnológicas, lleva tiempo teniendo como cliente al ejécrito de los Estados Unidos e incluso los de otros países como Israel o Ucrania, y algunos de los proyectos anteriores no han sido del agrado de los propios empleados de la compañía que han pedido el cierre del proyecto Mave. Este nuevo acuerdo por el momento no parece haber suscitado ninguna polémica.