Un antiguo ejecutivo de las compañías Microsoft y Google advierte que detrás de las grandes inversiones en desarrollo de inteligencia artificial no sé está pensando en su efecto en el mercado laboral a corto plazo y el resultado podría ser un aumento de la brecha entre ricos y pobres. 

Kai-Fu Lee no causó buena sensación el pasado jueves en la Conferencia de Inteligencia Artificial 2018 en San Francisco. La mayoría de ponentes relataron las mejoras e innovaciones recientes de esta tecnología, así como sus beneficios en la sociedad y en industrias como la fabricación o la banca. Sin embargo, Lee decidió poner el tono amargo, este antiguo director de negocios en China está convencido que la inteligencia artificial perjudicará a los trabajadores de clase baja, mientras que los ricos se enriquecerán más. 

Según Lee, muchas personas perderán sus trabajos basados en funciones rutinarias al ser capaces las máquinas de realizar esas tareas de manera más eficiente. Esta eficiencia aportará más dinero a las empresas y por defecto a sus inversores y directivos. 

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El mensaje de perdidas masivas de empleo no es nuevo pero hasta ahora se había solventado asegurando que se crearían nuevos empleos, por lo que con formación los trabajadores podrían readaptarse, aunque esta idea suena poco realista y requeriría una conversión del mercado laboral que solo funcionaría a largo plazo. 

Otra investigadora, Meredith Whittaker especializada en ética e investigación de inteligencia artificial, corrobora la versión de Lee advirtiendo que aproximadamente solo 7 empresas poseen la capacidad de construir esta tecnología a escala, creando grandes monopolios. 

Ante la pregunta de un periodista sobre qué solución tenía este problema, Lee mencionó la redistribución de la riqueza, "Bill Gates habló sobre el impuesto al robot. Yo creo que se refería a un  impuesto más alto para las compañías más rentables. Algunas personas hablan sobre el ingreso básico universa, es un idea defectuosa, pero es un buen comienzo" explicó. 

A pesar de este mensaje desalentador, Kai-Fu Lee recordó que las contribuciones positivas de la inteligencia artificial para el medio ambiente o la atención médica entre otras muchas áreas.