Ay Google, Google... Qué sería de nuestra aburrida vida sin vosotros...

Recordáis cuando desde la empresa anunciaba mejoras en el cifrado de su servicio de correo electrónico Gmail? Aparentemente estas mejoras estaban enfocadas a reforzar la seguridad de los usuarios y protegerlos de accesos ilegales, y en especial, de la NSA.

Sin embargo recientemente hemos sabido, gracias a la última actualización de sus términos de servicio, que Google reconoce leer tus correos electrónicos. Pero por tu propio bien, eso sí...

"Nuestros sistemas automatizados analizan tu contenido (incluidos los correos electrónicos) para ofrecerte funciones de productos que sean relevantes para ti, como resultados de búsqueda y anuncios personalizados, y detección de software malicioso y spam. Este análisis se realiza cuando el contenido se envía, se recibe y cuando se almacena."

Esta afirmación ha generado una gran polémica en la red, pues no hace otra cosa que confirmar las prácticas que Google emplea habitualmente.

Este doble rasero de "proteger tu intimidad de todo el mundo excepto de nosotros" mediante la confesión de que Google lee tus correos,  no hace más que ilustrar el mundo en el que vivimos, donde los datos personales son un tesoro demasiado valioso para las empresas como para renunciar a ellos.

Y nosotros, como usuarios, lo único que podemos hacer es renunciar a estos servicios con el fin de proteger nuestra privacidad. Bueno, a estos y a Facebook, Twitter, Instagram, Vine, Foursquare, o cualquier otro servicio web en los que seguramente estés registrado.

No obstante, puede que sea algo malpensado y en realidad lo único que desea tanto Google como otras webs es ofrecerme un servicio ideal, donde todo lo que vea en mi ordenador sea de mi agrado y justo lo que necesito, protegiéndome además de los muchos peligros que habitan en el ciberespacio. O lo que es lo mismo, Google pasa a convertirse en nuestra madre virtual.

Llegará el día en que Google no sólo leerá nuestros correos para conocer nuestros más íntimos secretos, sino que puede llegar a bloquear el acceso a juegos online, pues es mejor emplear el tiempo en estudiar, o evitará que realicemos compras online ya que nuestra economía no está para gastos. 

Incluso puede que lleguemos a ver a Facebook eliminar fotografías de nuestros álbumes pues están pasadas de moda y no siguen un estricto canon estético.

Cuando llegue ese día, que comience la revolución antes de llegar a esto: