Un equipo de científicos alemanes ha conseguido hoy un nuevo récord mundial de transmisión inalámbrica de datos. Los investigadores han conseguido una velocidad de transferencia de 6 Gbps a una distancia de 36,7 km, lo que supone el equivalente de enviar el contenido completo de un DVD convencional en menos de 10 segundos.

Este hito se enmarca dentro del proyecto colaborativo ACCESS (Advanced E Band Satellite Link Studies), en el que participan la Universidad de Stuttgart y del Instituto Fraunhofer para la Física Aplicada al Estado Sólido de Alemania, entre otras instituciones.

La transferencia se ha efectuado entre las ciudades de Colonia y Wachtberg, y se ha establecido en la denominada banda E, en la frecuencia de radio de 71-76 GHz. Esta banda, que habitualmente se reserva para la radiodifusión terrestre y por satélite, se caracteriza por tener un rango de frecuencias de ondas milimétricas que permite grandes velocidades de datos. Gracias a esto se consiguen grandes velocidades de datos.

Uno de los retos que ha tenido que superar el equipo es el debilitamiento de las señales que se produce con las grandes distancias. Para poder transmitir la señal de banda ancha a través de varios kilómetros evitando este inconveniente, los investigadores han empleado transmisores y receptores eficientes basados en circuitos de ondas milimétricas totalmente integrados monolíticamente (MMICs). Estos circuitos utilizan una tecnología de transistores desarrollada por el Instituto Fraunhofer que está presente en otros sistemas inalámbricos de banda ancha que han batido récords en los últimos años.

Se marca un nuevo récord de velocidad de datos en fibra óptica

Los científicos han amplificado la señal del transistor hasta 1 W con ayuda de amplificadores de potencia basados en los compuestos semiconductores de galio-nitruro. El receptor cuenta con amplificadores de bajo ruido con transistores que utilizan capas de semiconductores de indio-galio-arseniuro, que tienen la capacidad de detectar mejor las señales débiles que viajan a través de largas distancias. 

El equipo considera que esta tecnología es una alternativa viable a la fibra óptica, especialmente para las conexiones a Internet desde los satélites y las zonas rurales.