Australiana se inventa un cáncer para hacerse rica y famosa

Vamos a tomarnos con calma este artículo, porque realmente contar toda la historia de Belle Gibson es complicado. Se trata de una chica australiana sencilla, que conquistó a las redes sociales contando su dura, pero increíble historia de superación personal. Según aseguró, una vacuna le hizo contraer un cáncer de cerebro terminal que sólo le dejó unos meses de vida. Y nadie se inventaría tener un cáncer terminal para ganar seguidores ¿verdad?

Después de su diagnóstico, Belle decidió que no podía dejarse llevar por el cáncer, así que abandonó todos los tratamientos médicos. Sí, según su propia historia, abandonó a los médicos y se marcó un Steve Jobs: en lugar de tratarse la enfermedad, adoptó una dieta sin gluten, hizo algo de ejercicio y se sumió en el pensamiento positivo. Todo esto por increíble que parezca... acabó por curarla. 

La vacuna española contra el Alzheimer está resultando ser efectiva

O lo hubiese hecho si hubiese tenido cáncer. Belle Gibsonacaba de confesar a Australian Women's Weekly que se lo inventó todo. Mintió sobre su condición médica, sobre su cura y lo peor de todo: mintió sobre el hecho de que una vacuna le produjo el cáncer. Esta mentira no habría tenido mucha repercusión si no fuese porque contaba con cientos de miles de seguidores en redes sociales. 

La gente la creía y confiaba en ella hasta el punto de que su aplicación, The Whole Pantry tenía 300.000 descargas y había sido una de las poquísimas seleccionadas para ser incluidas en el Apple Watch.

Y no acaba aquí. En un momento dado, Belle Gibsonaseguró que había donado 300.000 dólares a la caridad. El dinero, que había recaudado a través de diferentes actos benéficos, acabó en su cuenta personal. 

Ahora Belle Gibson ha desaparecido de las redes sociales, está ilocalizable en cualquier sitio web que se os ocurra y los últimos comentarios que ha recibido no son especialmente positivo. Es una buena noticia para los que se enfrentan los movimientos anti vacunas, que acaban de ver caer a una de sus figuras más importantes. Ahora sólo queda esperar que el público deje de hacer caso a este tipo de iniciativas.