Bacterias extraterrestes, el peligro de la exploración espacial
Cuando los exploradores españoles se dirigieron al Nuevo Mundo, llevaron con ellos tecnología, pero también enfermedades. Muchas de ellas acabaron por diezmar a la población indígena, un problemaque podría repetirse debido a lasmisionesdeexploración espacial.
Un grupo de científicos ha alertado delpeligroque suponen los microbios, bacterias y otros organismosextraterrestres. Todos ellos podrían viajar a la Tierra a bordo de algunas de las naves o sondas que la NASA y la ESA utilizan para explorar el Sistema Solar. Esta curiosa noticia científica ha pillado por desprevenidos a algunos de los expertos, que no contaban con esa posibilidad.
Estos microbios podrían ser tremendamente resistentes, y es que han sobrevivido expuestos a las duras condiciones de Marte o Europa, la principal Luna de Júpiter. Allí han sido bañados en radiación cósmica, algo que los haría duros de pelar en condiciones terrestres.
La precaución evidente para evitar contagios es el aislamiento. Las distintas agencias espaciales han comunicado que aislarán estos microorganismos hasta que comprueben si son o no un verdadero peligro para la humanidad. Es una medida que también se va a aplicar en sentido contrario, es decir, a los microorganismos que las misiones de exploración espacial llevan con ellos a otros planetas.
Las medidas de cuarentena son algo ya previsto por la ciencia, tanto en misiones anteriores como en la ciencia ficción. Un ejemplo es el universo literario de La Fundación, creado por el popular novelista Isaac Asimov, en el que se tienen en cuenta los contagios interplanetarios. Este hecho debería preocupar a los que como Elon Musk ven posible colonizar otros planetas en un futuro próximo.
En este último caso, la amenaza no es menor. De contaminar biológicamente la superficie de Marte, se podrían tirar por la borda décadas de esfuerzo e inversión en detectarvida extraterrestreen otros planetas. Simplemente las sondas enviadas acabarían encontrando allí las bacterias llevadas por nosotros mismos, haciendo virtualmente imposible comprobar si realmente hemos encontrado vida o no fuera de la Tierra.
[Fuente: Mirror]
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