Bye-bye Bird, el pájaro azul con Raspberry Pi que suelta una lágrima cada vez que alguien se borra de Twitter (vídeo)
David Pride
El pájaro azul de Twitter está triste porque miles de usuarios están abandonando la red social.
Tras la entrada de Elon Musk en Twitter, y el caos que ha provocado, muchos usuarios han decidido marcharse de la red social. A un tuitero llamado David Pride se le ha ocurrido construir Bye Bye Bird, un pájaro azul de madera controlado por una Raspberry Pi que derrama una lágrima cada vez que alguien abandona Twitter.
La idea es bastante graciosa, pero lo más interesante es ver cómo lo ha construido, y cómo funciona. Seguro que a Elon Musk no le hace demasiada gracia... o sí, porque es muy aficionado a los memes.
En primer lugar ha recortado el pájaro azul del logo de Twitter en una lámina de madera, y la ha pintado de azul. Un sencillo trabajo de marquetería.
Ha conectado la Raspberry Pi 4 a una placa que es capaz de mover un pulsador. Esta placa está conectada a un tubo con agua y una jeringuilla, que es la que va a soltar la lágrima por el agujero del ojo.
El pájaro de Twitter llora por los que se marchan
Puesto que la Raspberry Pi 4 también es un mini ordenador capaz de conectarse a Internet, lo que ha hecho este usuario es conectarse online a la API de Twitter. Esta API, entre otra muchas cosas, permite ver los hashtag que se están moviendo por la red.
Así que simplemente ha creado un pequeño programa que le dice a la Raspberry Pi 4 que libere una gota de agua de la jeringa a través del ojo del pájaro azul de Twitter, cada vez que la aplicación ve un tuit con el hashtag #RIPTwitter.
Es una forma de hacerlo, aunque la idea tiene un punto débil: se está borrando tanta gente al mismo tiempo, que la lágrimas se convierte en... un chorro de agua continuo capaz de acabar con la sequía. Puedes verlo al final de este vídeo en donde muestra todo el proceso de construcción de Bye-Bye Bird:
Una divertida broma que también tiene un punto trágico. Porque tal como el propio David Pride comenta en el vídeo, la idea se le ocurrió al ver como todos sus amigos se borraban de Twitter.
El consuelo de sus fans es que Elon Musk se mueve como pez en el agua en medio del caos. Tras despedir a la mitad de la plantilla y darse de baja otro 25%, Musk se ha quedado con la cuarta parte de los empleados, que apenas pueden mantener la red a flote. Con tremendos agujeros que han permitido cosas como compartir durante días películas y series por medio de tuits.
Y para combatir el caos, más caos: Musk ha fichado al mítico hacker rebelde George Hotz, alias Geohot, el primero que hackeó el iPhone y la PS3, que se ha ofrecido a trabajar tres meses gratis para arreglar Twitter. Un choque de egos de consecuencias imprevisibles.
Bye Bye Bird, el pájaro azul de madera controlado por una Raspberry Pi que derrama una lágrima cada vez que alguien abandona Twitter, es una divertida metáfora de lo que está ocurriendo. Veremos si Elon Musk es capaz de salir a flote.
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