Hoy, en la 26ª Conferencia General de Pesos y Medidas celebrada en Versalles (Francia), los representantes de 60 países del mundo han votado a favor de establecer un plan para redefinir varias unidades de medida. Esta votación favorable ha dado lugar a una nueva definición de kilogramo, así como la de otras unidades de medida populares, entre ellas el amperio (unidad de corriente eléctrica) o el kelvin (unidad de temperatura).

Hasta el momento, un kilo se definía como la masa que tiene el prototipo internacional, que se trata de un lingote fabricado con una aleación de platino e iridio, conocido con el nombre de Le Grand K, guardado bajo llave en la Oficina Internacional de Pesas y Medidas de Sèvres, cerca de París (Francia).

El Sistema Internacional de Medidas creó esta definición en el año 1889. Antes de eso, la primera definición de kilo señalaba que era la masa de un litro de agua destilada a una atmósfera de presión y 3,98 ºC. No obstante, esta medición era complicada de realizar con exactitud, motivo por el que se formalizó la masa exacta en un prototipo de kilogramo internacional, del que se hicieron varias copias. 

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Ahora, según lo acordado en la Conferencia General de Pesos y Medidas, tras 129 años siendo la referencia para medir la masa Le Grand K pasará a la historia y entrará en vigor una nueva definición de kilo. Este nuevo concepto no viene de cantidades arbitrarias o de artefactos físicos que pueden sufrir alteraciones con el paso del tiempo, sino que se basa en una constante fundamental de la naturaleza, conocida como la constante de Planck.

Aplicando el valor de la constante de Planck, la masa se puede medir de manera precisa en términos de corriente y voltaje gracias a un instrumento llamado balanza de Watt. El nombre de esta herramienta proviene del hecho de que la masa de un objeto es proporcional al producto de corriente eléctrica y voltaje, que representa una potencia que se mide en vatios. La balanza de Watt mide la corriente necesaria para soportar un peso, determinando de esta manera la masa que la muestra.

El cambio en la definición de kilogramo no se efectuará inmediatamente, sino que entrará en vigor el 20 de mayo de 2019. En la práctica, el valor de un kilo no cambiará, sino que permitirá que se mantenga invariable a lo largo del tiempo.