Cómo elegir unas galletas de supermercado saludables, evitar el aceite de palma no es lo único importante
Tarde o temprano casi todo el mundo, especialmente los niños, terminamos comiendo galletas industriales. ¿Cómo elegir aquellas que son más sanas?
Últimamente el aceite de palma está en boca de todos. O en menos bocas que antes, porque mucha gente está dejando de tomarlo debido a sus grasas saturadas, y a su impacto ecológico.
Cada vez vemos más productos de supermercado que indican que estás fabricados con aceite de girasol alto oleico. ¿Qué significa?
¿Es lo único que tenemos que tener en cuenta a la hora de comprar galletas de supermercado, o existen otros ingredientes aún más impactantes para nuestra salud?
La web Cuídate Plus, vía Business Insider, nos ofrece algunas recomendaciones.
El aceite de palma se ha usado durante años en todo tipo de productos de supermercado, porque es barato y fácil de transportar, ya que se mantiene en estado sólido a temperatura ambiente.
Sin embargo tiene una elevada cantidad de grasas saturadas, y cuando se calienta a altas temperaturas se forman compuestos químicos que son carcinogénicos, es decir, pueden provocar cáncer si se consume en elevadas cantidades.
En muchas recetas se está sustituyendo por el aceite de girasol alto oleico, que es un aceite modificado genéticamente para que produzca más ácido oleico, como el que tiene el aceite de oliva.
Tiene menos propiedades que este último, pero al menos es mejor que el aceite de palma, porque tiene menos grasas saturadas.
¿Es suficiente?
Comprar galletas que usen aceite de giraso alto oleico en vez de aceite de palma, es un primero paso. Pero no es el único.
Puede ser igual de perjudicial que las galletas lleven mucho azúcar.
En las etiquetas los ingredientes se ordenan por cantidad. Si unas galletas tienen como primer ingrediente el azúcar, descartarlas inmediatamente, o tomarlas solo muy de vez en cuando.
Otra dato que hay que comprobar, es el tipo de harina que lleva. Evitar las harinas refinadas y optar por la harina integral.
Y finalmente, no convertirlo en una rutina diaria. Comer galletas industriales de vez en cuando, no todos los días.
Teniendo en cuenta estos cuatro aspectos, podremos comer galletas de supermercado sin remordimiento de conciencia.
Otros artículos interesantes:
- Trucos sencillos para adelgazar la cara y perder la papada
- Oreo fabrica un búnker para proteger sus galletas ante el posible impacto de un meteorito
- Esta es la mejor manera de comer galletas de chocolate según la ciencia
- Nuevo Samsung Galaxy S24 Ultra: mejora la experiencia con la Inteligencia Artificial Galaxy AI
Descubre más sobre Juan Antonio Pascual Estapé, autor/a de este artículo.
Conoce cómo trabajamos en Computerhoy.