Logo Computerhoy.com

Cosas que las azafatas quieren que sepas y no se atreven a decirte

Andrea Gómez Bobillo

9 cosas más molestas que hacen los pasajeros según las azafatas de vuelo
Hay ciertos detalles que facilitarían mucho el trabajo de los tripulantes de cabina si los pasajeros lo supieran. En general, la empatía, la amabilidad y la paciencia son claves para que el vuelo sea agradable para todos aquellos a bordo.

Volar puede ser estresante, y los viajeros a veces permiten que sus frustraciones les lleven a ser maleducados con el personal de vuelo y con otros pasajeros.

Por ello, hay ciertas cosas que los tripulantes de cabina (TCP) desearían poder decirle a los pasajeros pero, por razones profesionales, no pueden. 

Como señalaba recientemente Carmen Nuevo, directora del centro Air Hostess Madrid, a Business Insider España, las funciones principales de un TCP son la seguridad en vuelo y de todos los pasajeros, pero también y no menos importante una atención al pasajero excelente.

Para cumplir con ello, hay pequeñas cosas que les gustaría contar, ya que facilitarían mucho su trabajo y los pasajeros deberían cuenta cuando pasan la puerta de embarque. Sigue leyendo para descubrir esas 7 cosas que las azafatas quieren que sepas

Date de alta en HBO Max España

Date de alta en HBO Max España

Si te gustan series como Friends, Los Soprano o Juego de Tronos, HBO Max tiene estas y muchas más en su catálogo.

Darse de alta

1. Un poco de paciencia y amabilidad facilitan el trabajo

La impaciencia se apodera de muchos pasajeros cuando surgen contratiempos que hacen que el vuelo pueda retrasarse, pero lo cierto es que los auxiliares de vuelo son los primeros interesados en despegar a tiempo. 

Para facilitar la labor del personal, no estaría mal hacer un esfuerzo extra de amabilidad y de paciencia, pues todos llegarán al mismo sitio a la vez. 

2. No camines por el pasillo sin zapatos

Pese a que haya limpiezas exhaustivas, la gente no es consciente de lo sucios que pueden estar los suelos de los aviones.

El personal recoge la basura entre vuelos, pero realmente los aviones reciben una limpieza a fondo una vez al día.

En general, déjate los zapatos siempre puestos. Si no lo haces por el bien de la gente que tienes a tu lado, piensa en la seguridad de tenerlos puestos por si ocurre una emergencia.

3. No pueden leerte la mente

Sería un milagro que la tripulación pudiese leer las mentes de los pasajeros, pero de momento no parece que eso vaya a ocurrir.

Por tanto, no siempre van a ser conscientes de las necesidades individuales de cada persona, e igualmente no pueden adaptar su servicio a cada viajero, algo que algunos parecen olvidar.

4. Quieren que les digas si eres un viajero nervioso

En la misma línea, es importante que los pasajeros con pánico a volar comuniquen su situación a la tripulación para que puedan tranquilizarles si es necesario. 

Los azafatos y azafatas pueden decirte qué hacer cuando hay turbulencias y saber perfectamente cómo actuar en caso de emergencia.

5. Asume la responsabilidad de tus decisiones en lo que a horarios se refiere

Un problema recurrente es la falta de planificación de los viajeros a la hora de reservar sus vuelos. Aunque creas que con 20 minutos te sobra para hacer una escala, puede que ese no sea el caso.

Sé más previsor con este tipo de cosas, ya que no va a ser culpa de la tripulación que por un pequeño retraso se estropeen todos tus planes.

6. No preguntes si el retraso en el despegue implica llegar tarde al destino

Los auxiliares de vuelo no son los pilotos y, por eso mismo, no tienen conocimiento de todo lo que puede pasar con cada cambio que ocurra de última hora.

Así que, por más que preguntes si el avión llegará tarde debido a la demora en el despegue, lo más probable es que no puedan saberlo con certeza

7. Odian que no guardas tu equipaje cerca de tu asiento

Todo lo relacionado con el equipaje de mano es un mundo en sí mismo. Evitar facturar maletas lleva a los pasajeros a llevar cada vez equipaje de mano más grande o voluminoso y, a veces, es difícil encontrar hueco en la cabina.

Pero lo que no se debe hacer es intentar colocar la maleta en cuanto se ve un hueco encima de un asiento en vez de caminar al que se tiene asignado y, una vez allí, tratar de acomodarlo. 

Esto hace que los huecos de delante se llenen rápidamente y los que están sentados en la parte delantera tenga que desplazarse hacia atrás para guardar sus pertenencias.

Este artículo fue publicado en Business Insider España por Andrea Gómez Bobillo.

Conoce cómo trabajamos en Computerhoy.