Un equipo de investigadores de la Universidad Estatal de Michigan y la Universidad de Maryland (Estados Unidos) ha desarrollado un sensor para el móvil que tiene la capacidad de medir la presión arterial del usuario con solo presionar la punta del dedo contra el terminal.

La presión arterial es un dato que resulta importante vigilar, ya que en caso de tenerla alta se tiene más riesgo de sufrir enfermedades cardiovasculares. La presión arterial es la fuerza que ejerce la sangre al fluir a través de los vasos sanguíneos. En caso de que esta fuerza sea demasiado elevada hay peligro de que dañe los vasos. Este trastorno recibe el nombre de hipertensión, y de acuerdo con los datos de la OMS se trata de la causa más importantes de enfermedades cardíacas y accidentes cerebrovasculares. 

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Con la intención de facilitar el control de la presión arterial para prevenir estos problemas, los investigadores han creado el prototipo de un sensor que podría integrarse sin dificultades en los teléfonos móviles actuales. El sensor consta de dos componentes principales: fotopletismografía (PPG), una herramienta óptica económica capaz de medir los cambios en el volumen sanguíneo, y un transductor de fuerza de película delgada, cuya función es la de medir la presión aplicada. 

Su funcionamiento es de lo más sencillo: el usuario solo tiene que presionar el dedo contra el sensor y un algoritmo se encargará de calcular su presión arterial. De acuerdo con sus desarrolladores, los resultados obtenidos con este sistema son igual de precisos que los que se registran con una medición convencional con un manguito.

"A nivel internacional este dispositivo podría suponer un cambio de juego", explica Ramakrishna Mukkamala, autor principal del estudio. "Si bien la presión arterial alta se puede tratar con medicamentos y cambios en el estilo de vida, solo el 20% de las personas con hipertensión tiene su condición bajo control. Nuestro invento brinda a los pacientes una opción conveniente, y mantener un registro de las mediciones diarias produciría un promedio preciso". El equipo continuará trabajando en su sensor para optimizar la precisión de las mediciones y hacerlo más pequeño.

[Fuente, foto y vídeo: Universidad de Michigan]