Desarrollan un robot que puede caminar igual que un ser humano

Un equipo de ingenieros del Instituto de Tecnología de Georgia en Estados Unidos ha desarrollado un robot que tiene la capacidad de caminar de una forma asombrosamente similar a la del ser humano. De acuerdo con sus creadores, se trata de la máquina que anda más parecido a las personas que se haya fabricado jamás: sus movimientos son precisos, naturales y sorprendentemente rápidos.

El nuevo robot ha sido bautizado con el nombre de Durus y está compuesto por unas extremidades inferiores antropomórficas y una caja en la parte superior similar al tórax.

Está equipado con muelles tanto en la planta de los pies como en los tobillos que imitan los tendones elásticos de las personas. Esta característica le permite almacenar energía mecánica al golpear con el talón en el suelo y recuperarla más tarde cuando el pie se vuelve a elevar, por lo que su consumo energético es muy eficiente.

A diferencia de otras máquinas que tienen los pies planos, los de este androide han sido cuidadosamente diseñados con forma de arco para reproducir un movimiento lo más parecido posible al de un ser humano. De este modo, el pie aterriza sobre el talón, desplazando después el peso hacia el dedo para avanzar.

"Nuestro robot es capaz de dar pasos más largos y rápidos que sus homólogos de pies planos porque replica la locomoción humana", explica Aaron Ames, director del Laboratorio de Tecnología de Georgia. "El comportamiento multi-contacto del pie permite también que su movimiento sea más dinámico, lo que nos acerca más a nuestro objetivo de permitir que el robot pueda caminar en las calles del mundo real".

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Otra diferencia que tiene Durus con otros robots es que su cintura está articulada, mientras que habitualmente esta parte es estática. La movilidad de la cintura, además de conferir una mayor naturalidad a los pasos, también permite que el androide se impulse de manera más eficaz hacia adelante.

El equipo de ingenieros considera que su desarrollo tiene potencial como para marcar el comienzo de la próxima generación de dispositivos de asistencia robótica, como prótesis y exoesqueletos, para ayudar a caminar a personas con movilidad reducida. 

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