La divertida imagen del Sol que sonríe, es preocupante para la Tierra
NASA
De vez en cuando las fotos científicas nos regalan curiosas imágenes capaces de alegrarnos el día. Aunque tenga un oscuro mensaje detrás.
La NASA ha publicado una sorprendente foto del Sol que sonríe. Es un perfecto ejemplo de pareidolia. Y también una visión preocupante, desde el punto de vista científico: un aviso de futuras tormentas solares.
La pareidolia es una característica psicológica de nuestro cerebro que, trabajando mano a mano con nuestra vista, nos hace ver formas reconocibles donde no las hay, produciendo una ilusión óptica.
La primera percepción que tenemos al ver la foto de la NASA del Sol sonriendo, son dos ojos y una enorme naríz, sobre una boca que parece sonreir. Incluso se puede apreciar la lengua.
Por supuesto, sabemos que eso es imposible. Pero incluso aunque la mires con atención e intentes ver la imagen real, te costará quitarte de la cabeza la figura de una cara sonriendo.
Qué significa este Sol tan alegre
Lo que realmente estamos viendo nos lo explica la propia NASA en el tuit en donde ha publicado la imagen:
"Vistas en luz ultravioleta, estas manchas oscuras en el Sol se conocen como agujeros coronales y son regiones donde el rápido viento solar sale a borbotones hacia el espacio".
En resumen, lo que estamos viendo aquí son vientos solares que, en muchos casos, terminan provocando tormentas solares que alcanzan la Tierra en un par de días. De hecho estos vientos solares que vemos en la imagen generaron tormentas solares que nos alcanzaron el pasado viernes.
Los efectos de estas tormentas son variados, según su intensidad. Alguna de ellas generan auroras boreales. Otras pueden estropear satélites, o poner en peligro la Estación Espacial Internacional, como ocurrió en 2005. Se habla de futuras tormentas solares que provoquen cortes de luz, e incluso que corten Internet por completo. Ya hay series que hablan de ello.
La divertida fotografía del Sol que se ríe es uno de los ejemplos de pareidolia más espectaculares que podemos observar. Una ilusión óptica del tamaño del Sol. Pero es también una muestra de los enormes vientos solares que acaban convirtiéndose en tormentas solares que alcanzan la Tierra, y algunas pueden producir problemas en los satélites e Internet.
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