El dolor de cabeza al tomar helado es fácil de evitar

Ahora que ha llegado el asfixiante calor es cuando muchos volverán a sentir molestias en la cabeza al tomar con rapidez una bebida fría o disfrutar de un helado. Esto se suele advertir mucho a los niños, pero es un mal que afecta a las personas sin que la edad sea un factor determinante.

El dolor que surge al tomar algo especialmente frío tiene varios nombres. De manera oficial, se conoce como cefalea por crioestímulo, lo que ya ofrece una pista de su causa, pero también es llamado congelamiento cerebral de una forma más coloquial.

El motivo por el que duele la cabeza con estos alimentos fríos obedece a un cambio en el flujo sanguíneo que se debe al contraste entre la temperatura corporal y la temperatura del alimento, la reacción es instantánea e inevitable.

La fría temperatura del helado o la bebida provoca que exista una rápida constricción de los vasos sanguíneos que provocan la inmediata respuesta de los nervios en forma de dolor de cabeza. Su llegada es tan rápida como su desaparición, no hay gradualidad, aunque la sensación puede alargarse varios segundos hasta que remite.

Según la información de El Horizonte, al menos un tercio de las personas experimentan en algún momento de su vida esa sensación que es definida como "Dolor frontal o temporal de poca duración que puede ser intenso, inducido en gente susceptible por el paso de material frío (sólido, líquido o gaseoso) por el paladar y/o la pared faringe posterior".

En cuanto a la forma de evitarlo, es la que tanto recomiendan cuando eres pequeño: tomar lentamente estos alimentos al principio para que el cuerpo los reciba y asimile sin violencia.