Esquí aéreo, el aerodeslizador del Duende Verde
Hay inventos que quizá deberían permanecer en el mundo de los sueños infantiles y las fantasías más inalcanzables, porque son muy difíciles de convertir en realidad. O quizá no. A fin de cuentas la Humanidad ha evolucionado porque un puñado de visionarios se empeñaron en alcanzar aquello que otros consideraban imposible. En un punto muerto entre la locura y la realidad se encuentra WindBoard, un proyecto de aerodeslizador del Duende Verde.
WingBoard ha sido desarrollado por una start-up llamada Wyp Aviation, y la Universidad de Ontario (Canadá). La idea es trasladar al cielo las sensaciones que se experimentan al deslizarse en una tabla de skate, o al practicar esquí acuático. Pero en el aire, en lugar de en el suelo.
Wyp Aviation ya ha estado realizando pruebas reales con un maniquí montado en el aerodeslizador, y han salido bien. Además han probado con personas reales montadas a baja altura, en un túnel de viento. Puedes verlo en este vídeo:
El nuevo juguete, llamado WingBoard, daría lugar a un nuevo deporte: el Wingboarding. Usar un deslizador para planear por el cielo, como el Duende Verde de los comics y las películas de Spider-man.
El proyecto es ambicioso y muy sensible, porque estamos hablando de una persona volando sobre una tabla propulsada, sin ningún tipo de protección. Por supuesto, iría protegida con un traje resistente a las caídas y un paracaídas, pero no deja de ser un deporte peligroso.
La idea inicial de Wyp Aviation no es volar libremente por el cielo con una aerodeslizador. Su objetivo es poner en marcha dos estilos de entretenimiento. Por un lado vuelo real en las alturas, pero con el aerodeslizador arrastrado por un avión en lugar de equipado con motores, tal como se puede ver en el vídeo.
Otra variante es crear túneles de viento en centros comerciales o Museos de la Ciencia para que los visitantes pueden aerodeslizarse a solo un metro del suelo.
El problema es que la tecnología es compleja, y tanto volar en el aire arrastrados por un avión, como construir un túnel de viento en un centro comercial para experimentar con el aerodeslizador, son ideas caras y poco rentables.
WingBoard, el proyecto de aerodeslizador del Duende Verde, lleva más de un año parado. No sabemos si ha sido abandonado, o está siendo rediseñado desde cero, y pronto tendremos novedades.
Existen sueños infantiles que incluso hoy, en la era de la tecnología, son muy difíciles de convertir en realidad. Pero en el futuro... ¿quién sabe?
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