José Carlos Rubio, un doctor en ciencias de la Universidad Michoacana de San Nicolás de Hidalgo (México), ha anunciado recientemente que ha logrado desarrollar un cemento lumínico que puede ser utilizada por iluminar carreteras, carriles bici, pasos de peatones o cualquier elemento de la ciudad sin necesidad de electricidad.

Este nuevo cemento lumínico también puede ser utilizado en la construcción de edificios y estructuras, dando como resultado edificaciones que durante la noche contarían con iluminación totalmente gratuita. Solo hay que pensar en que su uso en determinados lugares, como las carreteras, podrían ayudar a reducir la cantidad de accidentes.

Rubio explica que el cemento blanco en su origen es polvo, pero cuando se combina con agua se crea una especie de pasta o gel, lo cual provoca que aparezcan pequeños copos de cristal que bloquean la luz. Teniendo esto en mente, su idea fue eliminar todos los copos de cristal para convertirlo todo en un gel.

Al hacer eso el cemento adquirió propiedades para absorber la energía solar durante el día, y luego la devolvía en forma de luz durante la noche. Rubio añade que para esta investigación pensaron en la posibilidad de iluminar carreteras, caminos, aparcamientos, patios y fachadas de edificios, incluso el interior de una casa como en un baño o en la piscina.

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Al realizar esta modificación también consiguió darle más fortaleza al cemento otorgándole una duración de hasta 100 años, ya que la radiación solar no le afectará al ser absorbida para liberar su energía en forma de luz. Con un tiempo de carga de entre 10 a 12 horas, es capaz de emitir luz entre 8 y 12 horas de noche.

Sin embargo, de momento el coste de este cemento es entre cinco y siete veces más caro que el tradicional, motivo por el que actualmente están centrados en intentar reducir los costes lo máximo posible, pero sin reducir su calidad. Pretenden comercializarlo en la mayoría de países y sectores posibles.

[Fuente: AlphaGalileo]