Este llavero detecta alérgenos en la comida en menos de 10 minutos
Las reacciones adversas a la comida, como la sensibilidad a ciertos alimentos, las alergias alimentarias o las reacciones autoinmunes afectan al 5 - 15% de la población, por lo que constituyen un problema de salud pública considerable. Las personas que padecen alguno de estos trastornos necesitan un control estricto de lo que comen, ya que si ingieren alguno de los alimentos que les sientan mal sufrirán una reacción, que dependiendo de cada caso será más fuerte o más débil.
Por este motivo, disponer de un dispositivo capaz de analizar el contenido de las comidas resultaría de gran utilidad para muchas personas, ya que podría ahorrarles más de un disgusto. Pensando en estos usuarios, un equipo de investigadores ha desarrollado un aparato llamado Integrated Exogenous Antigen Testing (IEAT, Prueba de Antígeno Exógeno Integrado en español).
El IEAT se trata de una tecnología de detección portátil compuesta por un dispositivo de extracción de antígeno desechable, acoplado con un lector electrónico que efectúa una detección rápida. El aparato tiene el tamaño de un llavero, por lo que se puede colocar cómodamente en las llaves para llevarlo siempre encima.
La tecnología está optimizada para detectar cinco alérgenos alimentarios, que son los cacahuetes, las avellanas, el trigo, la leche y los huevos. Su uso resulta de lo más rápido y sencillo: el usuario toma una muestra de la comida con el dispositivo de extracción desechable y lo introduce en el lector electrónico. En menos de diez minutos, el IEAT identifica si el plato tiene alguno de los cinco antígenos indicados, y envía los resultados de manera inalámbrica a una app para el teléfono móvil.
El sistema presenta una gran precisión y sensibilidad, por ejemplo 0,1 mg/kg en el caso del gluten. Cuando se efectuaron pruebas en restaurantes, los investigadores pudieron detectar alérgenos en platos marcados como libres de ellos, lo que supone un gran peligro. Además, también hallaron alérgenos en platos y bebidas inesperadas, por ejemplo gluten en la ensalada o proteína de huevo en la cerveza.
El IEAT todavía se encuentra en fase de prototipo, y los investigadores esperan poder ampliarlo para que sea capaz de identificar otros alérgenos. Su coste es inferior a 40 dólares.
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