Por qué no deberías ir al baño "por si acaso" antes de salir de casa, según un prestigioso urólogo

¿Acudes al baño cuando ya no puedes aguantarte las ganas, o eres de los que prefiere "prevenir antes que curar"? Puede ser más importante de lo que parece.
El acto de orinar sin ganas antes de salir de casa, o cuando tienes que ir al clase, al trabajo, o en un viaje en coche, no es una buena práctica, según los médicos. Si lo haces a diario "enseñarás" a tu vejiga a darte avisos cuando esté medio llena, y te costará más retener las pérdidas cuando te hagas mayor.
Hay que reconocer que se trata de una práctica que llevamos a cabo casi todo el mundo. Sabes que vas a pasar un tiempo lejos de un urinario, o tienes una cita o una tarea en donde no quieres interrumpirla a la mitad para ir al servicio, y decides orinarsin tener muchas ganas, para vaciar la vejiga y aguantar más tiempo. Esto es habitual en los niños, y en las personas nerviosas o con ansiedad.
Si lo haces de vez en cuando no pasa nada, pero si es una práctica rutinaria que llevas a cabo varias veces al día, puede causarte molestias en el futuro, según el doctor Steven A. Kaplan, director del departamento de Enfermedades Uninarias Benignas en el prestigioso hospital Monte Sinaí de Estados Unidos.
Nuestra vejiga puede almacenar entre 400 y 500 mililitros de líquido, antes de dar la señal de alarma a nuestro cerebro. Eso es más que una lata de refresco.
El entrenamiento de la vejiga
Si orinamos siempre antes de que la vejiga esté llena, lo que hacemos en "entrenarla" para que nos avise de que está llena, cuando en realidad está a la mitad. Esto hará que se adelante la sensación de que nos orinamos, aunque en realidad la vejiga está a medias. Es un problema en las personas con ansiedad.
Otro problema añadido, explica el doctor Kaplan en The Healthy, es que como nuestra vejiga casi nunca está llena, porque no se lo permitimos, no estará entrenada para aguantarse, cuando tenga que hacerlo de verdad. Así que nos costará más retener el pis.
En lugar de orinar "por si acaso" o para prevenir, el doctor Kaplan aconseja reforzar los músculos que controlan la vejiga, para que podamos aguantar más tiempo. Como cualquier otro músculo, se pueden entrenar con unos ejercicios especiales llamados Ejercicios de Kegel.
Existe varios diferentes, pero la web gubernamental Medline Plus recomienda los siguientes.
Ejercicios de Kegel para entregar la vejiga
En primer, hay que encontrar los músculos que controlan la vejiga. Debes sentarte en el inodoro y empezar a orinar, corta "el grifo" a mitad del proceso, y recordar los músculos que has usado. También sirve fingir que intentas aguantarte los gases.
Estos son los ejercicios que debes hacer:
- Asegúrate de que la vejiga esté vacía. Siéntate o acuéstate.
- Aprieta los músculos del piso pélvico, los mismos que usas para orinar. Mantenlos apretados y cuenta hasta 3 a 5 segundos.
- Relaja los músculos y cuenta 5 segundos.
- Repita 10 veces, 3 veces al día (mañana, tarde y noche).
Con estos ejercicios de Kegel podrás alargar el tiempo requerido antes de sentir ganas de orinar, y cuando tengas ganas podrás aguantar más tiempo sin pérdidas ni otros problemas. Merece la pena ponerlos en práctica, porque además se pueden hacer mientras estas haciendo otras tareas, ya que nadie se da cuenta.
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