Cada cierto tiempo vemos una nueva propuesta que promete revolucionar la forma en que nos movemos diariamente, del mismo modo que los vehículos a motor cambiaron el mundo en su día. La realidad es que la mayoría de estos proyectos caerán en el olvido, aunque no serán inútiles puesto que servirán como referente para los que lo intenten en el futuro, hasta que una de esas ideas logre triunfar.

Por ahora, la Agencia Espacial Europea (ESA) está apoyando a una startup de Alemania que actualmente está centrada en crear el primer vehículo de despegue y aterrizaje vertical (VTOL) pensado para los consumidores. Quizás la idea pueda sonar un poco lejana, pero la realidad es que esperan contar con las primeras unidades a la venta en el año 2018.

Lilium Aviation es una compañía que fue fundada por cuatro ingenieros y estudiantes doctorados de la Universidad Técnica de Múnich, y actualmente forma parte de un programa de la ESA para lograr crear una nueva clase de transportes aéreos respetuosos con el medio ambiente, menos rudiosos y que sean más fáciles de tripular para el año 2018.

La firma está centrada en el modelo conocido como Lilium Jet, un VTOL de dos plazas eléctrico, de uso personal, con una batería recargable de 320 kW para impulsar sus turbinas tubulares, con tren de aterrizaje retráctil. Además, su control sería realmente fácil gracias al joystickfly-by-wire, disponiendo de ventantas panorámicas, pantalla táctil interactiva y gran capacidad de almacenamiento.

Para evitar problemas durante el despegue y el aterrizaje, estas acciones serían llevadas a cabo por un sistema informático, mientras que durante el trayecto un sistema de navegación por satélite ayudará a dotar al Lilium Jet de un alto grado de automatización, al mismo tiempo que se compensa la fuerza de las rachas de viento.

Aviones transparentes protagonizarán los viajes del futuro

Según la compañía, el Lilium Jet será capaz de viajar a una velocidad máxima de 400 kilómetros por hora con una altitud de crucero de 500 kilómetros. La ESA quiere que se convierta en un vehículo de transporte personal utilizado durante el día en buenas condiciones climatológicas.

Lo más importante es que el organismo europeo prevee que su uso quedará relegado a zonas aéreas no congestionadas a una altura máxima de 3 kilómetros. Además, solo podría ser utilizado por personas que cuenten con una licencia adecuada de piloto y completen, adicionalmente, un entrenamiento de 20 horas específicamente con este vehículo.

[Fuente: DigitalTrends]