Muere Aura, la lince que ha salvado la especie: 917 de los 1.365 linces ibéricos que existen, llevan sus genes
Antonio Rivas Salvador/Centro de cría del lince ibérico El Acebuche/OAPN-MITECO
El lince ibérico es el felino más amenazado del planeta, y también uno de los éxitos más rotundos de protección de una especie.
Aura, el lince ibérico más longevo que se conoce, ha fallecido en Doñana a los 20 años de edad. Esta hembra es, literalmente, la salvadora de la especie: 917 de los 1.365 linces ibéricos que hay actualmente, llevan sus genes.
El lince ibérico era el felino más amenazado del planeta, antes de su recuperación. En 2002, cuando nació Aura en Doñana, solo quedaban 97 ejemplares. Es una especie que solo vive en España y Portugal, y estaba en peligro crítico de extinción.
Nada más nacer, Aura ya estaba destinada a ser una de las dos hembras reproductoras que salvaría la especie. Gracias a un ejemplar programa de conservación del Estado español y las comunidades de Andalucia, Extremadura, y Castilla-La Mancha, en colaboración con Portugal, el lince fue poco a poco recuperándose.
El programa incluye el rastreo y vigilancia de todos los ejemplares, así como un complejo sistema de reproducción que mezcla nacimientos en cautividad, con otros de forma natural en la Naturaleza.
El legado de Aura, la lince que salvó su especie
Gracias a este rastreo se ha podido documentar la descendencia de Aura. Este ejemplar hembra ha tenido, a lo largo de su vida, un total de 14 cachorros.
Cruzados con otros ejemplares con distintos genes para mantener la diversidad, se sabe que los genes de Aura están en 917 de los 1.365 linces ibéricos censados el pasado verano.
Antonio Rivas Salvador/Centro de cría del lince ibérico El Acebuche/OAPN-MITECO
Se trata de una recuperación asombrosa. Como decimos, hace 20 años había menos de 100 ejemplares. En la actualidad el lince ibérico se distribuye en 13 núcleos poblacionales, 12 de los cuales están ubicados en España. En Portugal viven unos 200 ejemplares.
La muerte de Aura ha causado un gran pesar entre los miembros del programa de conservación Ex-situ del lince ibérico, ya que era el ejemplar más anciano y querido. Han grabado este vídeo, a modo de homenaje.
Aura dejó de procrear en 2018, y desde entonces ha permanecido en un centro de "jubilación", ya que se había acostumbrado demasiado a los humanos y era arriesgado liberarla.
Gracias a ella el lince ibérico ha dejado de ser una especie en peligro crítico, pero sigue estando en peligro de extinción. La brutal sequía de Doñana, y la sobreexplotación de los acuíferos, ha secado por completo el parque nacional. La sequía también ha reducido la presencia de conejos en otras zonas, el alimento principal del lince.
Aún son muchos los peligros que acechan al lince ibérico, por eso los expertos mantienen la vigilancia permanente, y los programas de conservación siguen activos.
La muerte de Aura, el lince ibérico más longevo que se conoce, que ha salvado la especie, es parte del ciclo de la vida. Sus casi mil descendientes son un legado enorme que perdurará, esperemos, durante los próximos siglos. Un espectacular ejemplo de que se pueden salvar especies únicas y maravillosas, cuando se dedican recursos y esfuerzo.
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