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Por qué no deberías quitar las hojas que caen en tu jardín este otoño

Por qué no deberías quitar las hojas que caen en tu jardín este otoño

Las hojas le dan un aspecto descuidado a los jardines, y eso es algo que muchas personas no soportan. Pero quitarlas es un gran error.

Cuando llega el otoño, es normal que el suelo del jardín se llenen de hojas secas, si hay árboles cerca. Lo más habitual es usar un rastrillo y quitarlas. ¡No lo hagas! Las hojas secas aportan innumerables beneficios al suelo.

Según explica Melissa Hopkins en IFL Science, naturalista de la National Audubon Society de Estados Unidos, las hojas secas "proporcionan entre el 50% y el 80% de los nutrientes que reciben los árboles. Nadie entra en el bosque para limpiar las hojas", explica.

"Además, las hojas secas protegen los niveles de humedad que llegan a los árboles y también regulan la temperatura del suelo. Así que son oro para los árboles", afirma esta experta.

Por qué son beneficiosas las hojas secas de otoño

Y está en lo cierto. Las hojas secas son un potente fertilizante natural. Contienen nitrógeno, carbono, fósforo y potasio que aportan nutrientes básico al suelo, indispensables para el crecimiento de las plantas. Además donde hay hojas, crecen menos malas hierbas.

No solo eso. Las hojas que caen en otoño también son un refugio e incluso un nido durante el invierno para infinidad de insectos beneficiosos para las plantas, que a su vez sirven de alimento a pájaros, y otros animales. Así que mantener las hojas en el jardín ayuda al medio ambiente y repercute favorablemente en la salud de tu terreno.

Resulta contradictorio molestarse en quitar las hojas y tirarlas a la basura, para luego comprar en el vivero fertilizante o mostillo, cuando eso es justo lo que son las hojas secas. Te ahorrarás trabajo y dinero.

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También es posible que en tu jardín tengas muchos árboles y el suelo quede completamente cubierto de hojas. Eso tampoco es bueno, porque las hojas no dejan que llegue la luz, y el césped y  otras plantas crecerán peor.

La mejor solución es pasar el cortacésped por encima de las hojas, para desmenuzarlas. Pero como decimos, no las recojas. O al menos, deja una buena cantidad. El resto las puedes pulverizar con el cortacésped o a mano, y guardarlas en un lugar seco para usarlas en el futuro como un fertilizante barato y de calidad.

Si tienes jardín no recojas las hojas secas de otoño cuando caen. Como hemos visto protegen a los insectos benefactores, regulan el nivel de humedad, evitan que crezcan las malas hierbas, y son un excelente fertilizante.

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